Con más de mil embarcaciones, que se reúnen junto al puente Rosario-Victoria y navegan hasta la altura del Monumento Nacional a la Bandera, la Caravana de los Deseos bien puede considerarse una de las mayores fiestas náuticas del país. Unas 200.000 personas participan de este evento, tanto embarcándose como acompañando desde la costa, con una masiva convocatoria en el Parque Nacional a la Bandera. Desde allí este gran encuentro popular toma carácter ritual al entregar a la corriente del río un cofre donde durante el día se depositaron los mejores deseos y mensajes de la gente.
Como cada año, las embarcaciones de distintos portes que participen de la caravana partirán desde la altura de Costa Alta (a metros del puente) a las 19, recorriendo toda la ribera de la ciudad, para detenerse finalmente en las cercanías del Monumento Nacional a la Bandera. Serán escoltadas por la Prefectura Naval y el barco Ciudad de Rosario, que será una vez más el barco insignia en el que viajan las autoridades de gobierno, periodistas acreditados e invitados especiales.
Tal como viene ocurriendo en las ediciones anteriores, en el Parque a la Bandera habrá un cofre de los deseos donde los concurrentes podrán dejar sus mensajes para el próximo año, que luego será lanzado al río con el objetivo de que los pedidos lleguen a buen puerto y se cumplan durante el año entrante. Además habrá premios especiales para las embarcaciones mejor ornamentadas, que podrán participar en las categorías lanchas, veleros o cruceros.
Luego, habiendo caído ya la noche, y con las cerca de mil embarcaciones a la vista del Monumento, se podrá apreciar un gran show de fuegos artificiales. Quienes ya han vivido esta experiencia destacan que desde el agua, y con la silueta de la ciudad como fondo, los fuegos artificiales ofrecen un espectáculo inolvidable.