Hani: "El turismo no existe más, habrá que empezar de cero"
El presidente de FAEVYT habló en vivo por Instagram con Mensajero y aportó su análisis del duro momento que vive la actividad.
¿Cuál es el estado actual de las agencias tras más de un mes de cuarentena?
-Estamos muy preocupados. Este es un sector guerrero. Pasó todas las crisis que uno se pueda imaginar, pero esta es diferente. Nunca se vio ni pasó algo así. Tengo 22 años de agente de viajes y jamás ocurrió que el 99% de los aviones del mundo estén parados y que las empresas estén cerradas. El gran problema es que nuestro negocio se basa en la planificación y la certidumbre, y lo único que hoy tenemos seguro es la incertidumbre. Esto será un antes y un después. El turismo en el mundo no existe más, habrá que empezar de cero. Tenemos que ver cómo se acomodan los destinos y qué aerolíneas seguirán en pie. También me preocupa mucho cómo se va a desarrollar la distancia social, porque dicen que llegó para quedarse. Eso es un gran problema porque los micros, hoteles y aviones deberían estar a la mitad y no es negocio para nadie. Por eso digo que el turismo no existe más y que hay que comenzar de vuelta. Nosotros estaremos acá para ver cómo se hace eso, que nadie tenga dudas. Los agentes saldremos de esta, pero mi responsabilidad es luchar para que ese día nosotros estemos de pie.
¿Hay alguna fecha que se esté manejando para retomar la actividad?
-Hoy (por ayer) el ministro Kulfas dijo que el turismo recién saldría de la cuarentena para octubre. Le mandé a preguntar si para ese mes empezarán los viajes o si recién ahí podremos abrir las agencias, porque son dos escenarios muy diferentes.
¿Cuántos empleos están hoy comprometidos y cuántas agencias corren riesgo de desaparecer?
-Más que hablar del riesgo de los empleados, que es real, también debemos pensar en el de los más de 5600 agentes de viajes que viven de esto. No sólo peligran los puestos de los trabajadores, sino el de los agentes. Uno tiene que llegar a su casa a la noche sin saber cuál es el futuro. No tenemos otra actividad. Estamos en riesgo porque nos toca enfrentar una crisis que no conocemos y que no sabemos cuándo pasará. Vamos a pelear hasta el último segundo por más medidas. En más de 65 años que tiene esta institución, es la primera vez que un presidente de la Nación recibe a FAEVYT.
Después de esto, ¿quedará un mercado más chico o concentrado en grandes empresas que tengan más espalda para soportar esto?
-No creo. Todos tenemos este problema hoy. Que seas grande no quiere decir que te vayas a salvar primero. Pienso que son justamente ellas las que corren mayor peligro y las que más preocupadas deben estar.
¿Cómo se trabaja desde FAEVYT en la contención de las compañías de viajes que hoy piensan en bajar la persiana?
-Vamos a estar detrás de cada situación. Le pido a cada agente que esté pensando en cerrar que se comunique con nosotros antes de tomar esa decisión. Haremos los posible para que ninguna cierre. Si hay que atender caso por caso, lo vamos a hacer, pero no voy a descansar ni un segundo hasta saber que nuestro sector está a salvo de esta crisis nunca vista. Hablaremos con todos los sectores, sin distinción de si son socios o no. De acá salimos todos juntos o no sale ninguno. Basta de divisiones entre agentes. Vengo haciendo reuniones con receptivos, estudiantiles, emisivos, mayoristas, minoristas, regionales. Afortunadamente, hoy no tengo noticias de agencias que estén pensando en cerrar por esto.
¿Cómo deberán reconvertirse las agencias emisivas y receptivas una vez que empiecen a levantarse las restricciones?
