Al igual que muchos ciudadanos de Nueva York ahora los habitantes de la alemana ciudad de Hamburgo se ofrecen voluntariamente para ser guías turísticos gratuitos para mostrarles sus vecindarios a los visitantes extranjeros.
Desde que surgió la idea se han anotado unos 50 vecinos que se jactan de conocer muy bien la ciudad del norte de Alemania, aunque para ello no es necesario haber nacido en Hamburgo.   
Marie-Louise Wegen, por ejemplo, es una peluquera de 64 años que vive en esta urbe del norte alemán desde 1975; ella está tan familiarizada con los rincones de Uhlenhorst y le gusta tanto recorrer sus calles, que decidió convertirse en guía turística honoraria de ese vecindario.
Wegen, quien se jubiló recientemente, es una de los aproximadamente cincuenta hamburgueses que se han integrado hasta ahora al proyecto Hamburg Greeters; una iniciativa que prosperó en Nueva York primero y ha echado raíces en Hamburgo, permitiéndole a los visitantes (sean estos alemanes o extranjeros) conocer los distintos barrios de la ciudad de la mano de un lugareño y sin tener que pagar por ello. “Estos recorridos son una buena oportunidad para tener contacto con gente simpática y hacer nuevas amistades mientras les muestro mi barrio”, comenta Wegen, que ya ha dirigido