Que una firma familiar cumpla más de 40 años ya de por sí marca un éxito empresarial, y si se trata de una agencia de turismo, en un mundo tan cambiante como el nuestro es doblemente meritorio. La familia Paretti nos cuenta su historia.

Florida Travel Service es una de las longevas empresas sobrevivientes del mercado turístico nacional.
Pasó por todas las crisis imaginables, vio nacer y caer compañías aéreas, vivió en la época de oro cuando la rentabilidad de una agencia estaba dada por el gran volumen de ventas de pasajes aéreos, hoy casi inexistente, sacó vuelos chárter a Oriente allá en la década del 70, y hasta logró que un avión Jumbo de Japan Air Lines aterrizara en Ezeiza con pasajeros propios por primera y única vez en su historia.
Dos generaciones de la misma familia conviven hoy en el negocio que continúa tan activo como siempre. Jorge, Liliana y Hugo Paretti, junto a sus sobrinos, siguen buscando adaptarse a las nuevas reglas del negocio, teniendo a su cargo una representación aérea, operando como mayoristas en el territorio nacional y atendiendo a su clientela, fielmente seguidora desde hace 40 años.
En todos sus años han recibido algunas importantes menciones como el hecho de haber alcanzado el décimo puesto en I.A.T.A. entre aproximadamente 3000 agencias de todo el país; “La Esmeralda” otorgada por Canadian Pacific por ser los primeros en ventas y “El gran premio Master 30” otorgado por LanChile.

Seis hermanos
En la década del 70 los seis hermanos Paretti desarrollaban su vida profesional lejos del turismo. La casualidad, o el destino los puso ante la disyuntiva de abrir una agencia de viajes o seguir en sus actividades, ligadas a un frigorífico o a un banco, por ejemplo, y en una jugada arriesgada apostaron por este apasionante mundo de los viajes y tuvieron un éxito rotundo.
Tres de ellos continúan actualmente al frente de la empresa, mientras que Daniel, Nora y Nelly  ya han traspasado la posta a sus hijos.
Los hermanos Paretti que continúan con sus tareas cotidianas en Florida Travel Service  en sus actuales oficinas, no ya sobre la calle Florida que le diera su nombre, sino sobre la calle Tucumán, nos reciben para contarnos sobre su pasado y presente. Liliana, Hugo y Jorge toman la palabra y la charla se hace fluida y coloquial.
Hugo comienza diciendo “el 15 de octubre pasado cumplimos 40 años y empezamos en el año 69 con la dirección de mi hermana mayor, hoy retirada. Todo se gestó entre febrero y agosto de ese año cuando la propuesta de un conocido nos empujó a entrar a esta actividad tan apasionante. Finalmente decidimos encarar un negocio familiar y compramos unas oficinas en la calle Florida, sobre la librería El Ateneo, lugar donde estuvimos hasta el año 83.
A los pocos años, y por mi relación personal con el entonces representante de Swissair conseguimos afiliarnos a IATA y tuvimos nuestras tres primeras “chapas” con Lufthansa, la propia Swissair y Varig, y desde entonces (año 74) somos agencia IATA reconocida”.
Jorge acota, “por ese entonces yo trabajaba en un Banco y conocí a una señora japonesa que nos puso en el camino de los viajes a Oriente  y trabajó con nosotros durante 24 años, ella era Miko Uehara. En ese momento comenzamos a vender grupos a Japón, inclusive nos manejamos con vuelos chárter, cosa que acá no se conocía y salíamos con un vuelo completo a Brasil o sino a Los Ángeles y de allí combinábamos con los vuelos de Japan Air Lines. Llegamos a volar con Pan Am o Aerolíneas Argentinas cuando en una época volaba a la costa oeste de Estados Unidos.
Fue por nuestro intermedio que un 747 de la JAL aterrizó en el país con un chárter que venía hasta Río de Janeiro y el gerente de la empresa le pidió permiso a Aerolíneas Argentinas que los dejó aterrizar con nuestros pasajeros, directo en Ezeiza, cosa que nunca había pasado antes. Y esos son hitos que nadie nos puede quitar y que logramos gracias al intenso trabajo que encaramos”, decía Jorge.
“Ahora seguimos muy ligados a Oriente pero enfocados más que nada a China y Corea. Y durante varios años estuvimos entre los primeros tres o cuatro vendedores para la región, de todo el país. Nosotros llegamos a vender de 50 a 55 pasajes por día a Japón y Corea, y en ese entonces todos se hacía a mano, así que mis dos hermanas se quedaban hasta la madrugada para poder entregarlos a tiempo”, nos comentaba Hugo.
Y Jorge nuevamente agrega un recuerdo, “llegamos a sacar 3 chárter a Japón en una misma semana”.

Las nuevas generaciones
Ahora la segunda generación, hijos de los fundadores de Florida Travel Service, se encuentran trabajando codo a codo con sus tíos para poder continuar con una tradición de dedicación y amor a la empresa y al turismo como negocio. Ellos son el Lic. Roberto Bermúdez, Carlos Bermúdez, Diego Paretti y Héctor Masters. Cada uno encargado de un área de negocios en pos del beneficio de todos.
Con 20 empleados que atienden a sus clientes de tantos años, han sumado la operatoria de Argentina con productos en todo el territorio nacional, y cuentan entre sus cartera de opciones con viajes en Bus a Villa Carlos Paz, Puerto Madryn, Villa de Merlo, Termas de Federación; y también Iguazú, Salta, Bariloche, Villa la Angostura, Mendoza, Ushuaia y El Calafate en avión, con programas cortos que pueden muy bien ser aprovechados para este feriado largo del 24 y 25 de mayo.
Teniendo como escenario las diferentes regiones del país y las posibilidades de actividades que éstas proponen ponen en oferta al mercado programas para pescadores como Pesca de Tiburones en San Blas, o en Paso de la Patria (Corrientes) y alojamiento en Estancias Rurales en la provincia de Buenos Aires.
Dentro de sus servicios cuentan con Organización de Eventos y Congresos; Viajes de Estudios de Inglés, Francés y Alemán en el exterior, servicios Receptivos en Buenos Aires y alquiler de Yates con o sin tripulación.

Hacia adelante
El futuro verá seguramente a Florida Travel Service trabajando intensamente. Es lo que transmiten los hermanos Paretti y sus hijos, sin ninguna duda, y tal vez por ello es que rijan sus pasos con una frase que resume muy bien su política empresaria y personal “Si supiera que el mundo se acaba mañana, yo, hoy todavía plantaría un árbol”, Martin Luther King.
www.fts.com.ar

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