-Lo primero que tenemos que ver es qué pasa con los países. Yo no sé cuándo se abrirán las fronteras, pero lo que estamos haciendo es preparar el terreno pidiéndole al Gobierno que nos suspenda las cancelaciones por seis meses para poder hablar con los pasajeros y tratar de reprogramar. Estamos analizando qué va a hacer cada país después y qué haremos nosotros para que los extranjeros quieran venir. Sabemos que el mercado nacional será el primero en activarse, pero el 80% de las agencias argentinas hacen emisivo. Y es imposible que todas ellas se reconviertan porque si hay miles vendiendo turismo nacional ya no sería negocio para nadie. Hoy la pelota está parada y hay que esperar a ver cómo se reactiva cada destino, sobre todo los más importantes para nosotros. Hoy el Caribe no está tan mal, por ejemplo. Estados Unidos, Italia, España y Brasil serán lugares a los que iremos últimos.
¿Qué pasará con las agencias unipersonales y con los autónomos?
-Hasta la semana pasada no había nada para ellos. Yo se lo planteé al presidente de la Nación, porque un gran porcentaje de nuestras agencias son unipersonales y monotributistas. El domingo salió un apoyo con estos créditos a tasa 0% de hasta 150.000 pesos. No entendí por qué lo dan en tarjeta de crédito y se lo pregunté a Lammens. Estoy atrás de cada sector, recibiendo propuestas. Yo tomo todas las ideas, porque no tengo la verdad absoluta. ¿Alcanza lo que salió para los autónomos? Para algo sí. ¿Soluciona la vida? Por supuesto que no. Por eso seguimos pidiendo medidas.
¿Cómo van las negociaciones con el Gobierno?
-Nosotros dividimos nuestras propuestas en dos. Por un lado las económicas que se trabajan con el presidente, Kulfas y Lammens. Por el otro, las solicitudes administrativas de las que se encarga el Ministerio de Turismo y Deportes. Allí pedimos que dejen que dos agencias compartan espacio. Si uno se dedica a estudiantil y otro a jubilados, podrían aprovechar eso porque no se pisan. También hablamos sobre las actividades conexas, algo que existe en todo el mundo. En España hay agencias que venden libros, ropa o café. Si a vos te funciona incorporar otra actividad, por lo menos por un tiempo hasta salir de la crisis, también sirve. Otro aspecto importante es que puedas cambiar tu domicilio comercial a tu casa para trabajar home office hasta fin de año y ahorrar unos meses de alquiler.
¿Cómo van a manejar el gran volumen de cancelaciones de viajes?
-Eso se lo estoy exigiendo a Lammens y él me dijo que sólo falta la respuesta de Defensa al Consumidor y que saldría la semana que viene. Le pedimos que suspenda las cancelaciones por 180 días. Prohibirle a la gente que cancele es ilegal, pero por lo menos dame un paraguas de seis meses para ver cómo y cuándo se reactivaría. Así yo podría convencer a mis pasajeros para que busquen otras variantes y que no me lluevan las cancelaciones todas de golpe.
¿La quita del impuesto PAIS sigue en agenda?
-Se lo pedí expresamente el otro día al presidente de la Nación. A Lammens se lo digo constantemente. Me contestó que lo iban a trabajar, pero que ahora no era el momento. Es la principal medida que quiero para el día que volvamos a trabajar. Sacame el 30%, por lo menos de la compra de servicios turísticos en agencia de viajes. Si querés, dejalo en pagos con tarjetas de crédito en el exterior. De esa manera, el que quiera reservar un hotel en el extranjero lo va a hacer en mi agencia porque conmigo no abona el impuesto. Lo pido todos los días, eso ténganlo claro, y me voy a pelear hasta las últimas consecuencias para que lo levanten de una vez por todas.
¿Vieron como un logro sectorial las modificaciones que anunció el Gobierno en el programa ATP?
