Una demanda colectiva presentada en Estados Unidos acusa a la principales online y a varias cadenas hoteleras de fijar precios mínimos y, con ello, ir contra la libre competencia.
La demanda ha sido presentada en el tribunal del Distrito Norte de  California por el gabinete de Seattle, Hagens Berman Sobol Shapiro, en representación de varias agencias minoristas online, contra, entre otros, Expedia, Booking, Travelocity, Sheraton Hotels and Resorts, Hilton Hotels y Marriott International que dicen violan leyes antimonopolio, tanto federales como del Estado de California
Las acusan de pactar en secreto unos precios fijos frustrando la competencia, aprovechando su posición de fortaleza en el mercado, con lo que estarían perjudicando no sólo a las agencias sino también a los consumidores.
“Las grandes webs online, trabajando con las cadenas hoteleras, han creado la ilusión de que los consumidores inteligentes pueden gastar tiempo investigando las tarifas hoteleras para encontrar buenas ofertas”, afirma el co-fundador de Hagens Berman, Steve Berman.  “La realidad es que esos ilegales acuerdos de paridad de precios significan que los consumidores no ven más que diferencias estéticas y los mismo precios en todas partes”.
Se trata de algo más que una investigación que afecte a partes concretas y que podría hacer replantearse muchas de las normas con las que actualmente funciona el mercado.
Las grandes vendedoras on line ganan ya sea comprando noches de hotel al por mayor y luego venderlas a un precio más alto a los pasajeros o cargando un fee por el servicio de reserva de una habitación.

En el Reino Unido
El organismo de la competencia de Reino Unido ha dictaminado que Expedia, Booking e InterContinental Hotels Group (IHG) han infringido la ley de la competencia al pactar precios mínimos.
Un escrito de este organismo, Office of Fair Trading (OFT), es un dictamen con carácter provisional que recoge que ambas online acordaron por separado con la hotelera  unas tarifas de precios de modo que no se permitiría a otras agencias vender por debajo de esos precios la habitación de hotel.
La investigación comenzó a raíz de la queja presentada por una pequeña agencia de viajes online británica en septiembre de 2010. La agencia dijo que estaba siendo impedida de ofrecer los precios que deseaba aplicar por varias hoteleras pero al final el organismo de la competencia redujo la investigación a las partes ahora implicadas para agilizar la investigación, lo cual no implica que no pueda ampliarse y tener mayores implicaciones ya que asegura que estas prácticas podrían estar muy extendidas. El escrito de la OFT señala que estas dos agencias online y la hotelera pueden haber limitado anticompetitivamente la capacidad de las agencias de realizar descuentos a costa de sus propios márgenes, restringiendo por tanto la competencia en precios en el mercado y constituyendo, de este modo, barreras a la entrada y a la expansión de las agencias online.
De momento, las partes implicadas tienen la oportunidad de hacer sus alegaciones frente al escrito de objeciones emitido por la OFT. Las sanciones a las que se enfrentan los implicados podrían alcanzar el 10% del volumen de negocios total en su ejercicio anterior.
Según el director general de Blink, una aplicación de móvil para reservar hoteles que nació a finales de 2011, Mark Datta, “los pequeños canales de reservas como Blink se ven presionados a mantener determinadas tarifas para proteger el interés de los grandes grupos como Booking.com y Expedia a costa de los consumidores”.
La compañía añade que, “aunque la denuncia se ha llevado a cabo en el Reino Unido, que cuenta con el mayor sector de agencias de viaje y reservas online de Europa, donde se alega la infracción de la Ley De Competencia de 1998, esta supuesta distorsión o limitación a la competencia en materia de precios se extendería al escenario internacional, ya que estos gigantes operan a gran escala y podrían estar infringiendo también el Artículo 101 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea”.

Competencia ilegal

Un representante de Tourism & Law, Ricardo Fernández Flores, miembro de un despacho de abogados independientes de España especializados en la temática del turismo, explica en el sitio Hosteltur.com “la fijación de precios entre empresas que actúan en distintos planos de la cadena de distribución es una práctica perseguida a nivel comunitario por considerarse especialmente grave (una de las llamadas cláusulas negras), por su aptitud para falsear la competencia”.
“Lo que estamos viendo no es nuevo, el sector turístico ya se ha enfrentado a retos similares y los ha superado”, indica Fernández. La actual situación de fricción absoluta entre ciertos hoteleros y puntocom es evidentemente insostenible. Quizá sea el momento de plantearse un modelo similar al de la venta de vuelos. Unos precios netos por habitación, no comisionables, y la posibilidad de que cada agencia establezca los fees que considere”.
Para Tourism & Law, “el gran problema es que en otros escenarios como el abuso de posición de dominio lo relevante ha sido el contexto: la posición en el mercado de los implicados, su tamaño, el porcentaje de la demanda vinculado y sus efectos sobre el mercado; lo importante debería ser si la conducta es idónea para producir efectos negativos en el mercado, si tiene la aptitud suficiente para provocar un daño real en la competencia”.
La realidad es que si bien muchas agencias se dedican a pactar unos precios por habitación para posteriormente revenderlas con un margen, otras muchas simplemente venden al precio que el hotelero fija y facturan su comisión, siendo en este caso perfectamente legal la actuación de las partes.
La disputa recién comienza. Habrá que ver cómo falla la justicia norteamericana y si eso produce un efecto catarata en los demás países donde se los cuestiona seriamente.
Posiblemente sea sólo una tormenta pasajera y no un síntoma de cambio climático.

Multan a Orbitz
El Departamento de Transportes de Estados Unidos ha multado a la agencia online Orbitz por no poner en lugar bien visible la información sobre los cargos por equipaje en su web.
El departamento ha comprobado que durante un breve periodo posterior al 24 de enero, la online ofrecía la información sobre estos cargos en la primera página de la búsqueda pero muy abajo. Por ello ha considerado que violó las leyes de protección al consumidor a este respecto que establece el DOT, que precisamente entraron en vigor en esta fecha.
La multa asciende a 25.000 dólares, estableciendo la sentencia que deberá de pagar otros 25.000, si volviera a incurrir en esta práctica antes de que termine el año.
El secretario de Transportes, Ray LaHood ha comentado en un comunicado que “Los pasajeros aéreos deben ser capaces de determinar el costo total de su viaje, incluyendo los fees por equipaje, rápida y sencillamente”.
La agencia ya lo ofrece en luga