La Casa está en paz
Como si fuera un capítulo de Los Simpsons en horas de la tarde de cualquier fin de semana en Telefe, la historia entre empleados y empleadores, gremios y entidades empresarias, siempre se repite, y este año no fue la excepción, aunque con algunos atenuantes para algunos y una mayor carga de tensión para otros.
Clásico de clásicos
El ya clásico “tire y afloje” entre ambas partes, tal como sucedió el año pasado, llegó a buen puerto tras algunas amenazas que generaron más un efecto mediático que una respuesta real a la hora de firmar los papeles.
Sí, hubo diferencias, pero “el orden de los factores no altera el producto”. Este año, el acuerdo entre AAAVyT y la FAECyS se cerró con mucho menos ruido que en 2011, en un ambiente más calmo, mientras que desde UTHGRA se produjeron las mayores amenazas de “paros” para amenizar ese encontronazo anual entre empresarios y trabajadores.
De todas maneras, pareciera que ambas partes optaron por ceder un poco y no llegar al punto de tensión que rompiese la cuerda tensa que suele unirlos. Optaron por lo sano y los acuerdos salariales firmados tanto para hoteleros-gastronómicos como para agentes de viajes fueron similares al promedio de lo suscripto por las demás actividades económicas de la Argentina.
Agentes: Un 2012 sin conflictos
En definitiva, la Asociación Argentina de Agentes de Viajes cerró, antes de celebrar su gran Congreso anual y así evitando sumar un dolor de cabeza a una semana ajetreada, el acuerdo salarial 2012 con la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios.
Fue así que el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, junto a Osvaldo Cornide (CAME), Armando Cavalieri (FAECYS) y Carlos de la Vega (CAC) suscribieron al convenio para empleados de comercio que comprende a más de un millón de trabajadores, que lleva el sueldo mínimo a $5.032 y que fue homologado el 13 de junio pasado.
En términos generales, se trata de un aumento total del 24 por ciento, a ser abonados en dos etapas, no remunerativas ni acumulables. Primero un 15 por ciento en mayo (se liquidó en el recibo de sueldo como rubro separado denominado “acuerdo colectivo mayo 2012” y a partir del mes de Noviembre de 2012 pasará a tener carácter remunerativo y se incorporará a los básicos de convenio de actividad) y luego un 9 por ciento hacia fin de año, en noviembre (incorporándose en Junio de 2013 al sueldo básico, al comenzar a tener carácter remunerativo). El objetivo de esta movida “técnica” es que el trabajador “no sufra merma en su ingreso real y siga percibiendo el mismo salario de bolsillo”.
Además, cabe aclarar que el incremento no remunerativo concedido será utilizado establecer la base de cálculo de los siguientes rubros: sueldo anual complementario, horas extras, y feriados, adicionales fijos (excepto antigüedad), enfermedades y vacaciones anuales percibidas a partir de 2012.
Quedaron en el olvido todas las marchas, protestas frente a la AAAVyT, el Sindicato de Comercio y otras acciones que los “empleados de agencias de viajes autoconvocados” realizaron a esta altura del año, pero en 2011. Es cierto que en mayo pasado, al comienzo de las negociaciones, muchos empresarios temieron que sucediera algo similar, cuando comenzó a circular un volante de los trabajadores que rezaba: “Por un 30 por ciento en todo lo que percibe un trabajador, que las empresas paguen de acuerdo a lo que ganan. No a las sumas no remunerativas y en cuotas. No al aumento a conveniencia del empresario”.
En plena gesta de esa protesta que nunca fue, Mensajero Turístico dialogó con uno de los representantes de los empleados autoconvocados de agencias de viajes, que por entonces prefirió no revelar su identidad. “Pensamos que los empleados de agencias de turismo ya hemos sufrido bastantes avatares por esto y ellos (los empresarios) no se dan cuenta. Primero por las cenizas, o por otras cosas, pero siempre dejan nuestros reclamos afuera. Nuestro reclamos no están descolocados, sabemos que el Turismo fue lo que más creció en estos últimos tiempos.”, había exclamado con firmeza el trabajador.
Mucho ruido…
Lejos ya quedaron las presiones de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA), liderada como siempre por Luis Barrionuevo, para lograr un incremento del 30 por ciento. Incluso llegaron a afirmar que iban a tomar medidas de fuerza de ser necesario, tal como acordaron cuando realizaron un Congreso para tratar la problemática ante la falta de respuestas desde las Cámaras empresariales.
“Tenemos pensado comenzar con quites de colaboración para seguir con paros en distintas regiones y posteriormente con un paro nacional; no aceptamos que el gobierno quiera imponer un tope de aumento ya que las paritarias son libres y se discuten con los empresarios; este año terminamos de cobrar el 34% que se acordó en varios tramos en 2011; en realidad fue un aumento insuficiente ya que el alza de los precios fue mayor”, se había quejado Barrionuevo.
Tenía bases para su pedido, porque en julio del año pasado, se anunciaba con bombos y platillos que el gremio de gastronómicos conseguía una suba importante con respecto a sus salarios (que llevó el salario inicial de un mozo a los $3.800), beneficiando a 250.000 trabajadores. Pero en 2012, la realidad para los trabajadores del gremio hotelero-gastronómico fue otra.
La Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (FEHGRA) firmó con UTHGRA el acuerdo salarial 2012-2013 que otorga un aumento del 25 por ciento, que se integrará escalonadamente hasta su vencimiento, que será en el mes de mayo de 2013.
Al respecto, el presidente de FEHGRA, Oscar Ghezzi enfatizó: “Los empresarios hemos hecho un esfuerzo importante para que los trabajadores se sientan reconocidos y valorados por su labor cotidiana”.
Y añadió “el diálogo y el constante y dedicado trabajo llevado a cabo por la Comisión Paritaria de FEHGRA, integrada por representantes de todas las Regiones del país, han sido fundamentales para lograr este acuerdo”.
Hasta el año que viene
Tras los acuerdos de los agentes de viajes y los hoteleros-gastronómicos, se extendió el plazo de relativa “paz” que garantizan los aumentos salariales. En el mientras tanto, 2013 será cuento de otro libro (pero de la misma saga) para esta eterna historia entre empleados y empleadores del sector.
¿Y los demás?
Los expertos en compensaciones estiman que el cierre promedio de las negociaciones paritarias para la totalidad de los sectores económicos de nuestro país rondará el 25 por ciento y unos puntos menos para el personal fuera de convenio.
Según un informe elaborado por Mercer sobre la base de 194 compañías, entre los sectores con mayor incremento estarán la minería,el del petróleo y gas, el de telecomunicaciones y el automotriz.
Sin embargo, cabe destacar que la ubicación en los últimos escalafones de esta tabla se puede deber a que algunos de esos sectores en particular ya acumularon ajustes más positivos y por sobre la media en años pasados. Es el caso del sector bancario, que en 2012 proyecta un aumento de 23 por ciento, pero en 2011 trepó al 32 por ciento, seis puntos porcentuales más que lo que recibió el mercado general.
Hace dos semanas cerraron sus acuerdos laborales los trabajadores del cuero (24% de aumento), los portuarios del SOMU (22%), actores (24%), periodistas (23,5%), tintoreros y lavaderos (24%),
De la misma manera, habían acordado sus paritarias los mineros, el sector de la economía argentina que hoy por hoy mejor cobra, con un incremento del 24 por ciento, junto con los encargados de edificios (18%), alimentos avícolas (17%) y panaderos (entre un 20% y un 23% dependiendo de la ubicación geográfica).