Planes para Semana Santa: recargar energías en Chubut
La naturaleza es el pilar fundamental en la vida turística del destino, con un sistema de 16 áreas protegidas, tres parques nacionales y dos patrimonios Unesco.
Chubut alberga zonas naturales vírgenes, las cuales son acompañadas de una rica cultura repleta de historia. En sus paisajes montañosos se encuentra inspiración y en sus espejos de agua, relajación. La naturaleza es el pilar fundamental de la vida chubutense, con un sistema de 16 áreas protegidas, tres parques nacionales, dos patrimonios de la humanidad.
Recorrer esta provincia es admirar colores vibrantes, compuestos por la flora y fauna de sus paisajes. Aquellos amantes de la naturaleza pueden visitar la provincia haciendo un recorrido de 20 horas en auto a través de la Ruta Nacional 25 (desde Buenos Aires) o por la vía aérea, aterrizando en el Aeropuerto Internacional General Enrique Mosconi a unos 11 kilómetros del centro de Comodoro Rivadavia o por el Aeropuerto Almirante Zar de Trelew.
Desde mayo, Puerto Madryn se posiciona como uno de los destinos más visitados por los turistas debido a la posibilidad de ver a las ballenas y toninas en su hábitat natural; sin embargo, no es la única de las localidades de la provincia que ofrece espejos de agua cristalinos, con experiencias únicas, educativas y para toda la familia. El comienzo del otoño, es una temporada ideal para visitar la provincia de Chubut.
¿Qué hacer en Chubut?
Con la impronta natural característica de la provincia, una de las experiencias imperdibles para realizar es el Bosque Petrificado Sarmiento. Este paisaje de más de 65 millones de años es una travesía al pasado remoto, en un escenario casi de ciencia ficción. Innumerables troncos, árboles, ramas, hojas, astillas y hasta semillas de especies que se elevaban más de cien metros que ahora están convertidos en piedra.
El Área Natural Protegida Bosque Petrificado Sarmiento está a 28 kilómetros de Sarmiento y a 156 de Comodoro Rivadavia. Es un monumento natural de 300 kilómetros cuadrados con un paisaje de película: suelo arenoso-arcilloso, cenizas volcánicas, cantos rodados, rocas basálticas y una diversidad de colores inesperada, enmarcada por los tonos del Cerro Abigarrado.
El recorrido cuenta con diversos miradores que permiten observar en toda su amplitud el Valle Lunar. En el circuito, millares de ramas, troncos de todos los tamaños, y otros restos fósiles de vegetales, de tonos marrones, rojos y amarillos se encuentran junto a los senderos o dispersos en el Valle, en un estado de conservación tan perfecto que parecen recién cortados.
Se puede acceder con auto particular, y la reserva cuenta con un recorrido estipulado a pie, de una hora de caminata aproximadamente. Está abierto al público durante todo el año.
- Piedra Parada:
Otra de las posibles actividades a realizar es la de Piedra Parada, una roca de 100 metros de base y 240 metros de altura que emerge junto al río Chubut. En el centro de la caldera, un volcán de 25 kilómetros de diámetro, cuya chimenea se solidificó, ofrece un escenario único en un Área Natural Protegida.
Hace 50 millones de años, en Piedra Parada se produjo una gran erupción volcánica. Parte de la lava se convirtió en rocas de diversos tonos, que se convirtieron en un paisaje imperdible. Esta experiencia es ideal para el trekking y el mountain bike. Junto a la imponente roca, en el ingreso al área, un sendero de tres kilómetros te sumerge en el Cañadón de la Buitrera, un pasillo de rocas de más de 100 metros de altura resguardado de los vientos.
Ubicado a la vera del Río Chubut, Piedra Parada también permite la pesca deportiva en diversos cursos de agua. Y es hogar de especies autóctonas endémicas, como el roedor chinchillón, además de aves y reptiles. Piedra Parada está sobre la Ruta Provincial 12, a 42 kilómetros de Gualjaina y 150 de Esquel y 130 de Paso del Sapo.
- Parque Nacional Lago Puelo:
Como parte de esta aventura se puede llegar caminando hasta el límite con Chile en medio de la frondosa selva valdivina, o navegando hasta la misma en un enorme espejo de agua color verde azulado. También se puede disfrutar de playas en un microclima extraordinario, mucho más benévolo que el resto de la cordillera.
En el Parque Lago Puelo se puede acamplar, pescar, andar a caballo y hacer kayak a 200 metros sobre el nivel del mar. El lugar se caracteriza por sus lugares de enorme belleza, como el nacimiento del río Puelo, los arroyos Las Lágrimas y Los Hitos, los bosques del Cerro Bajo y el Pitranto, el Bosque de las Sombras, la imponente vista desde el cerro Currumahuida, y los espectáculos de la cascada del río León y del cajón del río Melo.
Para acceder al Parque en auto se hace desde San Carlos de Bariloche, por RN 40 hasta El Bolsón y RP 16 hasta el Área Recreativa del parque (145 km). Desde Esquel, por RN 40, RN 258 y RP 16 (155 km). Otros medios de transporte. La localidad de Lago Puelo, a 4 km, recibe diariamente ómnibus desde Bariloche o Esquel. De allí es posible llegar en colectivo, taxi o remís.
- Sierra Colorada:
A 17 kilómetros de Trevelin se encuentra este paisaje que combina actividades al aire libre con historia y cultura mapuche. El recorrido cambia con las estaciones, pero mantiene su belleza sin importar la temporada.
Esta zona virgen, donde se movían los pueblos originarios desde hace cientos de años, se visita con un guía mapuche, en una travesía a caballo o a pie, donde podés conocer el maravilloso entorno de una manera diferente a partir de una cosmovisión que te ubica como una parte más de la naturaleza.
En la temporada invernal los más chicos pueden disfrutar de un parque con juegos en la nieve, trineos y deslizadores. Y, si lo permite el clima, todos pueden conocer los secretos de la vida mapuche a caballo o caminando con raquetas.
Para llegar al lugar en auto Trevelin se ubica sobre la Ruta 259 que se conecta con la mítica Ruta 40. Desde Buenos Aires se recorren 2005 kilómetros, mientras que desde la capital provincia, Rawson, se recorren 620, por las Rutas 25, 40 y 259.