Asumió el nuevo presidente del directorio de la Administración de Parques Nacionales
Dos funcionarios históricos de la Administración de Parques Nacionales (APN), asumieron hoy sus funciones como presidente y vicepresidente de ese organismo autárquico que depende del Ministerio de Turismo de la Nación: Carlos Corvalán y Raúl Chiesa, respectivamente.
Ante un salón colmado por personal de los parques venidos de todo el país, funcionarios del área de turismo, familiares y amigos, el ministro de Turismo puso en funciones a quien es el primer guardaparques en asumir como titular del Directorio de la APN.
En su presentación, Meyer afirmó que "la sinergia entre Parques Nacionales y Turismo ha dados buenos resultados: han aumentado las areas protegidas, la dotación de personal y los concesionarios, lo que muestras que, tal como dijo la presidenta Cristina Fernández de Kirchner el pasado 1º de marzo, esta ha sido una década ganada".
“Estoy muy feliz de ver a tantos amigos y compañeros acompañándome en este momento tan importante de mi vida”, dijo un emocionado Corvalán ante el auditorio que se dio cita en el Salón Hidalgo del Hotel El Conquistador, donde se realizó el acto de asunción.
Con más de 36 años de trabajo en diferentes áreas protegidas –los últimos 16 se desempeñó como intendente del Parque Nacional Los Glaciares-, Corvalán tendrá a su cargo la administración de casi 5 millones de hectáreas que aporta la APN al Sistema Nacional de Áreas Protegidas, y que en 2012 visitaron más de 3.200.000 turistas.
En tanto, el flamante vicepresidente, Raúl Chieza, que lleva unos 20 años en la APN -fue vocal del Directorio antes de su actual nombramiento-, también tuvo palabras de emotivas para con la institución y sobre la importancia y responsabilidad de trabajar en un organismo del Estado.
El nuevo titular de la APN destacó que en su trabajo al frente del organismo “voy a tratar de adecuar mi experiencia y mis conocimientos a este proceso que estoy viviendo”.
“Es algo que no tenía revisto; estar sentado en este sillón, en este edificio. Las 41 áreas protegidas dependerán de este directorio que yo presido, y que creo que es un directorio correcto al lineamiento que quiero aplicar, con un compromiso muy alto con el Ministerio de Turismo, que creo que está haciendo cosas muy interesantes para la conservación”, resaltó.
En tal sentido, Corvalán aseguró que quiere trabajar en equipo, tal como lo vino haciendo en la intendencia del Parque Nacional Lo Glaciares. “Este trabajo solo no se hace, por eso resalto lo del equipo. Asumo representando un equipo de trabajo y la idea es esa”, precisó.
“Esta función me genera un compromiso altísimo, un orgullo, porque hay muchos amigos que vinieron, compañeros de trabajo que son amigos. Es un compromiso muy grande porque indudablemente es como que se sienten proyectados en mí. Yo estoy sentado acá con el uniforme o con la camiseta de parques, soy de adentro”, subrayó.
En cuanto a su futuro trabajo junto a Raúl Chiesa, el titular de la APN dijo que “la cabeza política de la administración, por una decisión política, pasa a ser ocupada por dos personas de carrera, el vicepresidente y yo. Entre los dos juntamos 65 o 68 años de parques; entre los dos sumamos esa experiencia”.
“Raúl en casa central y yo en el interior hacemos una sumatoria interesante. Ahora tengo que empezar a aprender a mirar para abajo, como se mueve el organismo en su cabeza central interna y externamente. En tal sentido, se trabaja mucho, por ejemplo, con el Ministerio de Turismo”, añadió.
Experiencia patagónica
El trabajo de Carlos Corvalán en el Parque Nacional Los Glaciares fue el trampolín hacia esta nueva instancia en su carrera dentro de la APN. Así se lo hizo saber la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, cuando lo recibió el pasado viernes junto al ministro de Turismo de la Nación, Enrique Meyer, para anunciarle que iba a designarlo al frente del organismo.
“Sentí orgullo y cada vez más compromiso con lo que dijo la Presidenta. La honradez, el compromiso, la defensa del estado son valores muy fuertes y que lo haya visto ella me llena de orgullo”, declaró.
“Tuve la suerte de administrar el Parque Nacional los Glaciares en todo un proceso de cambio, basado en un proceso político favorable para la región que fue la gobernación y después la presidencia de Néstor Kirchner, y de Cristina Fernández de Kirchner. Eso lo puso en un tapete diferente al lugar y no solo pudimos mejorar la atención al visitante, sino que mejoramos la conservación”, señaló.
En ese proceso, el Parque de casi 727.000 hectáreas pasó de recibir un poco más de 55 mil visitantes a más 600 mil en el último año.
Se cambiaron las viejas pasarelas de madera por otras de hierro galvanizado que no deterioran el medio; los barcos pasaron de tirar sus efluentes cloacales al lago a hacerlo a una planta de tratamiento, se colocaron baños públicos y muchas obras de infraestructura, como el camino de 30 kilómetros sobre el parque que tuvo reconocimiento de paseo paisajístico de primer nivel.
“Yo quiero transmitir esa experiencia que vivimos. Nuestra viviendas tienen que ser las viviendas lógicas con el menor consumo de recursos, que las podamos calentar con muy poquito. Tenemos que tomar caminos que sirvan de ejemplo. Nuestras seccionales de guardaparques tendrían que tener todas paneles solares, la energía tiene que ser no convencional, los tratamientos de efluentes tienen que ser diferentes, separar aguas grises de negras, entre otras cosas”, adelantó.
“Esto lo tenemos que hacer en todos los lugares. Todas las concesiones tienen que tener tratamientos de efluentes. Debemos usar otro tipo de energía y eso tiene que ser la Biblia”, precisó.
Una institución dedicada al bien común
El flamante vicepresidente de la Administración de Parques Nacionales, Raúl Chiesa, también vivió su jornada de emoción durante el acto de asunción, donde se le pasaron como una película sus 20 años trabajando en ese organismo, y otros 10 dedicados a temas de conservación.
“Recordé a mi padre que dedicó su vida a Obras Sanitarios de la Nación, donde ingresó a trabajar hasta que llegó a ser su administrador general”, dijo a Télam una vez finalizado el acto en el Hotel El Conquistador.
Chiesa valoró la designación de Corvalán al frente del organismo por su condición de guardaparques y porque “cuando asume en Glaciares, en un proceso colectivo, fue la cara visible de la transformación de un parque que pasó de ser un tanto relegado a ser uno modelo”.
En cuanto a su designación, Chiesa la adjudicó a su “experiencia y compromiso” con la institución. “Estoy dispuesto a acompañar, como lo vine haciendo como vocal, la política del gobierno, y particularmente a Enrique Meyer, con el que nos conocimos en Santa Cruz cuando era gobernador, Néstor Kirchner”.
“Construimos con Meyer una relación que hoy se trasunta como una política de Estado con Parques Nacionales de cara a la sociedad y brindando servicios adecuados al turismo, sin desmedro del objetivo principal que es la conservación”, señaló.
En tal sentido, Chiesa precisó que acompañará como vicepresidente la gestión de gobierno, “teniendo claro que somos meros administradores de la cosa pública al servicio de la comunidad en una institución fantástica que como pocas, sus objetivos son de interés común”
“Es una gran alegría y mucho orgullo esta designación. Además, una fuerte preocupación para estar a la altura de lo que se nos exige, porque hay un proyecto de gobierno que tiene que ver de ampliación del sistema, que crece en presupuesto y asume la complejidad que aumenta”, finalizó.