Precedido por un fin de semana de lluvia torrencial, el Congreso de Calidad comenzó a pleno sol en la ciudad de Posadas, Misiones, disipando la vista y el oído. 

Esto quedó en evidencia cuando, tras algunas palabras de introducción durante el acto de presentación, el ministro de Turismo de la Nación Enrique Meyer desafió a todos los presentes: “Defiendan lo logrado, porque lo que hemos hecho es mucho”. Entonces, el clima se enardeció con los aplausos del público que, quizás sin saberlo, concluyeron uno de los primeros atisbos electorales por parte del ministro en nombre de la gestión actual. De esta manera, se dio comienzo al VIII Congeso de Calidad Turística.

En la mesa inaugural estuvieron presentes también el gobernador de Misiones Maurice Closs; el presidente de la Cámara Argentina de Turismo (CAT) Oscar Ghezzi; el ministro de Turismo de Misiones Sergio Dobrusin; Gonzalo Casanova Ferro, subsecretario de Calidad Turística; y el intendente de Posadas Orlando Franco. Aunque no estuviese en el escenario durante el comienzo del Congreso, también asistieron Javier Espina, presidente del Consejo Federal de Turismo, y referentes de las carteras provinciales.

Por su parte, Closs puntualizó en que en Argentina el turismo crece a mejores tasas que en el resto del mundo, mientras que Oscar Ghezzi elogió el trabajo realizado en Posadas en materia de calidad, destacando que eso también pudo ser posible gracias a las políticas turísticas a nivel nacional. Luego de la inauguración, el presidente de la CAT repasó la generación de empleo gracias al turismo, y el impacto de la actividad en las economías regionales. Dobrusin, además, mencionó la importancia de la mejora continua de los productos, y la necesidad de certificarse en buenas prácticas para brindar un servicio acorde a lo que se promete.

Buena asistencia
En materia de números, hubo casi 1000 inscriptos, si bien terminaron asistiendo 740; mientras que 1800 personas siguieron la convención por Internet en vivo. 
Las presentaciones fueron más de 25, entre las cuales se contaron cuatro disertantes internacionales, además de presentaciones especiales del periodista Diego Latorre y el compositor y director Ángel Mahler. Asimismo, durante el Congreso se realizó la segunda reunión del Instituto de Calidad Turística Argentina (ICTA). 

“Lo que nos llevamos del Congreso es que el tema de la calidad está consolidado en Argentina. Cuando empezamos en Salta en 2008 todo era a futuro porque había mucho por hacer, y no había una definición clara de cómo debía ser nuestro sistema”, dijo Gonzalo Casanova Ferro, que coronó: “Hoy eso es un capítulo concluido, y por suerte la apuesta es de crecimiento”.
Durante las disertaciones se presentaron nuevas tendencias y miradas sobre la calidad, refiriéndose a turismo, gastronomía, e incluso espectáculos. “Vimos testimonios de empresarios que pasaron por nuestros sistemas de calidad, y que hoy dan crédito de los beneficios que trae implementar las prácticas propuestas”, comentó Casanova Ferro. Asimismo, en cada exposición se incluyeron los tópicos de sustentabilidad y tecnología, no porque fuera un requisito para realizar una ponencia, sino porque esos son “transversales en el turismo”, según señaló el subsecretario de Calidad Turística. 

Por último, el funcionario midió la calidad en términos de rentabilidad, y la explicó refiriéndose a un cambio en el paradigma de los consumidores: “Hoy el cliente está más educado que antes, sabe mejor lo que quiere en relación a años atrás; por eso va al lugar donde sabe que lo tratarán como prefiere, y eso es la calidad también, comprender las necesidades de quien se acerca a tu establecimiento. Entender esto es fundamental para ser rentable”. Otro punto en el que hizo hincapié fue en el “saber definirse”, tanto en materia de hoteles, restaurantes, servicios y, principalmente, destinos. En esta línea, Casanova Ferro explicó que, para una mejor difusión, es preciso destacar el distintivo que tiene el enclave a promocionar, y no quedarse en la generalidad. “Todos tienen algo por lo cual destacarse, el tema es no desaprovechar esa virtud”, concluyó el funcionario.

Prepararse para todo
Ya en materia de voces locales, el director General de Turismo de Posadas, Oscar Degiusti, expresó: “El hecho que el Congreso se haga en Posadas redobla la apuesta para que sigamos trabajando. Así reafirmamos el trabajo de coordinación misionero, que no es fácil, pero es parte de todos los proceso de construcción colectiva en el campo del turismo, y en un tema que no es poca cosa, como la calidad”.

Además, Degiusti habló de los problemas que se producen en la calidad cuando la cantidad de turistas excede a la infraestructura que una ciudad puede proveer, y abogó por la unión: “Cuando esto sucede, nuevos municipios y empresarios se suman a la actividad, y tienen que encajar coordinadamente en un plan en conjunto. En el caso de Posadas, en principio tenemos una brújula que es nuestro plan estratégico, y de alguna manera es el que nos orienta”.

El funcionario explicó que Posadas es una ciudad que empezó a recibir muchos turistas en los últimos años, y que esto requiere trabajos de mejora constante. Para esto, el director General de Turismo de la ciudad aseguró que es clave trabajar con los privados, y realizar obras enfocadas al buen pasar del turista: “Acá tenemos turismo de ciudad, y tenemos que enfocarnos en eso, que excede a la naturaleza, aunque ésta nunca deja de estar integrada. Otro punto clave es la seguridad, no hay turismo de ciudad sin este punto”, subrayó.

Calidad local
En cuanto a Posadas también se manifestó Ariel Kremar, subsecretario de Capacitación y Control de Calidad municipal, y partícipe activo de la organización de este Congreso. Kremar  evidenció que fue una organización muy compleja, puesto que es una convención intensiva, por lo que agradeció la colaboración de todo su equipo, y de la gobernación municipal y provincial. 

“Tuvimos uno de los más bajos no-show en los Congresos de Calidad que hubo en el país, y lo atribuimos a que los temas fueron muy interesantes, los conferencistas de alta calidad, y la verdad es que si vas el primer día y te gustan los temas, venís los siguientes”, señaló el subsecretario. A su vez, elogió el trabajo de los gastronómicos, las atenciones de catering y salones.

“Tuvimos pocas quejas, que tuvieron que ver con sanitarios, horarios, disponibilidad de transporte, que nosotros no las desatendemos porque estamos hablando de eso. Nuestro compromiso con la calidad no nos exime de cometer errores, pero tampoco nos deja excentos de atenderlos”, añadió el funcionario. Los organismos posadeños tendrán una reunión para evaluar el desarrollo del Congreso y sus conclusiones. 

Finalmente, se refirió a una “resistencia” por parte de las PYMEs, ya sea desde el lado de los empleados como de los mismos empresarios. “Una vez terminado el momento inicial de resistencia, se puede generar mucha mayor conciencia sobre los beneficios de la calidad. Hay estándares establecidos, y no podemos quedar afuera, porque nosotros ya estamos dando ejemplos en otros países”, concluyó Kremar. 

Trabajo consolidado
En conclusión, el VIII Congreso de Calidad turística funcionó como un enclave para ratificar todo el trabajo realizado en este segmento de la industria, y para establecer el primer paso en lo que significará una extenuante carrera electoral, donde nada está definido todavía. Tomando como punto de partida las palabras el ministro Enrique Meyer, ahora sólo queda esperar por lo que vendrá, soñando pistas de quién será el o la que lo sucederá