En los pasillos de algunos Ministerios de la Nación las paredes no sólo escuchan sino que además hablan, y mucho. Días pasados se pudo saber que algunos funcionarios con cargos de directores dicen informarse leyendo el diario de la familia Mitre, provocando así el murmullo de sus jefes, que son hombres de El Argentino bajo el brazo.

Con preocupación se escuchó comentar a un empresario que la Feria Internacional de Turismo 2013 se podría realizar en el predio de Tecnópolis. A pesar del éxito de público de la feria científica le cabían serias dudas acerca de la concurrencia, por la distancia hasta el lugar, y la falta de medios de transporte. ¿Será una FIT sólo para motorizados?

En el Ministerio de Suipacha 1111 resultó preocupante que a un funcionario de alto rango se lo viera recorriendo los despachos del piso 20 intentando incautar el suplemento de jardinería que desechan los lectores del diario La Nación. ¿Su avanzada edad lo estará haciendo pensar en un retiro en paz con malvones, rosales y margaritas?  

En la última reunión del CFT, su Presidente, Bernardo Racedo Aragón, hizo una encendida defensa del Ministro de Turismo de la Nación, Enrique Meyer, en contra de la actitud del Ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, Hernán Lombardi, en el acto de inauguración de Expo Eventos. Enojada con los dichos del tucumano una representante de la ciudad autónoma le habría confesado a la salida del conclave: “antes eras un gordo turro, ahora sos un flaco HDP”. ¿Qué boquita, no?


“Me quieren dejar en la calle. Tantos años de trabajo honesto y de repente me empiezo a encontrar con esto”, despotricó al otro lado de la línea una agente de viajes en destinos donde el rugby es furor. El interlocutor, ante semejante bienvenida, no supo más que decir: “¿Qué pasó?”. “ARBA, ¿qué va a pasar? que ya no sabe de dónde recaudar plata, vaya a saber para qué... una retención más al movimiento bancario me está dejando sin rentabilidad. CHAN!