A poco menos de tres meses de haberse asociado a la mayorista, el flamante Carlos Nuñez,  Director de Agaxtur Viajes cuenta cómo fue su llegada, los proyectos de crecimiento, la necesidad de mudarse para estar más cómodos y cuál es el ADN del equipo de trabajo.  

Te incorporaste hace menos de tres meses como socio local de Agaxtur Viajes, ¿qué significa y qué te motiva a volver a tu primer amor: la tour operación?

Lo que me motiva está directamente relacionado con que pasé más de 35 años de mi vida trabajando en esta actividad, aunque en distintos lados del mostrador. Estuve en Eves, en Scotland, en un prestador de servicios como Costa Cruceros. Me ayudó mucho el haberme tomado un año sabático para meditar acerca de mi futuro y también para recargar las baterías.

Un día me junté con Aldo Leone (socio y dueño de Agaxtur Viagens en Brasil) y con Filippo Costa (socio de la filial local) para concretar mi ingreso como socio en la empresa y me siento muy a gusto de poder formar parte y darle valor a Agaxtur en Argentina porque tenemos mucho en común. En primer lugar porque tenemos la misma afinidad de la visión del negocio y porque como he trabajado en esto toda mi vida creo que por eso le puedo dar valor.

¿Qué viste en Agaxtur que te atrajo para sumarte como socio?

Veo en Agaxtur algo muy similar a Eves, empresa en la que dí mis primeros pasos en el turismo, fundada por Don Ventura Pérez un pionero del turismo argentino hace más de 80 años y que continuó siendo una empresa familiar en manos de sus hijos.

En el caso de Agaxtur Brasil fue fundada en 1953 por Aldo Leone (padre), como una empresa de turismo receptivo en Santos de allí el nombre: Agencia Auxiliar de Turismo. Surge para brindar todos los servicios a quienes visitaran las playas de Santos, Guarujá y los ocasionales barcos que llegaban en aquella época. Al igual que Eves se mantuvo dentro de la misma familia y hoy son sus tres hijos los que la dirigen, aunque con el paso del tiempo se mudó a San Pablo y se convirtió en una empresa que ocupa los primeros lugares en Brasil. Se trata de un legado familiar, empresas que han ido creciendo y pasando de generación en generación.

¿Antes de sumarte a Agaxtur analizaste la posibilidad de ingresar a un proyecto que no fuera dentro del turismo?

Mentiría si te dijera que no, pero a diferencia de muchos amigos fuera de esta actividad que se reciclan y cambian con naturalidad, no me sentí capaz de hacerlo. Yo empecé en los años 80 a trabajar en turismo casi de casualidad porque estudiaba Agronomía, y al trabajar con viajes estudiantiles y tours de esquí en EVES llegué a apasionarme con el mundo del turismo. Puedo decir que mi primaria, secundaria y universidad las hice dentro de la empresa, capacitándome, formándome. Como un autodidacta del negocio pude desarrollar muchas herramientas y una de ellas es la red de conocimientos, los contactos, toda la trama que compone la relación no sólo con los clientes, sino también con los proveedores. Por todo eso no me fue tan difícil después de este año sabático volver a ingresar en la actividad.

Cuando vos hiciste tu ingreso al mundo del turismo ¿había más ganas de aprender, de crecer dentro de las empresas?

Sí, puede ser, pero no sé si uno lo magnifica con la mirada de los 20 años, y hoy ya con más de 50, lo percibimos distinto. Creo que uno tenía un sentido de pertenencia y llegaba con ganas de progresar en el negocio, además había una visión del conocimiento diferente porque la información era mucho más cerrada. Hoy la información está al alcance de todos. En los ‘80 la palabra de un operador mayorista al agente de viajes y la del agente de viajes al cliente era, prácticamente, palabra santa. Hoy por suerte cambió, para mejor. Todos tienen acceso, profesionales y consumidores, a mucha información, la gran diferencia tiene que ver con que el profesional la maneja de otra manera, más específica. Ese es el desafío para quien empieza hoy en esta actividad.

De cualquier manera no creo que todo tiempo pasado haya sido mejor, es diferente. Hoy hay muchas posibilidades de hacer un trabajo más profesional. Y el objetivo es ese, trabajar sobre la profesionalización.

Hablemos del presente, ¿qué tenés en mente para Agaxtur Argentina?

Agaxtur es una empresa con 64 años en Brasil y casi 30 en Argentina, donde se crea como operador receptivo del gran caudal de clientes que venían de Brasil y rápidamente cambió sus unidades de negocio y se hizo un operador multidestino, aunque el mercado tiene un amplio reconocimiento más por Brasil, en la actualidad, prácticamente operamos todo Área Uno y Europa.

También somos Tour Operador Selecto de Walt Disney World desde hace muchos años, y tenemos una gran participación en el mercado de La Florida. Sabemos de dónde venimos, donde estamos hoy (en una muy buena posición), y hacia dónde queremos ir. Mi objetivo es que cumplamos los 30 años en Argentina, con una nueva Agaxtur, por así decirlo, renovada, pero continuando en el trabajo de las mismas unidades de negocios que venimos haciendo hasta el día de hoy.

