El rol de la Secretaría de Transporte, su vinculación con el Turismo, los cambios en la ANAC, la relación bilateral con Brasil, el traspaso de la operación de Aeroparque a Ezeiza y los nuevos desafíos de Aerolíneas Argentinas son algunos pasajes de una charla a fondo con Juan Pablo Schiavi.

Madrugó y la cara lo demuestra. Un café intenta reponer las energías pero los ojos apenas se mantienen entreabiertos. Sin embargo, la falta de sueño no deviene en mal humor y el secretario de Transporte de la Nación accede con amabilidad a conversar en exclusiva con Mensajero mientras espera para subirse al avión que dará comienzo al Corredor Federal de Aerolíneas Argentinas.

Hace poco tiempo surgió el rumor de la posible elevación a rango ministerial de la Secretaría de Transporte que usted dirige. ¿Qué hay de cierto en estas versiones?
Me parece que son cosas que se dicen porque algunos necesitan escribir y llenar páginas. Creo que no es más que un rumor que surgió por la necesidad de algunos de escribir algo.

Esos mismos rumores hablaban de la posibilidad de su salida de Transporte para que un hombre que responda al titular de la CGT, Hugo Moyano, ocupe el cargo. ¿De dónde cree que salen esas versiones y a qué intereses responden?
No lo sé, ni me interesa. Hace muchos años que estoy en la política y conozco el manejo de los tiempos y de ser cauto en las cosas que se dicen. La mejor carta de presentación que uno tiene es el trabajo y, vuelvo a repetir, la experiencia de un equipo que hace políticas públicas en la Argentina desde hace mucho tiempo.  

¿Cómo es su relación con Hugo Moyano?
Buena. La Secretaría de Transporte tiene relación con todos los gremios -hay unos 60- con los que trabajamos cotidianamente. Tiene que ver con lo que decía hace unos días el ministro de Planificación Federal, Inversión pública y Servicios, Julio De Vido, en el acto de asunción de Alejandro Granados al frente de la ANAC: para nosotros el movimiento obrero es la columna vertebral de nuestras políticas. Una demostración de ello es Aerolíneas Argentinas; en la recuperación de la empresa mucho tuvieron que ver los trabajadores.

El presidente del Ente de Turismo porteño, Hernán Lombardi, dijo que el transporte aerocomercial debía estar bajo la órbita del Ministerio de Turismo. ¿Está de acuerdo con esta afirmación?
Sería bueno que Hernán Lombardi se dedique a la cultura y al Turismo de la Ciudad.
La creación del Ministerio de Turismo ha hecho que podamos potenciar algunas políticas públicas que tienen que ver con el Turismo y que, decididamente, estaban mucho más dispersas.
No obstante, los organigramas son los que tenemos y con Enrique Meyer se trabaja y coordinan las políticas aerocomerciales en general; lo que tiene que ver sobre todo con los esquemas de difusión de bilateralidad de la Argentina. En ese punto una mala decisión política, no sólo afecta la política aerocomercial en general, sino también la política turística.

Se dijo que la renuncia del titular de la ANAC, Rodolfo Gabrielli, se produjo por la presión de los gremios. ¿Cuál es su visión al respecto?
La vida de los funcionarios tiene ciclos. El que piense que existe la eternización en los cargos de funcionario público está equivocado. Los únicos cargos donde tenés fecha de comienzo y de final son aquellos en los que el pueblo te elige. Gabrielli que es una persona de la política, que fue gobernador de una provincia elegido por el voto popular (N. de la R.: Rodolfo Gabrielli fue gobernador de la Provincia de Mendoza entre los años 1991 y 1995) esto lo sabe, como lo sabe cualquier funcionario del Gobierno.
Él trabajó en el primer esquema de transición de la ANAC de una estructura militar a una civil. Ahora comienza una nueva etapa con un hombre muy joven, que tiene experiencia pública en el aérea de la aviación; que vendrá a cumplir con esta segunda etapa que está signada por mejorar aspectos de la infraestructura de nuestro control de la aviación civil, cuidar lo que nos ha costado conseguir -cuidar de AR para que pueda volar y vuelva a ser una compañía con una gran conectividad en todo el país-; y, por otro lado, tener la capacidad de articular políticas para que muchos usuarios que quieran venir a la Argentina puedan hacerlo.