-Hasta que llegamos a la reunión con Alberto Fernández no nos servía ninguna de las medidas que habían tomado. Creemos que el presidente entendió que el turismo será el último sector en reactivarse. Está tomando decisiones para pasar la cuarentena, pero a nosotros eso no nos era útil. A partir de eso adoptó otras políticas. Son buenas y sirven, pero no alcanzan. Está bien la ayuda para pagar sueldos, pero tengo facturación cero y me falta abonar la otra mitad del salario y la estructura. Puedo aguantar uno o dos meses, pero no seis. Necesitamos medidas para estar de pie cuando esto pase. Lammens nos reconoció que habrá un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo a tasas muy bajas para que podamos sostenernos.
¿Qué medidas faltan tomar para que las agencias tengan algo de aire?
-Nosotros no pedimos subsidios. Queremos que nos presten y devolveremos ese dinero cuando podamos trabajar. Necesitamos créditos a tasa cero o muy baja y un período de gracia para que eso tenga sentido. Se lo dijimos a AFIP: no nos sirve posponer los impuestos de abril por 60 días porque en junio voy a estar todavía más fundido. No me los cobres porque no te los puedo pagar. Después haceme un plan a futuro para que yo pueda hacerme cargo. Vamos en ese camino, aunque es muy difícil. Acá hay que entender algo de una vez por todas: el Gobierno nos va a ayudar dentro de sus posibilidades. Quizá no es lo que nosotros queremos y pelearemos hasta el último día, pero tenemos que hacerlo todos juntos. Basta de divisiones. Acá hay que trabajar codo a codo, sí o sí. No sirve agredir a un ministro ni a un dirigente. No hay que putearlo al ministro. Hay que permanecer unidos y cortar con las agresiones. No tiene sentido que yo me pelee con el ministerio como con la IATA, porque ellos no me escuchan y no les importa. El Gobierno sí lo hace y trabajamos juntos. Si lo que queremos es imposible, intentaremos conseguir lo más posible para salvarnos.
¿Cómo ves la oferta crediticia vigente para asistir a las pymes?
-La línea de créditos al 24% es un verso y se lo dijimos al presidente. Los bancos son los grandes egoístas de este país para con las pymes y serán culpables de los cierres de pequeñas empresas de cualquier rubro. Por eso, a Alberto Fernández le pedimos que las medidas que nos otorguen no sean a través de ellos. En principio, esta ayuda del programa ATP salió a través de la ANSES, así que en parte lo conseguimos. Lammens nos comentó acerca de la línea de créditos del BID y creemos que se va a implementar. Tendrían que ser a tasas muy subsidiadas. Si no son a 0% deberían ser del 7%, pero no más que eso.
Las cosas se pusieron un poco tensas con IATA en las últimas semanas por el tema de los reembolsos por cancelaciones.
-Lo que pasa ahí es que yo no voy a permitir que nos tomen el pelo. Estoy cansado de pelearme con IATA. Es un sinsentido con gente que es igual que los bancos. No les importa nada, toman sus medidas y a las agencias les deben 35.000 millones de dólares que no van a reconocer en el corto plazo. Estoy tratando de entrarles por todos lados, pero no tengo ninguna expectativa. Venimos trabajando mucho el tema reembolsos con las aerolíneas. Todas habían comenzado a cobrar el impuesto PAIS en una reemisión por el 100% del ticket. Ahora vamos logrando que entiendan que sólo debería ser sobre la diferencia de tarifa. Al principio reprogramaban a un año, aunque ahora hay varias que lo hacen a dos. También hay que ver cómo se acomodan las líneas aéreas después de esto. ¿Cómo reprogramo con Air New Zealand si no vuela más a Argentina? Me emitís con otra compañía o devolveme la plata. Y en eso también nos pelearemos con IATA. Le pedí a Lammens que también se meta en este tema.
¿Ya hay alguna idea de lo que pueda pasar con FIT 2020?
-Hay varias posibilidades: que no se haga o que se pase a diciembre. No la vamos a suspender hasta último momento porque creemos que sería un muy buen lugar para empezar a hacer negocios de vuelta. Tenemos que ver cómo están los países del mundo, si vienen, si los dejan salir.