Según datos oficiales del país vecino, los viajes dentro de su propio territorio experimentaron una suba significativa durante enero.

El ministro de Turismo uruguayo, Germán Cardoso, brindó ayer una conferencia de prensa para anunciar algunas buenas noticias, pese al desplome de la actividad turística en el país vecino a raíz del cierre de fronteras impuesto para combatir la pandemia. En ese contexto de caída general, Uruguay experimentó un significativo crecimiento de sus viajes internos, que aumentaron entre un 30% y 50% en comparación con el año anterior.

Esta conclusión se desprende de los datos aportados por los 552 alojamientos habilitados y en actividad, aunque este registro no incluye las cifras de casas de verano y propiedades de alquiler turístico.

Según explicó Cardoso, en enero hubo más de 93.000 huéspedes. Ese número, por supuesto, estuvo conformado casi en su totalidad por pasajeros uruguayos. "Consideramos que, a partir de los estímulos logrados en conjunto por intendencias, la Cámara de Turismo, agentes privados y el Gobierno, conseguimos un crecimiento del turismo interno del 30% al 50%", dijo el funcionario.

No obstante, ese total de 93.000 viajeros representa una caída del 50% con respecto al mismo período del año anterior.

Los destinos que captaron mayor turismo interno fueron Colonia, Cerro Largo, Maldonado y Salto. Montevideo, una ciudad muy elegida por los argentinos durante el verano, registró una pérdida de huéspedes en torno al 75%.

Cabe recordar que actualmente rige la prohibición de ingreso a territorio uruguayo para pasajeros extranjeros. Solamente están autorizados para entrar aquellos ciudadanos que regresen desde el exterior o personas que tengan residencia en el país.