El parque temático francés Puy du Fou, ubicado en un bosque de 50 hectáreas de Países del Loira, incorporó seis nuevos miembros en su plantilla. No se trata de unos empleados cualesquiera, sino de cuervos. Las aves fueron entrenadas para recoger las colillas de los cigarros y la basura que tiran los visitantes. Los entrenamientos se fueron basados en recompensarlos con comida.

De hecho, estas aves son consideradas como muy inteligentes, pues utilizan herramientas e incluso pueden llegar a planificar el futuro. Además, son popularmente conocidas por su capacidad para reconocer los rostros humanos y "guardar un especial rencor a las personas que le han ocasionado algún daño".

El objetivo del parque “es mostrar que la propia naturaleza” puede enseñar a “cuidar el medio ambiente”, según manifestaron fuentes del recinto. A su vez, los cuervos “trabajarán” durante cuatro días a la semana, bajo la supervisión de un halconero, que se encargará de su cuidado y de que los visitantes no tiren basura intencionadamente para ver a los pájaros en acción.