Una distendida charla con Ignacio Ferrer, Country manager para Argentina y Uruguay de Air Canada, en donde hablamos acerca del presente de la aerolínea, su red de conexiones y de porqué el Canadá merece ser un destino turístico en sí mismo.

Hace unas semanas se entregaron los World Airline Awards Skytrax 2017, y Air Canada fue uno de los grandes ganadores, ¿en qué rubro resultaron elegidos?
Hemos obtenido el premio a la Mejor Compañía Aérea de América del Norte, ¡mirá que peleamos con grandes jugadores! y todos apostando por la innovación y la tecnología. El haber recuperado este premio, después de recibirlo por cinco años consecutivos, significa que la compañía está por el camino correcto. La noticia ha sido muy bien recibida por la empresa, y está dando vueltas por todos lados. Al mismo tiempo, Skytrax nos denomina como la única compañía área en obtener la categoría de cuatro estrellas en América del Norte. Eso es importante.
 
¿Cuáles son los pilares sobre los que se asienta este buen comportamiento de la compañía?
Este año, y el anterior, la política de la empresa ha sido el costumer centricity, o sea, poner al pasajero en el centro de toda acción. Tanto desde la parte comercial, de la parte tecnológica, de atención al público, y todas las áreas de la empresa, que son muchas, tienen al pasajero/cliente como el centro de atención. Creo que ese es uno de los pilares fundamentales por los cuales hemos recuperado este premio. En segundo lugar es la innovación tecnológica, Air Canadá ha dado pasos agigantados, y es pionero y líder en muchas de las innovaciones tecnológicas que hoy ofrecen otras aerolíneas, sobre todo en la región. A eso se le suma la incorporación de aeronaves nuevas, y la remodelación de los interiores de otros equipos, con lo cual ofrecemos un nuevo producto para el pasajero.
 
¿Cómo están posicionados actualmente en el mercado nacional?
En Argentina estamos operando cinco veces semanales, pero en la temporada alta  aumentamos a seis. Lo interesante de este año es que desde marzo estamos operando con el B787 Dreamliner, es una novedad, porque dejamos de volar el B767. Durante todo abril operó la versión 787-800, y a partir de mayo, iniciamos la ruta Toronto-Buenos Aires con el 787-900, un gran avance en relación a la cantidad de asientos que estamos ofreciendo en el mercado, ya que es un 40 por ciento más.
 
¿Siempre con Santiago de Chile?
Sí, la ruta es compartida. El avión sale de Ezeiza y hace una breve escala en Santiago, ruta sobre la que tenemos posibilidad de venta, y como es vox populi, el argentino está eligiendo muchísimo Santiago de Chile como destino de compras y turismo. De hecho estamos teniendo una excelente venta de ese tramo, entonces, hay muchos pasajeros que se originan acá y terminan en Santiago, mientras que el resto sigue a Canadá. 
Es decir que la operación funciona bien en todos los sentidos. Y los pasajeros, sobre todo los que están acostumbrados a vuelos cortos en aviones de un solo pasillo, cuando se suben a un Boeing 787, un avión grande, wide body de doble pasillo, todo nuevo, descubren que es un placer volar en él y después nos piden como alternativa.
 
¿Por qué crees que sucede eso? 
Por la calidad del producto, porque volamos con un avión donde las turbulencias se sienten menos, y porque vuelan con un servicio de calidad internacional. Es un viaje distinto a volar con un avión de un solo pasillo y cruzar la Cordillera. El pasajero valora eso y te das cuenta cuando entran al avión. Cuando hicimos la inauguración del B787-800 acá, la cara de sorpresa de los pasajeros fue fantástica, descubrir la calidad del producto, los colores, que todo era nuevo y lindo. Esa es una gran diferencia.  
 
¿Con qué conformación vienen a la Argentina?
Viene muy bien esa pregunta porque además de todo lo que dije antes en los Dreamliner estamos incorporando una cabina adicional que es la Premium Economy. 
 
¿Sería un intermedio entre la Business y la Economy?
Correcto, es una tendencia nueva, nacida en Europa, las compañías norteamericanas todavía no lo tienen o recién ahora lo están copiando, después de Air Canada. Fuimos pioneros en esto. En total tenemos 297 asientos: 30 en Business Class, 20 en Premium Economy y 247 en Economy.
 
