Discovery Cove, ubicado justo frente a SeaWorld, inauguró hace menos de dos meses su nueva atracción, Freshwater Oasis,  en donde los visitantes experimentan la vida acuática en canales de escasa profundidad, ya que el agua no llega más allá de la cintura en la mayoría de los casos.
El parque, al estilo de un resort tropical de admisión limitada, ofrece un día lleno de aventuras. Aquí los visitantes pueden nadar con delfines, alimentar de la mano a exóticos pájaros y aves en un aviario de vuelo libre, practicar snorkeling entre miles de coloridos peces y rayas o relajarse en las playas de arena blanca.
Allí vivirán encuentros cercanos con ejemplares de monos tití y de nutrias marinas llegadas desde Asia. Estas juguetonas criaturas, que pesan entre 1 y 5 kilos, son nativas del Sureste Asiático, desde Indonesia y China hasta la India. Los visitantes podrán llegar a su hábitat natural lleno de vegetación tropical para observar cómo juegan y nadan en forma de ocho alrededor de los troncos de los árboles. Para tener encuentros cercanos con estos enérgicos animales no hará falta salir del agua.
El acceso a la nueva atracción está incluido en el precio de admisión a Discovery Cove, en donde se necesita hacer reservas con antelación, ya que la entrada está limitada a 1.000 visitantes por día.
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