Muchas provincias y ciudades han desarrollado fuertemente en los últimos años rutas temáticas que invitan a realizar un “recorrido” para conocer a fondo los orgullos de cada tierra. Por definición, una ruta temática es un eje vial que conecta dos o más centros emisores o receptores y que contiene un producto que comparten y funciona como atractivo turístico. La mayoría de estos recorridos temáticos están referidos a alimentos, por lo que, según el Banco Interamericano de Desarrollo, que en 1999 dio financiación al proyecto Rutas y Circuitos Alimentarios Argentinos, “una Ruta Alimentaria argentina es un itinerario que permite reconocer y disfrutar de forma organizada el proceso productivo agropecuario, industrial y la degustación de la cocina regional, expresiones de la identidad cultural argentina”.
Vino, yerba mate, aceitunas, manzanas y hasta fósiles: pareciera que en Argentina casi todo puede convertirse en un producto turístico. No es fácil contabilizar todos los caminos que rinden tributo a un elemento en particular, sobre todo porque cada vez son más, algunos que implican ya platos gastronómicos, como la Ruta de la Empanada, en Tucumán, o la del Flan Mixto, en la Capital Federal.
Son muchas y muy variadas, pero hay una serie de rutas temáticas que se destacan sobre las demás gracias a varios factores: antigüedad, calidad, arraigo del producto que promueven e identificación regional con ese producto. Por ello, Mensajero va a pasear, a lo largo de esta nota, de Norte a Sur, de Este a Oeste, por las principales rutas temáticas de la Argentina.

Una copa para empezar el viaje

La Ruta del Vino, en Salta, con Cafayate como epicentro de la ruta vitivinícola provincial cuenta con un centenar de bodegas y viñedos para visitar. La elección es difícil; todas tienen actividades tentadoras: visitas guiadas por las plantas de producción y viñedos, degustaciones, la posibilidad de participar en la elaboración del vino y clases dictadas por enólogos. Muchas de ellas también ofrecen excelente gastronomía y hotelería, y hasta tratamientos de spa derivados del vino.
En Tucumán se consolidó la Ruta de la Empanada, compuesta por 50 establecimientos gastronómicos distribuidos entre San Miguel, Yerba Buena y Famaillá, que permite visitar los locales donde se conserva la verdadera receta de la empanada tucumana, conocer sus ingredientes y cómo se confeccionan y degustan las diferentes variedades.

Paseando por el centro
En Buenos Aires, a menos de dos horas de Capital Federal, entre los Km 114 y 130 de la Ruta Nacional Nº 5, en la ciudad de Suipacha, se encuentra la Ruta del Queso, donde es posible degustar sabrosos quesos fabricados con recetas de todo el mundo. Además, el paseo incluye visitas a elaboradores de embutidos y criaderos de jabalíes.
Las rutas del centro del país nada tienen que envidiarle a sus pares: La Ruta de los Chacinados en Córdoba incluye dos itinerarios diferentes; hacia el norte contempla la producción del salame en Colonia Caroya y hacia el sur en Oncativo, salames y quesos de vaca y, la Ruta del Queso en Villa María, Luque, Villa del Rosario y James. Córdoba es la principal productora de leche del país y destina la mitad a la producción de quesos.
En Santa Fe, la Ruta de la Leche se erige como un gran atractivo turístico que busca poner en valor la cultura vinculada a la producción lechera santafesina. “La idea es integrarla como un producto novedoso y pionero turístico en la región centro de la Argentina”, le explicó a Mensajero Martín Bulos. Con “la idea es posicionar la cuenca lechera más importante de la Argentina”, según explica e secretario de Turismo provincial, hoy esta ruta tiene más de 160 adherentes, involucrando a 35 comunas y municipios, establecimientos lácteos y de derivados de la leche, como quesos, hotelería, y empresas turísticas en general.
Pero esta ruta va por un camino mucho más profundo que el del producto leche. “Lo importante es que en el recorrido uno va conociendo todas las corrientes migratorias de la provincia, italianos, judíos, protestantes, católicos, sirio-libaneses, suizos, entre otros”, destaca el titular de Turismo.
A partir del impulso de esta ruta Santa Fe ha entablado diferentes acuerdos para fomentar su actividad turística. “El 27 y 28 de octubre, en conjunto con FEHGRA, haremos la primera Fiesta de los Productos Lácteos, organizada por la Asociación de Turismo Rural (ADETUR), con cocineros y exhibición de productos de la ruta. Y acabamos de firmar un convenio con la Ruta de la Yerba Mate para trabajar en conjunto como rutas temáticas de turismo rural”, adelantó Bulos.

Yerba e historia en el Litoral

Inspirada en la bebida típica argentina, la Ruta de la Yerba Mate es un camino que simboliza la cultura de un país entero, abarcando las provincias de Misiones y Corrientes. El camino permite desarrollar diversas actividades, no sólo las vinculadas a la producción y elaboración de la Yerba sino también a la historia, con un menú especial en restaurantes de su recorrido y alojamientos cercanos para los que la quieran visitar sin prisa y con pausas. Es por eso que al tratarse de una ruta muy extensa se segmentó en circuitos con la idea de que los turistas puedan hacer algún tramo según donde estén: Cataratas del Iguazú, Misiones Jesuíticas, Saltos del Moconá o Esteros del Iberá. Con 180 emprendimientos la Ruta recibe más de 200 mil visitas al año. Naturaleza, museos, arroyos y paisajes náuticos, todo lo que tiene para ofrecer un camino bien argentino.