Contanos ¿cómo es entonces esta nueva cabina de Premium Economy?
En lo que queremos hacer hincapié es que se trata de una cabina totalmmente diferenciada, y eso es algo que debe saber el agente de viajes. No se trata del mismo cuerpo de Económica, en donde los primeros asientos tienen un poco más de espacio, como en otras aerolíneas. En este caso, es una cabina separada, con un servicio independiente, con un asiento diferente al de Economy, y si bien no se hace cama como la Business, tiene una mayor inclinación. La configuración 2-3-2 es muy cómoda y se acerca un poquito a lo que es la Business Class, sin el precio de la ejecutiva, lógicamente. Está siendo muy bien aceptada, sobre todo por el pasajero corporativo porque hay empresas que según la cantidad de horas de vuelo no pagan por una Ejecutiva, y esta es una buena alternativa para que el pasajero llegue mejor y más descansado. 
 
Recordanos, desde Toronto ¿a qué destinos nos permite llegar Air Canada?
Somos una opción muy interesante para ir a Asia, por ejemplo. A Japón volamos tanto a Haneda como a Narita y lo hacemos desde Toronto y desde Vancouver. También conectamos con Hong Kong, Pekín Shanghai y Seúl. Dentro de poco vamos a incorporar vuelos desde Vancouver a Taipei. Y en cuanto a otros continentes, hacia Europa volamos a un montón de ciudades, y si bien no somos la opción más clásica al haber vuelos puerta a puerta; muchas veces nos eligen quienes tienen un familiar o amigos o quieren conocer Canadá y aprovechan la opción de volar con nosotros hasta Toronto para cruzar después el Atlántico en un viaje de 7 u 8 horas a Europa. 
 
Convengamos entonces que llegar a Asia vía Canadá es una excelente opción.
Tal cual. En horas de vuelo estamos parejos con otras opciones, pero a nivel turístico siempre recomendamos que hagan un stop over en Vancouver a la ida, y en Toronto a la vuelta. Es una opción muy válida. De hecho, Vancouver es la puerta más importante de América del Norte hacia Asia. Es una ciudad hermosa, uno de los secretos mejor guardados por Canadá a nivel turismo. 
 
Hablemos de hacer turismo en Canadá. ¿Por qué?
Canadá es un lugar del que estoy enamorado desde hace muchos años. Tiene todas las condiciones para ser un destino turístico por sí mismo, y no sólo como una extensión de Estados Unidos. Es un país con condiciones de sobra para ser un destino turístico único. Con enormes extensiones y atractivos turísticos de una amplia diversidad como por ejemplo dos grandes metrópolis como Toronto y Montreal que están a menos de una hora de vuelo entre una y otra. Una es bien inglesa, la otra francesa, entonces, en una hora de viaje el turista cambió prácticamente de continente. Sinceramente ese paralelismo entre dos ciudades vecinas y tan distintas una de la otra, hace que como experiencia de viajero sea algo que no podés ver en muchos lugares del mundo. 
Toronto, en particular, es una las ciudades más cosmopolitas del mundo. Está confirmado por organismos especializados, que te podés encontrar con 100 idiomas distintos, con comidas de todo el mundo. Depende del barrio en el que estés, vas a encontrarte en un sector del mundo diferente. 
 
También tienen grandes centros de esquí...
Sí claro, para el oeste en la provincia Alberta están las ciudades de Calgary o Edmonton con buenos centros de esquí como Banff, o Whistler desde Vancouver, con toda la calidad de vida de Canadá. Uno se siente bien desde el momento en el que pone un pie en el país. Es muy lindo el trato de la gente.
 
Y es hasta más económico que Estados Unidos, ¿o no?
En este momento, lo es porque el dólar canadiense está un poco débil con respecto al dólar americano. Con lo cual, rinde más la moneda americana en Canadá. Hoy es una buena opción. 
 
