Va ganando fuerza el proyecto de reglamentación del cierre de los comercios los domingos dejando al descubierto un fuerte enfrentamiento en el mismo seno de la actividad comercial. La industria turística pendiente y en estado de alarma. ¿Cómo afectaría al turismo este proyecto?

De acuerdo con la teoría bíblica del orígen del mundo expresada en el Génesis, Dios creó el  mundo en 6 días y descansó el séptimo.
Desde la óptica religiosa actual, el Sumo Pontífice de la Iglesia católica apostólica romana, el Papa Francisco, manifestó su apoyo a una iniciativa de algunos legisladores nacionales y de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa, que gana más espacio en el debate público, especialmente en el ámbito del comercio y el turismo: el descanso dominical.
El proyecto de establecer los domingos como jornadas no laborables para los shoppings y supermercados abrió un fuerte enfrentamiento en el mismo seno de la actividad; al tiempo que prendió la alarma en la industria turística.
Cabe señalar que la iniciativa ingresó al Congreso Nacional, impulsada por el diputado nacional del FPV Héctor Recalde, para regresar al viejo régimen que regía hace dos décadas que incluía el cierre obligatorio de los locales comerciales los domingos.
Mientras tanto en La Pampa ya se encuentra vigente una reglamentación en tal sentido, se avanza en Santa Fe y Corrientes no lo vería con malos ojos.
De aprobarse tal ley ¿cómo afectaría al Turismo?
Ante este panorama Mensajero dialogó con los principales protagonistas del sector para analizar cómo impactaría en la actividad.

Apoyo divino
Esta discusión es antigua, pero sin duda ha cobrado una nueva dimensión a partir del momento en que el presidente de la CAME, Osvaldo Cornide, le entregó en mano al Papa Francisco un documento informando sobre las gestiones impulsadas por la Confederación para establecer el cierre dominical de los comercios.
La Secretaría de Estado de la Ciudad vaticana difundió una carta de adhesión a la iniciativa de CAME por parte del Sumo Pontífice, la que textualmente expresa: “El Papa Francisco le agradece este significativo gesto como muestra de cercanía y confianza, al cual corresponde pidiendo a Dios que le ilumine en sus propósitos de vida cristiana y en sus esfuerzos por resaltar el valor de la digna celebración del Día del Señor en todas sus dimensiones”.
En tanto, Cornide dijo: “Es un tema en el que habíamos trabajado con Bergoglio cuando era arzobispo de Buenos Aires y que por supuesto apoya porque el empleado de comercio que trabaja el domingo, que es el día del Señor, no tiene oportunidad de reunirse con su familia”. Además, remarcó que el Papa Francisco le pidió que “contribuya a la sanción de una Ley para reinstaurar el día domingo como jornada de descanso, reflexión y reencuentro de los trabajadores con sus vínculos más cercanos y queridos”.

En el tira y afloja
La campaña que pregona el cierre dominical de los comercios cuenta no sólo con el apoyo de la Iglesia, sino también con parte del sector sindical comercial, legisladores de diversos partidos e incluso de empresarios.
Entre los argumentos que impulsan la medida, se destacan la acusación que afirma que miles de PyMes se ven obligadas a abrir de lunes a lunes para competir con hipermercados y shoppings. A su vez, alegan que cientos de miles de empleados de comercio y sus familias son esclavos del trabajo dominical, imposibilitando dedicarse a fortalecer los vínculos y participar de actividades recreativas, religiosas y culturales junto a sus seres queridos.
Asimismo, afirman que es falso que haya más consumo en la Argentina por la apertura dominical, y remarcan que aquello que se deja de consumir el domingo, se consumiría en la semana.
Por su parte, entre las grandes entidades que apoyan la iniciativa y promueven la unidad familiar, además de CAME, figuran la Federación Argentina de Supermercados y Autoservicios (FASA), la Cámara Argentina de Supermercados (CAS), la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (APYME) y los establecimientos de origen chino.
En la vereda de enfrente, se oponen al proyecto las empresas nucleadas en la Asociación de Supermercados Unidos (ASU) y la Cámara Argentina de Shopping Centers (CASC), quienes advierten que este proyecto puede derivar en despidos ante la imposibilidad de enfrentar los costos.
En esta línea, el titular de la CASC, Gabriel González, indicó que su sector quiere seguir abriendo los domingos porque, como en el caso de los hipermercados, los fines de semana es cuando más se vende. “Muchos jóvenes empleados de los shoppings usan el plus que reciben por trabajar un fin de semana para comprar, por ejemplo, un auto a crédito”, remarcó el dirigente; quien señaló: “Tenemos muy en claro cuál es el impacto que va a provocar esta medida. Se está tratando de apoyar y minimizar el efecto con la excusa del encuentro familiar, sin medir las consecuencias del mercado laboral en donde 21 mil puestos de trabajo se pueden perder”.
A su vez, González dijo que “la gente se divierte más los domingos cuando va al shopping y sale a disfrutar, más allá que vaya al cine o compre zapatos o simplemente vea vidrieras. Pasear es descansar”.
Por su parte, Mario Daniel Nirenberg, Gerente general de la CASC, sostuvo que claramente el cierre afectaría al turismo. “Estamos en un país que define a la actividad turística y la promueve desde los fines de semana largos, y acciones como estas la perjudican porque se rompe la sinergia con los shoppings como atractivo turístico”, enfatizó.
En tanto, el directivo reconoció que si prospera el proyecto éste provocaría la supresión de fuentes de trabajo, y detalló: “Los shoppings dan empleo directa e indirectamente a más de 80.000 personas, pero si se aprueba el cierre dominical 20.000 individuos serían rescindidos porque la facturación de los domingos es el 18% del total de la semana y se perdería ese ingreso. Además muchos de los denominados “franqueros” dejarían de percibir gran parte de sus ingresos. Asimismo, comentó que la iniciativa afectará la recaudación fiscal de todo el país, y remarcó: “Acá se ponen en riesgo las inversiones futuras, porque frente a este antecedente los empresarios podrían retrasar sus intenciones de construir shoppings en el país”.
“Estamos conversando con el Ministerio de Turismo para realizar algunas campañas conjuntas que favorezcan al turismo interno coordinando acciones y promociones con los shoppings”, adelantó Nirenberg.