Cuyo, entre vino, olivos y fósiles
Para Mendoza su ruta temática más importante “es la de la Alta Montaña, la más destacada a nivel histórico, la tradicional, ya que implica todo lo vinculado a las actividades de invierno y al aire libre, con el Aconcagua como máxima expresión”, según explica el ministro de Turismo, Javier Espina. “Después aparecieron otras, como las vinculadas al Enoturismo, por la fuerza de producto vino en la provincia a la que se le incorporó luego la del Olivo”, añadió el titular de la cartera turística. Estas últimas dos son muy populares entre los turistas, ya que la Ruta del Vino permite conocer las bodegas reconocidas a nivel mundial y disfrutar de sus excelentes vinos. La del Olivo comprende la visita a plantaciones y  fábricas, y la degustación de exquisitos platos que ofrecen los principales restaurantes de la provincia de Mendoza.
Siguiendo en la región cuyana, aparecen los restos fósiles de la ruta de los Dinosaurios, que abarca el Parque Nacional Sierra de las Quijadas ubicado en San Luis, El Parque Nacional Talampaya en la La Rioja, el Parque Provincial Ischisgualasto en San Juan y Malargüe en la Provincia de Mendoza.
Los paisajes de Ischisgualasto y Talampaya impactan desde su belleza natural, y los restos de los antiguos pobladores de estas tierras tienen valor universal reconocidos por la UNESCO como “Patrimonio Natural de la Humanidad”.

Todos los caminos llevan al Sur
Río Negro, por su parte, se encuentra desarrollando nuevas rutas temáticas para apuntalar a su tradicional Ruta de las Manzanas, un producto característico del Alto Valle, en la que participan los productores locales.
En la misma zona, y como un nexo hacia otras provincias, los rionegrinos están trabajando en su Ruta del Vino. De la misma manera, se les está dando impulso a la Ruta del Jabalí y a la Ruta del Bienestar, esta última en El Bolsón, con la participación de complejos para la meditación, a fin de atraer a los turistas interesados en la medicina alternativa y new age.
También en la Patagonia, La Pampa alberga una de las rutas más culturales del país, La Ruta del Indio, especial para quienes busquen conocer no sólo un producto sino la cultura de un pueblo que, a pesar de su historia, continúa vivo para contar y mostrarle al público sus particularidades. “Más que la historia de un pueblo es la historia de un país”, contó a Mensajero un orgulloso Santiago Amsé, secretario de Turismo de la Pampa. “La Ruta del Indio Ranquel muestra nuestros orígenes y cultura. El que la recorre puede ver artesanías e incluso vivir la historia a través de la gente en un ese espacio donde la comunidad abre sus puertas para contarle a la gente su cultura, telares y artesanías”, señaló el funcionario pampeano haciendo especial hincapié en que no sólo es forma de atraer el turismo, sino también de preservar una cultura originaria.

El Pehuén tendrá su ruta
Argentina tiene rutas temáticas establecidas, otras en pleno desarrollo y algunas, como la del Pehuén, en Neuquén, que comienzan a tomar forma. “Creemos que tenemos en la región un diferencial geográfico que no lo van a encontrar en otro lugar y opciones totalmente diferentes desde las termas de Copahue, pasando por los ríos de Aluminé y su rafting pasando por sus cordilleras y su comunidades mapuches que están ahí nomás de la frontera que generan un ambiente distintivo que va a potenciar la zona. Estamos trabajando mucho desde el ámbito público y el privado aunque todavía falta configurarla venimos avanzando muy bien desde que se lanzó la idea y esperamos para el próximo verano ya tenerla armada”, contó a Mensajero Sebastián Caldart, presidente del Neuquentur. De esta manera, la principal expectativa desde la provincia, aparte de incrementar la demanda de turistas “es sinergizar los esfuerzos de las distintas localidades y complementar las ofertas que estos tienen, porque cada vez vemos más turista que no vienen a un lugar único sino a recorrer una región”.

 Convenio interministerial
Las rutas temáticas pertenecen a la órbita del Turismo Rural de nuestro país. Por eso, el segmento recibió como grata noticia que los ministros nacionales de Turismo, Enrique Meyer; de Desarrollo Social, Alicia Kirchner y de Agricultura, Ganadería y Pesca, Norberto Yauhar; presentaron un convenio que tiene como objetivo fortalecer las acciones sobre el Turismo en los Espacios Rurales de nuestro país.
“Este convenio pone a la luz la voluntad de aunar políticas en el Estado Nacional, reafirmando esta idea que muchas veces he compartido con la Presidenta de la Nación que refiere a que el  Turismo es capaz de generar trabajo digno a lo largo y ancho del país”, declaró el Ministro Enrique Meyer.