El próximo 10 de agosto la entidad celebrará una nueva “Asamblea General Ordinaria”, donde se elegirá a un nuevo presidente, luego de seis años ininterrumpidos de Oscar Ghezzi en el poder.

Por medio de su boletín electrónico, el 14 de julio la Cámara Argentina de Turismo (CAT) hizo un anuncio que, de cara al futuro, dejará una huella en la entidad: “Convocatoria Asamblea General Ordinaria el jueves 10 de agosto de 2017”. Esto significa, entre otras cuestiones, que se celebrará la “Elección de 1 presidente del Consejo Directivo por un período de 2 años”. 
Lógicamente, esta situación (un nuevo presidente después de tres mandatos consecutivos de Oscar Ghezzi) deja una puerta abierta para plantear los interrogantes de siempre, más allá de arriesgar quién puede llegar a ser el eventual sucesor. Por ejemplo, lo que muchos se preguntan: ¿cuál ha sido el rol de la CAT en estos años? Y, por qué no, ¿cuál debería ser su lugar en los próximos?
Sea cual fuere el resultado o el rumbo elegido, está claro que no se debe perder de vista el verdadero foco de la cuestión: el turismo es una industria capaz de generar una cantidad de empleo calificado como ninguna otra. No en vano se insistió para que la actividad tuviera un Ministerio que lo represente a nivel nacional, logro conseguido en el 2010. O, como plantea el primer artículo de la Ley Nacional de Turismo (sancionada en 2004 y promulgada en 2005): “Declárase de interés nacional al turismo como actividad socioeconómica, estratégica y esencial para el desarrollo del país. La actividad turística resulta prioritaria dentro de las políticas de Estado”.
Además, al crearse el Instituto Nacional de Promoción Turística por mandato de la Ley Nacional de Turismo, la CAT ocupa un lugar en ese organismo, sitio en el que se deciden y plantean las estrategias de Marketing y Promoción que desarrolla la Argentina en diferentes mercados del mundo.
 
Misión y objetivos
Si nos remitimos a los conceptos vertidos desde la misma institución la misión de la Cámara Argentina de Turismo, como referentes de la actividad privada es “representar y defender a la comunidad turística de la Repubica Argentina , impulsando la sustentabilidad mediante la proteccción del medio ambiente, de los pueblos originarios y de la identidad cultural, así como también crear conciencia en la sociedad de la importancia del sector y promover el turismo dentro y fuera del país”. 
Sus objetivos son “representar, defender y promover el desarrollo de la industria de servicios turísticos de la República Argentina en el país y el extranjero, para lo cual agrupará a los diferentes sectores y estamentos que la componen... procurando promover la más estrecha colaboración entre los integrantes de la actividad turística, y ser el portavoz de sus coincidencias emitiendo opinión sobre todas aquellas cuestiones concernientes a la actividad y políticas turísticas.
 
Logros y traspiés
Durante la gestión del Gobierno Kirchnerista, con Enrique Meyer comandando la cartera de Turismo (cuando aún no era Ministerio), la Cámara se planteó como objetivo acercarle 27 medidas, las cuales debían ser cumplidas por parte del Estado para, según la entidad, desarrollar la industría turística. En gran medida, ese manifiesto fue cumplido por parte del gobierno y se lo catalogó como un gran logro de la CAT. 
Muchos de los puntos planteados, por el entonces presidente de la entidad, Marco Palacios, se vieron cristalizados con la sanción de la Ley Nacional de Turismo, a excepción del reclamo de eximir al turista extranjero del IVA, que se consiguió recién durante la actual gestión del Ministro Gustavo Santos. En cambio, otra solicitud que sí había sido escuchada durante la gestión anterior, como el corrimiento de los feriados, en el útlimo año y medio fue dramáticamente reducida, lo que debería ser tomado como un traspié aunque podría considerarse como una concesión por parte de la CAT para así mantener la buena relación que existe entre el gobierno y el sector privado.
Un hecho que debe remarcarse es que a lo largo de estos últimos años se han logrado conformar las Cámaras de Turismo provinciales, un viejo anhelo ya concretado.  
      
Mejorar la presencia
La última gestión de Ghezzi fue coherente con los objetivos que se planteó al comienzo. Entrevistado por Mensajero Turístico a poco de haber obtenido su segunda y última reelección, habló de cuentas pendientes: “Creo que es terminar de consolidar al país turístico recuperando a los mercados emisores”, decía entonces en referencia a Turquía, China, Rusia, India.
A las pruebas nos remitimos. Pocos días antes de que concluya 2016, y en el marco del habitual anuario que realiza esta revista, Ghezzi apuntó: “El trabajo está dando resultados. Y se percibe en la fuerte presencia de Argentina en las ferias, o en el crecimiento de los mercados, como el de Estados Unidos, o los tradicionales”. 
No obstante, hay una verdad: hayan surtido efecto o no, la CAT no escatimó en participaciones internacionales. Por eso, se pudieron ver delegaciones de la entidad en eventos realizados en todo el mundo. También es notable el acompañamiento constante que hace a las actividaes que realiza el Ministerio de Turismo y el Inprotur a lo largo del país. Además es notorio el apoyo brindado hacia la cartera de Santos, de hecho, cuando surgió el rumor de la posibilidad de que el Ministerio se degradará a Secretaría, luego de las próximas elecciones legislativas, al igual que la mayoría de los actores de turismo, la CAT fue contundente al señalar que sería un completo desatino por parte del gobierno de Macri.
 
¿La deuda?
“Yo digo que un país con las capacidades que tiene el nuestro no puede sentirse importante en turismo si no lo tiene consolidado totalmente. Y un país como el nuestro, que yo defino como un continente en sí mismo, tiene grandes posibilidades turísticas”, manifestó el todavía presidente de la CAT en el mano a mano que tuvo con Mensajero en 2015, sobre la promoción del turismo interno. Precisamente, en esta materia es donde la entidad concentra el grueso de las críticas que esbozan algunos actores del sector (en off, claro está). 
También fuera de micrófono, son varios los que tildan a la entidad de cumplir simplemente un rol de acompañamiento para con el MinTur, a diferencia del protagonismo que tienen otras cámaras, como la Unión Industrial Argentina (UIA) con respecto al Ministerio de Producción; o inclusive la CAME.
Más allá del nombre de quien ocupe el cargo detentado hasta ahora por Ghezzi, que aún se encuentra en discusión, con un candidato bastante firme y otro que surgió como rumor en las últimas semanas, la Cámara debería cumplir un rol que en ocasiones se ve desdibujado, que es el de ser la contraparte privada del Ministerio de Turismo. 
 
El método de elección 
De acuerdo al estatuto de la CAT: “Todos los socios pueden asistir y participar con voz y voto en las Asambleas Generales, sean ordinarias o extraordinarias; a excepción de los Socios Honorarios, quienes tendrán voz y no voto”.
Por otro lado, plantea que “los socios Plenarios participan por sí en las asambleas. A dicha categoría corresponderá 65 votos”. Individualmente a cada socio se le asignarán los votos que a continuación se indican: AAAVyT: dieciocho (18) votos; FEDECATUR: doce (12) votos; AHRCC: seis (6) votos; AHTRA: seis (6) votos; FEHGRA: seis (6) votos; JURCA: cuatro (4) votos; AOCA: cuatro (4) votos; CADEA: dos (2) votos; CATC: tres (3) votos. Además, aclara: “Entidad representativa del transporte automotor que el Consejo Directivo determine, conforme se dispone en el Art. 5.1: cuatro (4) votos”.