Alertados
Son varios los actores de la actividad turística que cuestionan el proyecto y apoyan la iniciativa de salir a pasear por un shopping, tal como se va al teatro, a un museo o un hipermercado durante los domingos.
El senador santafesino, Lifschitz, expresó que “creo que la norma que se denominó descanso dominical podría llegar a tener un gran impacto sobre los trabajadores, el turismo y el esparcimiento y merece un tiempo de análisis y evaluación. Rosario y Santa Fe tienen mucho movimiento en los fines de semana largos y la actividad comercial se ve favorecida con esto. No queremos que una norma termine afectando a otros trabajadores y a pequeños empresarios”.
Hace unas semanas, en la ceremonia inaugural del Quinto Congreso Internacional de Shopping Centers, el ministro de Turismo, Enrique Meyer, subrayó el rol fundamental de los centros de compras, shoppings y las ferias en la economía nacional.
“Desde el Ministerio somos claros respecto a fijar posiciones de este tema y estamos totalmente en contra de todo aquello que pueda llegar a restringir a los argentinos y extranjeros de visitar un domingo un shopping o presenciar una actividad cultural”, destacó el Secretario de Turismo de la Nación, Daniel Aguilera, entonces. Y agregó: “No me parece que medidas así vayan en sintonía con lo que pregonamos desde Nación, que es que el Turismo siga creciendo”.
Por su parte, en diálogo con Mensajero Turístico el Presidente de la CAT, Oscar Ghezzi, dijo: “Estamos convencidos que el domingo es para descansar y disfrutar en la expresión que guste cada uno, sea yendo a la Iglesia, pasear, comer un asado, ir a un shopping, hacer una escapada de viaje, o cualquier actividad que le permita al individuo salir de la rutina”.
Siguiendo esta línea, y pese  a que el proyecto no abarca a la industria hotelera, Ghezzi argumentó que “además de ser un día de esparcimiento, el domingo es una jornada de trabajo para muchos de la industria. Tal es el caso de la hotelería, donde los fines de semana suelen ser los días más fuertes laborales y no por este proyecto van a cerrar”. Y agregó: “para Turismo los domingos son más que importantes y no podemos resignarlo, porque si bien para algunos significa descanso, otros deben trabajar para el relax de esta gente”.
El Presidente de la CAT aclaró: “trabajar los domingos no significa que no se contemplen o respeten los valores del convenio laboral”.
La discusión está en el Congreso pero también está en las casas y negocios del país. Todos, desde el empleado de comercio del negocio más chico hasta el Papa Francisco, esperan la resolución de este tema.

Caso I: La Pampa
Desde hace unos días en la provincia patagónica la Ley 2717 dispone el cierre dominical de los comercios que excedan los 40 metros cuadrados de superficie útil para la venta.
Luego de varios años de bregar por la norma por parte del gremio mercantil y de algunas localidades con ordenanzas en ese sentido, La Pampa se convirtió en la primera provincia en el país en establecer el descanso para los empleados de comercio.
La misma, fue producto de una ley que contó con el voto afirmativo de 29 de los 30 legisladores provinciales, y la adhesión de las cámaras patronales.
Cabe aclarar, que el cierre dominical atañe exclusivamente a los empleados de comercio, lo que no implica que determinadas actividades de servicio puedan desarrollarse con normalidad, como es en el caso del sector gastronómico.

Caso II: Santa Fe
Con el respaldo de la mayoría de los bloques, el proyecto del descanso dominical para el comercio santafesino obtuvo media sanción en la Cámara Baja. De ese modo, la iniciativa que obliga a determinados comercios a cerrar los domingos y feriados en todo el territorio santafesino tendrá curso hacia el Senado.
Mientras los trabajadores nucleados en el gremio de empleados de comercio se concentraron en la Legislatura para acompañar el debate legislativo y expresar de esa forma su apoyo, algunas otras voces sugirieron la necesidad de una mayor discusión o manifestaron directamente su oposición.
En tanto, el proyecto indica que quedan excluidos de la legislación bares, restaurantes, teatros, cines, juegos infantiles y todo tipo de comercio vinculado al esparcimiento. También los pequeños locales atendidos por sus dueños, servicios de sepelio, puestos de diarios y revistas y estaciones de servicio.
Por su parte, el artículo primero de la norma señala que los establecimientos comerciales deben cerrar los domingos y feriados, y en el caso del 24 y el 31 de diciembre, el cese debe iniciarse des