Más de 700 delegados de 63 países, reunidos en la Conferencia Mundial de Turismo Joven y Estudiantil (WYSTC por su nombre en Inglés) en San Diego, EE.UU., solicitaron a los gobiernos y las empresas de todo el mundo aprovechar el potencial del segmento en el que trabajan a la luz de su capacidad para impulsar el crecimiento y dinamismo de la actividad turística y el desarrollo mundial.
El pedido, que cuenta con el apoyo de la Organización Mundial del Turismo (OMT), junto con otras recomendaciones, fue incluido en la Declaración de San Diego. El tratado está compuesto por la opinión de los miembros  de la Confederación Mundial de Turismo Joven, Estudiantil y Educacional, que participaron mediante Twitter, e-mails, y otros canales de comunicación para expresar sus sugerencias con respecto a cuáles debían ser las prioridades en su segmento.
La OMT estima que el turismo joven genera más $185 mil millones de dólares a nivel internacional, y que gran parte del crecimiento está liderado por los países emergentes cuyos atractuvis mercados resuelven el problema de jóvenes de las economías avanzadas para permitirles viajar a pesar de la incertidumbre económica.

Un segmento de peso
“El 20 por ciento de los 990 millones de turistas internacionales que se movieron por el mundo en 2011 fueron jóvenes”, señaló el secretario General de la OMT, Taleb Rifai, en la apertura de los tres días conferencia.
“Estos jóvenes son los viajeros con conciencia ecológica y tienden a permanecer más tiempo e interactúan más estrechamente con las comunidades que visitan que el turista medio. De esta manera, los viajes para jóvenes se han convertido en una de los más prometedores caminos hacia un sector turístico más sostenible y responsable”, afirmó el titular del organismo de Turismo.

Optimismo
El director General de la WYSE Travel Confederation, Espen Falkenhaug, quedó exultante tras la Declaración efectuada en la Conferencia Mundial de Turismo Joven y Estudiantil.
“El turismo joven juega un papel cada vez mayor impulsando el crecimiento de la industria de viajes en su conjunto. Las investigaciones siguen demostrando que los estos turistas contribuyen al desarrollo tanto económico como social del destino elegido, así como también son enriquecidos por la experiencia de viaje y conocimientos que llevan de vuelta a sus casas y culturas”, explicó el directivo.
Además agregó que “esto genera una enorme diferencia en la comprensión cultural y nuestro objetivo es asegurar que la San Diego Declaración seguirá avanzando para facilitar estas interaccione