El pacto, que aún debe ser ratificado por los reguladores australianos, permitirá a los usuarios de Virgin Australia acceder a 70 nuevos destinos y a los de Singapore Airlines a otros 30. Los pasajeros también podrán gozar de los beneficios de los programas de puntos de ambas aerolíneas y la red de salas de espera bajo este convenio, que entraría en vigor el 1 de agosto.
El consejero delegado de la aerolínea australiana, John Borghetti, indicó en un comunicado que "Asia es un mercado crítico" para la compañía, en plena expansión de su red de alianzas internacionales.
A principios de mayo, Virgin Blue se cambió el nombre a Virgin Australia con la intención de competir con Qantas en el mercado local. Singapore Airlines tiene el 49 por ciento de las acciones de la británica Virgin Atlantic y el resto pertenece al magnate Richard Branson, dueño de Virgin Australia.
El acuerdo se anunció un día después de que la estatal Malaysia Airlines hiciera pública sus intenciones de unirse a la alianza One World, lo que parece ser una puerta para que la compañía australiana Qantas se acerque al mercado asiático, según la prensa local.