El Consejo Federal de Turismo (CFT) finalizó su 132ª Asamblea en el Hotel Panamericano de Buenos Aires el pasaado miércoles 2 de diciembre.
Dentro de un ambiente más que distendido, los funcionarios provinciales y nacionales sesionaron bajo la luz tenue del salón del hotel porteño, mientras el sabor a despedida se iba sintiendo cada vez más. En efecto, gran parte de los que asistieron a esta reunión ya no estarán en la próxima. 
El cambio de Gobierno impactó notoriamente en el espíritu del CFT, que por momentos se mostró esperanzado mientras que en otros asomaron algunos temores que pusieron un velo de dudas. Una vez más, la incertidumbre de lo que vendrá se hizo presente, y afectó también al recinto político del turismo.

Ricardo Sosa, Presidente interino
La mención fue propuesta por Javier Espina, actual presidente del CFT, que deja su cargo el 10 de diciembre. 
Tras una breve explicación sobre el panorama que les espera en las próximas semanas, Espina comentó a los demás titulares de las carteras turísticas provinciales la idoneidad de Ricardo Sosa para este cargo, puesto que ya ha sido confirmada su continuidad dentro de las funciones públicas en Santiago del Estero; algo que no ocurre en el caso de otros secretarios o Ministros de Turismo. 
“Muchos de nosotros estamos terminando nuestra gestión en estos días, por lo que es nuestra última Asamblea. Hasta que se vuelva a conformar el CFT, que será cuando las nuevas autoridades decidan convocarlo, yo propongo (para que no se quede en una situación acéfala) que asuma la presidencia interina uno de los ministros secretarios que ya están elegidos, que es Ricardo Sosa, para que convoque al próximo Consejo con las nuevas autoridades”, dijo, y la decisión fue aceptada de manera unánime.
Así, Sosa será responsable de la transición hacia el nuevo Gobierno, y procurará el orden y la continuidad del Consejo Federal de Turismo.

Madurez política
Enrique Meyer, ministro de Turismo de la Nación, llegó un poco más tarde a la Asamblea, pero no por eso se privó de decir algunas palabras a los presentes. Ante todo, destacó la madurez política con la que se estaba realizando la transición presidencial y ministerial.
“Recuerdo, creo que el 4 de noviembre del ’99, cuando hubo otra transición de Gobierno; que en la última reunión del CFT (y hablo hasta de algunos de mi propio partido)  fue vergonzosa la actitud que se vivió. Ahora, en forma madura, estamos realizando una transición ordenada, seria, responsable, y democrática, como corresponde. Hasta estamos dejando un presidente interino. Quince años después, me alegro muchísimo”, manifestó quien próximamente será ex-ministro de Turismo, y completó: “Quiero terminar con una ovación y felicitarlos a todos por esta actitud, muchas gracias”. 
 
La despedida de Espina
El presidente del CFT, quien dejará de serlo el 9 de diciembre, también abandonará sus funciones públicas como ministro de Turismo de Mendoza, que pasará a convertirse simplemente en un Ente Autárquico, se despidió de los miembros del Consejo. 
“Hemos aprendido en este sector que las políticas públicas no tienen dueño, que se las apropian los actores y, especialmente, la gente. No hay un dueño del turismo ahora en Argentina, y no lo va a haber nunca, o esperamos todos que así sea”, señaló Espina, que aseguró que el balance de las Asambleas ha sido “más que positivo”.  “Quiero agradecer a los que estuvieron y los que estarán. Yo aprendí mucho de Enrique (Meyer) y de Gustavo (Santos), y espero que todo lo que se alcanzó se pueda continuar con esta nueva etapa”, agregó. 

El turismo como política sectorial
“Hoy no hay nadie en nuestro país que no vea al turismo como una actividad socioeconómica. Acentuamos fuertemente la creación de las Cámaras provinciales, y que haya una voz que sea del Turismo. No ha sido sencillo, pero se logró, porque el Turismo no produce celo ni fricción, al contrario, nos une. Lo poco o mucho que uno le ha aportado a la actividad es porque se ha hecho política por la actividad, y no por elementos partidarios. A muchos les ha costado entenderlo, pero hoy son los menos”, señaló Oscar Ghezzi, presidente de la Cámara Argentina de Turismo, durante su disertación en el CFT, mostrándose orgulloso del trabajo logrado durante los años transitados. 
En esta misma línea recordó que la CAT participó en todas las reuniones del Consejo, “y lo debo resaltar especialmente, porque fue una disputa histórica el hecho de si se podía o no”, dijo, y aseguró: “Quisimos que todos los sectores de la Cámara estuvieran presentes, por lo que fue muy participativo. Esta gestión marcó una forma de trabajo que se pudo compartir a nivel nacional y provincial. Nosotros hicimos una apertura para que toda la actividad privada pudiera participar de la entidad, y así generamos un concepto federal del país, y apuntamos al trabajo de las cámaras provinciales”. 

Despedida de Recalde
De alguna forma, ya con la propuesta del próximo Gobierno de poner a Isela Costantini al mando de Aerolíneas Argentinas, esta Asamblea fue también la despedida de Mariano Recalde, actual presidente de la aerolínea de bandera, que estuvo por última vez frente a los funcionarios del sector.
Recalde agradeció a los presentes por la colaboración y la comunicación constante, así como también algunos titulares provinciales le agradecieron a él por escuchar sus necesidades. En este sentido, concluyeron en que la gestión de Aerolíneas Argentinas en materia de conectividad había sido positiva.
Sin embargo, algunos planteos de los secretarios turísticos se proclamaron con cierto temor, y las consignas eran siempre las mismas: ¿Se va a mantener lo que se viene dando? ¿Se cumplirá el Plan de Negocios estipulado por la compañía? ¿Cómo asegurar que no se tirará todo abajo?
El presidente de AR pudo responder simplemente: “Las planificaciones de Aerolíneas deberían ser independientes de quién la presida. Los objetivos ya están establecidos, y deben cumplirse”. Sin embargo, también mostró algunas dudas sobre el accionar del próximo Gobierno en materia de conectividad o, mejor dicho, no pudo asegurar por completo que todo seguirá desarrollándose como viene proyectándose; puesto que no conoce las intenciones de Costantini.
En teoría, la idea es hacer a AR “más rentable”, pero no se dijo de qué manera.