Las grandes aerolíneas apuntan de lleno a los beneficios del modelo de bajo costo.

Iberia

La dirección de Express, la filial para el corto y medio radio de Iberia, está sumida en un proceso de ajuste que tiene por objetivo modificar, aunque sea parcialmente, su estrategia inicial para acercarla al modelo tradicional de las low cost con la explotación de rutas punto a punto europeas de media y alta densidad.
 
Express nació el pasado 25 de marzo con el encargo de rebajar drásticamente los costes en las operaciones de aportación de tráficos españoles y europeos desde y hacia el hub del aeropuerto de Madrid.
 
En su primera programación se centró en la tarea que le habían encomendado con la realización de vuelos domésticos desde Alicante, Málaga, Sevilla, Palma, Granada, Menorca, Vigo, Lanzarote e Ibiza hacia el aeropuerto de Barajas. En esta misma línea, en junio añadirá los destinos de Fuerteventura, Santiago de Compostela y La Palma.
 
Sin embargo, la debilidad del mercado aéreo nacional por efecto de la crisis, sumada a las dificultades de Express para lograr los índices de productividad de flota y tripulaciones deseados (por la duración de las rutas y las escalas en Madrid), han forzado un cambio de rumbo.
 
En este momento se dan los últimos retoques para lanzar la campaña de verano y se diseñan las rutas de la temporada de invierno. En esta etapa se incorporan vuelos desde Madrid a capitales europeas como Edimburgo, Dublín, Nápoles, Riga, Mikonos y Ámsterdam.
 
Con este viraje, Express aumenta la etapa media de cada vuelo, el tiempo diario de uso de sus aviones y, con ello, mejora su productividad y obtiene mayor rendimiento a los costes ajustados de su operación.
 
British Airways
 
La decisión de Iberia al crear una filial de bajos costes para frenar la competencia de las low cost no es una ave rara. La gran mayoría de las grandes aerolíneas europeas han llegado a la misma conclusión y crean clones de bajos costes para evitar que el empuje arrollador de Ryanair y Easyjet las expulsen de sus tradicionales mercados de medio radio.
 
El socio de Iberia en IAG, British Airways, ha intentado en múltiples ocasiones clonar el modelo de las low cost a través de compañías participadas y filiales, pero no ha tenido resultado. En la actualidad apenas cuenta con rutas de corto y medio radio. El grueso de su operación son los vuelos de largo radio desde el aeropuerto de Londres-Heathrow, que tiene en sí mismo una gran capacidad de aportación de pasajeros.
 
Lufthansa
 
La alemana ha articulado su segunda marca en torno a la empresa Aviation Power. Controlará el 49% de su capital, mientras que el 51% estará en manos de la multinacional de trabajo temporal Manpower. Tendrá una flota inicial de 10 aviones y su base de operaciones estará en Berlín, desde donde comenzará a volar desde el 3 de junio. Los pilotos de esta nueva aerolínea serán los de la matriz de Lufthansa y mantendrán sus condiciones salariales y su escalafón aunque se comprometen a asumir nuevas obligaciones y procedimientos que permitirán elevar su productividad y la de la operación un 10% en relación con el resto de las aeronaves de la compañía.
 
Las azafatas serán contratadas por Manpower en condiciones de low cost, sin vinculación con Lufthansa y por un periodo máximo de dos años para que no adquieran derechos de permanencia. La nueva aerolínea no podrán hacer rutas con los tres hubs principales de Lufthansa, Fráncfort, Múnich y Düsseldorf, y cubrirá 50 destinos desde Berlín.
 
Air France

 
Tras cosechar, junto a KLM, unas graves pérdidas operativas de 353 millones en 2011, la aerolínea francesa ha lanzado un severo plan de ajuste denominado Transform 2015. Su principal objetivo es conseguir la vuelta a la rentabilidad en dos años. En este marco, aún no tiene completamente perfilado cuál será el modelo que adoptará para reconvertir al bajo coste su operación de corto y medio. La decisión, no obstante, es firme y los detalles se conocerán en junio. La principal opción que se baraja es el traspaso de vuelos a su subsidiaria Transavia, pero no se descarta crear una nu