En el marco del 198 º aniversario de la patriótica marcha del pueblo jujeño, el Gobierno Provincial, el municipio capitalino y la Unidad Bicentenario de Presidencia de la Nación, convocaron a la ciudadanía a sumarse a los actos organizados como una oportunidad más para reconocer nuestro pasado.
En agosto de 1812, la Independencia americana estaba en serias dificultades debido a numerosos reveses militares ante los ejércitos españoles. Así, el Triunvirato le ordenó al General Manuel Belgrano, que estaba en esta ciudad al frente del Ejército del Norte, retirarse hasta Córdoba para escapar de las fuerzas realistas que ingresaban por la Quebrada de Humahuaca al mando del General Pío Tristán, que lo superaban ampliamente en número.
Por primera vez, Belgrano decide emplear la táctica militar de “tierra arrasada”, consistente en no dejarle al enemigo nada útil, retirarse llevando todo lo posible, quemando o inutilizando lo que no se podía llevar, no dejar nada que pueda servir para reaprovisionarse o guarecerse.
El Creador de la Bandera organizó la retirada de la población, lo que luego se conoció como “El Exodo Jujeño“, dando conocer a los ciudadanos la siguiente proclama: “Desde que puse el pie en vuestro suelo para hacerme cargo de vuestra defensa, os he hablado con verdad… Llegó pues la época en que manifestéis vuestro heroísmo y de que vengáis a reuniros al ejército a mi mando, si como aseguráis queréis ser libres . . . “.
Había que retroceder hacia el Sur llevándose alimentos, armas, ganado y quemando todo a su paso. Las crónicas de la época coinciden en que no hizo falta gran coacción para acatar la medida, puesto que los jujeños estuvieron dispuestos  a los mayores sacrificios  si ello ayudaba a la causa libertaria. Siguieron a Belgrano con lo puesto, al sólo precio de una vaga esperanza.
Días después la retaguardia patriota se enfrentó con la avanzada del ejército español venciéndolo en el combate del río Las Piedras. El 13 de septiembre  de 1812 Belgrano llega a Tucumán. Se encuentra con que la población, lejos de dejarse llevar por los ánimos derrotistas de esos días difíciles de la revolución, esta dispuesta a pelear. Pudo sumar algunos soldados, pero los realistas siguen siendo el doble, en hombres y equipo.
Sin embargo Belgrano toma una decisión que cambia el curso de la Historia, dobladas sus fuerzas por los realistas, juega una patriada y a la madrugada del 24 de Septiembre, luego de dos días de pelea, sabe que la batalla está decidida a su favor.
Belgrano supo que  si no hubiera presentado batalla el enemigo se hubiera apoderado de todo el noroeste argentino, lo que hubiese significado  muchos años más de lucha en la revolución americana.
Este es uno de los tantos episodios que hicieron de Belgrano uno de los más grandes héroes de n