Hace un tiempo surgieron diferencias con la ANAC de Brasil a partir de que ellos pidieron más frecuencias y ustedes no se las otorgaron. ¿Cómo está hoy la relación?
Argentina es socia de Brasil, y tenemos políticas comunes en muchas cosas. En este caso nos juntamos para hablar sobre la política aerocomercial de los dos países, de complementación y de desarrollo; y cada uno defiende lo suyo.
Para nosotros es una bandera la defensa de nuestra línea aérea pero sabemos que muchos turistas brasileños están yendo a Bariloche; entonces también tenemos que tener la flexibilidad de adecuar eso con la necesidad de que si el resto de los días nosotros queremos volar podamos hacerlo.

¿Cómo se prepara el traspaso de los vuelos a Ezeiza para cuando cierre por reformas el Aeroparque Jorge Newbery en octubre?
Tenemos que hacer una reparación de la pista que es importante para la seguridad. Cuando pasan sucesos de este tipo se ponen a prueba dos cosas: comprobar si se hizo todo bien y, el segundo, es saber que las molestias van a existir y tienen que tener el menor impacto posible.

En algunos medios ya comenzó a manifestarse el descontento por esta acción.
La relación nuestra con los medios es cotidiana. Pero nosotros no trabajamos para los medios, trabajamos para la gente. Lo único que me preocupa es que la persona que vuela pueda salir y llegar; si a los medios les gusta o no es otra cuestión.

¿Por qué cree que Aerolíneas Argentinas está siempre en el ojo de la tormenta?
A veces hay un trato demonizado de un medio muy importante que me costó mucho entender el por qué; no se puede comprender la lógica. Es constante el ataque: perdemos menos plata y publican que perdemos más; hacemos algo bien y no lo ponen; cometemos un error y es tapa.
Hay otro medio que nos ataca todos los días, con lo cual sabemos que hagamos las cosas bien o mal esa arremetida va a continuar.
Igual comprendo que para algunos el tema de Aerolíneas Argentinas es difícil de entender pero las políticas públicas son así. Seguramente, a lo largo del tiempo, vamos a ver dos cosas: lo que fue en términos de destrucción nacional la caída de AR en los ´90; y lo que es este proceso de recuperación. Si hoy no tuviésemos este recurso que es Aerolíneas Argentinas no tengas dudas que el país estaría mucho más desintegrado y habría destinos que estarían fuera del mapa.

¿Cree que la gente está entendiendo este objetivo que pregona el Gobierno de transformar a Aerolíneas Argentinas en un servicio que cumple un rol social cuyo fin último no es la rentabilidad económica?
Hablar de la gente es medio complicado, pero me parece que hay un rol que es valorado. La prueba está en que, en esta última etapa que hemos podido mejorar la puntualidad, Aerolíneas Argentinas viaja cada vez más llena y está siendo más usada por los viajeros frecuentes.
Domingo Cavallo planteó en la década del ´90 que toda cosa que no era rentable había que cerrarla; así nos quedamos sin trenes. En el mundo no hay ningún ferrocarril que sea rentable y no por eso los países serios e importantes dejan de tener su sistema ferroviario. Nosotros aún estamos pagando las consecuencias de esa mala decisión.

¿Cómo es su relación con los gremios de Aerolíneas Argentinas?
Tengo buena relación con todos.

A veces se los acusa de ser un problema para el normal desarrollo de Aerolíneas.
Si los gremios de Aerolíneas no hubiesen luchado hoy la empresa no existiría.

¿Está preparada la Argentina para hacer frente al incremento de cruceros?
El país tenía una asignatura pendiente en cuanto a la infraestructura para el arribo de cruceros. Lo que se ha hecho en este último tiempo es potenciar las obras en Dique 1 y 2 para permitir una llegada mucho más lógica con un programa de inversión muy grande que ha hecho la concesionaria portuaria. Por suerte, este año funcionó muy bien, pero sabemos que puede funcionar mucho mejor. Esperamos que este año con las nuevas obras se flexibilice la capacidad de tránsito de pasajeros; que es muy importante en la incorporación de riqueza a la Argentina.

Teléfono para Lombardi

En declaraciones a Télam, Juan Pablo Schiavi salió al cruce de las declaraciones de Hernán Lombardi, quien señaló que “el Turismo no puede seguir creciendo por la política de Aerolíneas”.
“Me parece sospechoso -afirmó- que en el mismo día en que Aerolíneas Argentinas implementa el Corredor Federal, que posibilita hacer más sencillo conocer el país y no depender de Buenos Aires, Lombardi salga a hacer declaraciones de este tipo. Aerolíneas se está reconstruyendo y está progresivamente usando la totalidad de las rutas que le son propias. Entregarlas a las compañías extranjeras, como propone el ministro, no es otra cosa que continuar la política que llevó adelante el gobierno de la Alianza, del cual él fue parte y que implicó la destrucción de la compañía”.