El Ente Administrador del Puerto de Rosario (Enapro) fue protagonista del encuentro regional de Cruceros y Turismo Náutico Fluvial, celebrado en Uruguay. Allí se propuso la creación de una mesa interdisciplinaria entre el país anfitrión, Argentina, Brasil y Paraguay.

Cómo es el proyecto para establecer actividad fluvial entre Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay

A lo largo de las dos jornadas, en la capital uruguaya, el Enapro planteó un proyecto que capitalizaría al máximo el potencial de estas cuatro naciones, extendiéndose más allá de la industria de los cruceros. 

El presidente del Enapro, Guillermo Miguel, explicó: “Queremos implementar una mesa portuaria interdisciplinaria articulando la función pública con el sector empresarial privado para que Argentina; Brasil; Paraguay y Uruguay trabajen en conjunto en materia de turismo extendiéndose a la actividad comercial; productiva y transporte multimodal fluvial”.

El Gestor de desarrollo turístico de la Nueva Terminal Fluvial de Rosario, Ricardo Terán, añadió que los puertos y organismos estatales coinciden con el sector privado en la conveniencia de reinstalar las rutas de cruceros. Las mismas conectan a la ciudad santafesina con las costas uruguayas de Piriápolis, Montevideo, Colonia y Fray Bentos. 

Además, Terán confirmó que todos los puertos cuentan con infraestructura básica para afrontar la operación de los servicios e incluso las obras planificadas a futuro. 

Frente a la encrucijada de explotación del turismo regional y extra regional de cruceros fluviales, el representante de la NTF consideró que hay que analizar la situación partiendo de las siguientes cuatro preguntas:

  • ¿Optaremos por el camino regional o desaprovecharemos una masa crítica de veinte millones de personas entre turistas y habitantes de la región?
  • ¿Gastaremos recursos para atraer turistas que paguen mil dólares diarios, valor estipulado por las navieras por cruceros expedicionarios, o invertiremos esos costos de promoción internacional a largo plazo en ayudar a los armadores y obtener una operatoria de corto plazo a nivel regional?
  • ¿Nos limitaremos a ver todo en términos de negocios o las autoridades y organismos estatales entenderán que la implementación de una línea de cruceros fluviales daría un salto de calidad y diferenciales a la oferta turística regional?
  • ¿Somos capaces de consultar a las navieras sobre qué tipo de infraestructura necesitaremos para recibir a las nuevas embarcaciones pensando en nuevos estándares de sustentabilidad y el nuevo combustible verde?