¿Que serían...?

Fundamentalmente ser operador mayorista de Brasil, Caribe, México, Estados Unidos, Canadá y Europa. De ahí que nos hayamos mudado de la calle Florida a esta nueva oficina en la Calle Paraguay 635. Es un símbolo del start-up del cambio para estar más cómodos, con más lugar para todos los que trabajamos acá y que pasamos muchas horas dentro de la oficina. También hicimos una inversión importante en nuestra web, que está totalmente renovada, con herramientas que permiten las reservas online para darles más alternativas a los agentes de viaje, pero sin descuidar lo que nosotros entendemos es la parte fundamental del negocio: el asesoramiento, la capacitación, que cuando alguien tiene un problema levante el teléfono y encuentre respuestas. Porque hay algo muy importante que, yo en estos tres meses pude advertir, y que tiene que ver con el ADN de la compañía: en la empresa hay una actitud de servicio muy notable, tal vez adquirida por la sencilla razón de que al ser agencia receptiva todas las semanas tenemos en Buenos Aires pasajeros en los hoteles y guías de turismo a quienes se les brinda atención, y ese estar en la primera línea nos hace pensar que cuando nosotros vendemos un paquete a Brasil, Caribe o Estados Unidos, sucede lo mismo con nuestros clientes allá y por eso se le pone tanto énfasis en estar presentes en cada uno de los destinos. Aunque parezca un detalle menor, estar en la primera línea con los clientes, ayuda a interpretar esa calidad de servicio que uno tiene que prestar, y eso lo noto muy impregnado en el personal. Esa es la filosofía de Agaxtur.

¿Cuáles son los destinos fuertes hoy?

Nos especializamos en Brasil, más específicamente desde Río de Janeiro hacia el norte con sus resorts de playa, pero mucho de nuestro tráfico es el cliente corporativo que viaja a San Pablo y el turismo de reuniones e incentivos. Es decir que no sólo vendemos al segmento leisure, sino también grupos, que es una de las cosas que venimos haciendo desde hace mucho tiempo, y que nos interesa continuar y reforzar.

Siempre digo que la gestión de un intermediario, como un operador turístico, se ve ante las dificultades, porque cuando las cosas salen bien, todos trabajamos bien. Una de las fortalezas más importantes tiene que ver con el fuerte vínculo con los proveedores, porque Agaxtur, ya sea en Brasil o Argentina, es una sola empresa, eso nos da la capacidad de gestión ante cualquier proveedor para resolver un inconveniente.

Volviendo a los destinos que manejamos somos muy conocedores de todo Brasil, y ese es un punto distintivo para nosotros, pero con el tiempo nos fuimos haciendo muy fuertes en el tráfico emisivo a los Estados Unidos, la Florida, Miami, Orlando, y Disney. Precisamente en relación a Disney en estos días tuvimos a un grupo de agentes de viajes invitados a realizar un entrenamiento profesional, algo que no es habitual que se haga, porque no fue un fam tour, sino algo mucho más importante. Esas son las herramientas que nos ayudan a destacarnos, a mejorar. Junto con Brasil y Estados Unidos, el Caribe es un producto que se vende muy bien.

¿Se van a sumar a algunos de los charters?

No en esta temporada. Nosotros tenemos cupos en vuelos regulares a nuestros destinos, tanto a Brasil como al Caribe. Yo viví el tema de los charters en los ‘90, y la realidad es que es un negocio que obedece a la falta de disponibilidad aérea cuando hay alta demanda. El grave problema es que en los ‘90 se confundió eso, y cuando no hubo alta demanda se continuaron los charters, y terminó como terminó. Hoy creo que en definitiva el mercado sí está creciendo, es maduro, hay una alta demanda en determinado destinos, y seguramente hay destinos que necesitan de esa oferta extra de asientos de un vuelo charter, pero todavía no estamos en el análisis de ninguno de ellos.

¿Qué espíritu querés en el equipo de trabajo?

Lo más importante lo plantee en la primera reunión con todo el personal: el respeto. Respeto no es sólo pedir las cosas bien y agradecerlas, sino respetar el trabajo del otro, los clientes y los proveedores. Para mí el valor más importante en cualquier organización comercial es poder trabajar en equipo, y que cada uno dé lo máximo. Es en lo que estamos trabajando ahora donde hay gente con muchos años dentro de la empresa y que está muy entusiasmada con el proyecto.

¿Cómo ves al turismo en la actualidad?

Es totalmente diferente a 30, 20 o 10 años atrás. El mercado ha cambiado mucho, y los jugadores también. Lo que veo de positivo es que es un mercado con mucho más volumen que antes, mientras que lo negativo es la menor rentabilidad con enormes costos que impactan en el balance final del negocio.

