Las naciones caribeñas delinearon su estrategia para atraer turistas a la región con un enfoque centrado en el turismo de cruceros durante la Reunión de Ministros de Turismo del Gran Caribe realizada en Colombia. Allí, las 17 delegaciones de los países que asistieron firmaron la declaración de Barranquilla de la cual se desprende que el tema de la crisis financiera y su impacto en el sector centró las preocupaciones. Para hacer frente a la crisis financiera los países de la Asociación de Estados del Caribe (AEC) promueven un turismo que se apoye en los multidestinos de los cruceros dentro de sus socios.
La Asociación de Estados del Caribe (AEC) la integran Antigua y Barbuda, Bahamas, Barbados, Belice, Colombia, Costa Rica, Cuba, Dominica, El Salvador, Granada, Guatemala, Guayana, Haití, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y Las Granadinas, Surinam, Trinidad y Tobago y Venezuela.
Tras la reunión se decidió incentivar el flujo de turismo a través de los lazos de apoyo entre las subregiones que permitan maximizar la competitividad en la zona y explorar mercados alternativos. Para ello reafirman la necesidad de una cooperación más fuerte entre las líneas aéreas y promover el establecimiento de una zona de turismo sostenible del Caribe y la promoción del tu