La desregulación del transporte de mediana y larga distancia llegó al sector en octubre con un boletín que informaba que, además de la autonomía de cada empresa por sobre los recorridos y horarios, ahora los colectivos ya no estaban obligados a salir desde las terminales. En este marco, la Cámara Empresaria de Larga Distancia (Celadi) hizo un llamado de atención a las autoridades nacionales, ¿el motivo?, pedir para que se continúe garantizando la seguridad de los pasajeros en el transcurso del viaje con coches verificados.

Recientemente, la alarma se encendió cuando se conoció el vuelco en General La Madrid y dejó un saldo de 5 muertos y más de 20 heridos. Algunos de los testigos presentes dijeron que el coche no era lo que habían contratado e incluso barajan la posibilidad de desperfectos mecánicos y saturación del chofer del vehículo. 

 Una vez que el decreto n°883/2024  se publicó y las terminales pasaron a ser opcionales, nada garantiza la rigurosidad de los controles de seguridad a las nuevas compañías habilitadas para hacer viajes.
Una vez que el decreto n°883/2024  se publicó y las terminales pasaron a ser opcionales, nada garantiza la rigurosidad de los controles de seguridad a las nuevas compañías habilitadas para hacer viajes.

Del otro lado de esta tragedia se encuentra la otra cara de la desregulación. Una vez que el decreto n.º 883/2024  se publicó y las terminales pasaron a ser opcionales, nada garantiza la rigurosidad de los controles de seguridad a las nuevas compañías habilitadas para hacer viajes. 

Pero, en paralelo a esta realidad, existe un exhaustivo método de verificación con distintos niveles de complejidad en el control que se lleva adelante en Retiro, donde se implementó el Banco de Pruebas Dinamométrico denominado Rodillo, que permite evaluar el estado integral de las unidades y detectar irregularidades que ponen en riesgo la seguridad vial. Gracias a este sistema, en febrero se habían desafectado 43 unidades. Pero si tomamos las estadísticas hasta abril, fuentes cercanas a la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) le confirmaron a Mensajero que se controlaron 569 vehículos más, se emitieron 65 actas de infracción y se retuvieron a otros 8 vehículos. 

Las mismas fuentes puntualizaron en que antes de salir a la ruta, en cada terminal los agentes de fiscalización controlan documentación del vehículo, lista de pasajeros, medidas de prevención (matafuegos, sistema lumínico, estado de parabrisas y neumáticos). En lo que tiene que ver con el chofer, se verifica que cuente con licencia, documentación, además de realizarle el test de alcoholemia y, en algunos casos, de sustancias. 

Y al chofer se le verifica licencia, documentación, además de realizarle test de alcoholemia y, en algunos casos, de sustancias.
Y al chofer se le verifica licencia, documentación, además de realizarle test de alcoholemia y, en algunos casos, de sustancias.

Sin embargo, ese exhaustivo control no se garantiza para las unidades que salgan o arriben a los clásicos puntos de referencia. “Frente a un sistema que cambió y que planteó nuevas reglas de juego, sobre todo puntualmente al comienzo y al fin de un servicio, nosotros seguimos observando que los organismos de control se mantienen dentro de las terminales”, aseguraron a Mensajero fuentes cercanas a la Cámara Empresaria de Larga Distancia (Celadi). 

En contraposición, desde la CNRT comentaron a este medio que existen controles por fuera de las terminales de pasajeros y que “se van cambiando para que no sean esquivados”. Asimismo, describieron que algunos se encuentran en accesos al AMBA y otros en diferentes rutas nacionales, acompañados por efectivos de la Gendarmería nacional. No obstante, los dirigentes del sector consideran que son insuficientes frente a la cantidad de denuncias que han ocurrido desde la falta de regulación y la creación de aplicaciones como Carpooling, una modalidad de transporte que consiste en compartir un vehículo con otras personas que van a un mismo destino. 

“Insistimos en que haya más, mejores y permanentes controles por fuera de las terminales, porque precisamente quien quiere hacer una práctica ilegal del uso del transporte, como lo que nosotros llamamos ómnibus truchos o vehículos inhabilitados. Son los primeros en tratar de esquivar cualquier tipo de control, entonces eso obliga a que no solo sean esporádicos, sino que es necesario que sean permanentes, rotativos en las rutas para que no puedan ser detectados y sobre todo buscamos que sean sostenidos en el tiempo evitando rutas de escape”, concluyeron desde Celadi. 

 los trabajadores de este sector de transporte consideran insuficientes frente a la cantidad de denuncias que han ocurrido desde la falta de regulación y la creación de aplicaciones como Carpooling
los trabajadores de este sector de transporte consideran insuficientes frente a la cantidad de denuncias que han ocurrido desde la falta de regulación y la creación de aplicaciones como Carpooling

Si bien la medida desregulatoria mantuvo el visto bueno de las empresas debido a la mayor flexibilidad que se le dio a las compañías permitiendo otros servicios como el transporte de mascotas y la elección de horarios más convenientes para pasajeros y choferes, también ha generado serias preocupaciones en materia de seguridad operacional. La ausencia de controles sistemáticos previos a la salida —como los que se realizan en terminales mediante tecnologías especializadas y procedimientos de fiscalización exhaustivos— expone a los usuarios a condiciones de viaje potencialmente riesgosas. 

Relevos por postas: un pedido de los conductores que evitaría potenciales siniestros 

Tras la desregulación impulsada por el decreto 883/2024, muchas empresas han optado por una logística más flexible, pero también más exigente para su personal, lo que ha derivado en la sobrecarga de los choferes. Si a esto se le suma la falta de controles eficaces fuera de las terminales, se afecta no solo la seguridad técnica de los vehículos, sino también la verificación de las condiciones laborales de quienes están al frente de ellos.

Si a esto se le suma la falta de controles eficaces fuera de las terminales, se afecta no solo la seguridad técnica de los vehículos, sino también la verificación de las condiciones laborales de quienes están al frente de ellos.
Si a esto se le suma la falta de controles eficaces fuera de las terminales, se afecta no solo la seguridad técnica de los vehículos, sino también la verificación de las condiciones laborales de quienes están al frente de ellos.

La figura de la dupla de conductor único que releva luego de determinada cantidad de horas a su compañero, pero continua dentro del vehículo, demostró ser insuficiente, especialmente en las temporadas altas de verano. La falta de consciencia sobre el cansancio al volante no es solo una condición indeseable para el trabajador, también es una amenaza directa para la vida de todos los pasajeros.

Frente a este panorama, diversos sectores sindicales comenzaron a impulsar una alternativa viable, tomando como ejemplo a Brasil y algunos países de Europa. Se trata de la implementación de un sistema de relevos por postas. Este modelo permitiría que los conductores sean reemplazados en puntos intermedios preestablecidos, garantizando que ninguno exceda el máximo de horas permitido por ley y que todos puedan respetar los tiempos de descanso obligatorios. Además, se reduciría el riesgo de conducción bajo cansancio, se mejoraría significativamente la calidad del servicio y se evitaría costosas multas a las empresas por los excesos de los conductores.