Tengo la sensación de que los modelos de negocios están muy claros, no sólo en Sudamérica, sino en todo el mundo, y tiene que con la alta inversión tecnológica de determinadas empresas, que al cambiar su cadena de distribución bajan los costos (el clásico modelo de las OTAS); pero por otro lado está el producto, la atención, el profesionalismo, la personalización, con la que también se va a convivir. Obviamente, muchos pretenden tener las dos cosas, aunque es un mix complicado de llevar. Sin embargo, hoy la tecnología llega a todas, algunas en gran medida y otras menos. Para esta nueva Agaxtur, nos ubicamos más en el segundo modelo de negocios para hacer lo que sabemos, transformarnos en una empresa dinámica con una gestión inteligente que nos permita bajar los costos que podamos trabajar con un equipo de gente capacitado. Esa es la idea. El negocio es difícil, pero si las cosas se hacen profesionalmente termina dando sus frutos.

¿Van a intensificar la promoción de los productos de Disney?

Disney es un producto enorme. Es hablar de 26 mil habitaciones dentro de sus Parques, pero más allá de todo lo que ya conocemos vemos una oportunidad enorme para crecer con el producto de los Cruceros Disney porque, proporcionalmente, hay muy poca gente que ha realizado uno de sus cruceros en comparación con la que va a los Parques. Tal vez, por mi formación de los últimos años en el mundo de los cruceros veo que ahí hay un mercado muy interesante.

Mucha gente ha tenido la oportunidad de ir más de una vez a los parques de Disney, pero la gran mayoría nunca hizo un crucero, por lo cual en nuestro objetivo de crecimiento, llámese Disney, Brasil o el Caribe, los cruceros van a formar parte de algo en lo que estamos trabajando, y si bien es un producto que hay que informar bien, tiene un alto nivel de satisfacción.

El país está trabajando en generar una mayor conectividad aérea. ¿Cómo ves el tema?

Indudablemente que esto es el huevo y la gallina, se necesita infraestructura, competidores y empresas que trabajen. Yo veo con buenos ojos el que se amplíen los jugadores, en este caso en el transporte aéreo en la Argentina. No existe ningún lugar en el mundo que se haya desarrollado sin aviones.

Entiendo que las autoridades ahora analizarán cuál será el marco regulatorio para que esas compañías no se canibalicen, que cada una busque ampliar el negocio, y sí, eso es una parte importante para que más argentinos tengan más posibilidades de salir y de visitar el país, y que más extranjeros lleguen y tengan mejores conexiones.

Tengo buenas perspectivas.

Lógicamente, la Argentina tiene una situación que no sólo tiene que ver con los costos, siempre ha sido un país donde... salvo los principales mercados, que son nuestros vecinos que llegan en dos horas de vuelo, para todo el resto es un mercado lejano, a quienes hay que ofrecer no sólo las enormes bellezas que tenemos, sino también profesionalismo, tarea que se viene haciendo desde hace algún tiempo, pero para mí es una buena medida.

Como agencia receptiva ¿qué crees que busca el turista extranjero que llega al país?

El brasilero en particular se siente muy atraído por esta característica de ciudad europea que tiene Buenos Aires, así que es una cita obligada. Tal vez, también los destinos del sur, porque son paisajes que ellos no tienen.

Por suerte la infraestructura ha ido creciendo bastante en estos últimos años, como la gran oferta hotelera que se va ampliando, por lo que es importante que crezca la conectividad aérea.

Pero independientemente de ese turismo de placer, o de compras, que viene tres, cuatro días o una semana, lo que tiene muchas posibilidades para crecer los viajes de incentivos, los grupos de reuniones de trabajo, los eventos, que nosotros ya hemos hecho tanto para empresas brasileras o extranjeras. Desde ese punto de vista, es súper importante el crecimiento de los jugadores, con más competidores en los vuelos.

Pasaron más de 17 años desde que estuviste en una operadora mayorista, ¿cuáles son las cosas que más te sorprenden?

Una de las primeras cosas que me sorprenden es que conozco muy poca gente, ¡será señal de que me voy poniendo viejo! Pero lo que me entusiasma es que me estoy reconectando con mucha otra gente con la que había perdido el contacto, aunque durante los años en que me especialicé en los cruceros he estado bastante cerca, sobre todo en el interior del país (haciendo reuniones, o capacitaciones), o sea, ese vínculo personal con el trade lo he mantenido. En el día a día del negocio, sí, me estoy aggiornando cómo tiene que ser, porque los tiempos han cambiado.

Mencionaste recién el interior, ¿cómo está posicionado Agaxtur en el resto del país además de Buenos Aires?

Básicamente hoy nuestra sede es Buenos Aires, y para una segunda etapa nuestro plan es ganar presencia en el mercado del interior. En lo personal tengo buenas relaciones como para pensar en un plan de trabajo que hoy no es más que un bosquejo.

La operación mayorista se ha hecho muy federal, (con vuelos de Córdoba, Salta, Mendoza o Rosario), lo que de alguna otra manera obligó a muchos mayoristas a contar con sucursales en esas ciudades porque los lugares que nos les daban desde Buenos Aires los tenían en Córdoba, por ejemplo.

Indudablemente el mercado ha cambiado, pero nosotros en esta primera etapa queremos consolidarnos fuertes desde Buenos Aires para después a paso firme ir manejando la estrategia de mejorar nuestra presencia en el interior.