Pero para llegar a Canadá hay un trámite previo, la visa. ¿Es online o presencial?
Hay que hacer algo mínimamente presencial en el VAC (Visa Atention Center) en Avenida Córdoba y Libertad (ya no más en la Embajada de Tagle). Lo que tiene la visa es que es muy sencilla de sacar, en la región es uno de los lugares en el mundo que menos tarda en dártela, cinco días hábiles, máximo. Con lo cual, en menos de una semana un pasajero que cumpla con los requisitos la tendrá sin problemas. Además gracias al Programa “CAN+” quienes tienen la visa de Estados Unidos vigente, o ya han tenido la de Canadá previamente, no necesitan presentar datos de solvencia económica. Es simplemente llenar los formularios y el trámite es muy rápido. El margen de aprobación de las visas para los argentinos está por encima del 97 por ciento. Y quien tiene la doble ciudadanía italiana o española no necesita visado.
 
¿Hay alguna novedad en el Programa de pasajeros frecuentes?
Es algo que se está trabajando para 2020, Air Canada ha decidido rescindir un contrato que tenía con la empresa Aimia, operador de Aeroplan. La idea es tener un programa de viajeros frecuentes propio para ofrecer mejores condiciones y así fortalecer sus relaciones con los clientes para que tengan una mejor experiencia de viaje. El sistema actual no funcionaba mal, pero necesitábamos tener el total manejo. Es un punto muy importante y cayó muy bien.
 
¿Cómo está hoy la relación de la aerolínea con los operadores argentinos?
Trabajamos muy bien. Siempre tuvimos muy buena relación, porque como somos una compañía pequeña, somos de puertas abiertas y estamos en diálogo permanente con todos. El hecho de que no haya una Oficina de Turismo de Canadá en Argentina hace un poco más lento la promoción del destino, por eso creemos que como tal no está del todo impuesto. Hay que trabajar más, sobre todo con el pasajero argentino que ha viajado mucho en la última década y es hora de que empiece a diversificar los destinos, a conocer cosas nuevas, salir de lo clásico, Estados Unidos o Europa. Canadá puede jugar como un nuevo destino para viajeros que son más curiosos. 
 
Algo que no impacta menos... es un destino muy seguro.
Sin lugar a dudas. En cuanto al estudio de idiomas Canadá es líder. Aprender francés en Montreal o inglés en Vancouver o Toronto, son opciones súper válidas y muy seguras. Además el dinero rinde.
 
Ignacio, ¿cuántos años ya en Air Canadá?
El año que viene cumplo 20. Toda una vida. Y en estos últimos 7 años el crecimiento de la aerolínea fue abismal. Duplicamos la cantidad de destinos, crecimos en número de vuelos, subimos en cantidad de staff a nivel mundial. De las regiones posiblemente Latinoamérica sea la que menos ha crecido, pero también creció. En la época de Canadian Airlines sólo se volaba a San Pablo y Buenos Aires, en un vuelo compartido. Ahora tenemos Buenos Aires, Santiago de Chile, San Pablo, Bogotá, Lima.  
Una novedad a nivel regional es que vamos a volar a Cartagena, con lo cual vamos a tener dos destinos dentro de Colombia. Al principio será un vuelo semanal, para empezar a probarlo. Obviamente, en relación con Centroamérica y el Caribe, es de las compañías aéreas que más vuelos tiene. Por una cuestión climática, el canadiense busca escaparle a la nieve. En cambio para nosotros, puede ser un atractivo la nieve. Conocer Canadá en invierno, es toda una experiencia. Aunque, para mí, es mejor en otoño, por el color de los parques y las hojas. 
 
¿Cómo se puede volar dentro de Canadá?
Las tarifas que  tenemos actualmente permiten muchos stops, con lo cual un circuito clásico queda cubierto. Las tarifas son muy competitivas. Se puede volar con una sola tarifa a la costa este, después cruzar al oeste, volver por ejemplo por Montreal y visitar cuatro ciudades con un solo boleto.
 
También tienen Canada Rouge, ¿qué características tiene esta empresa?
Rouge es una compañía de Air Canada que no es una Low cost, sino una compañía aérea vacacional, está hecha para competir con lo que demanda el mercado de vacaciones de Canadá. Sobre todo con muchos vuelos hacia Europa y el Caribe. No está pensada para el mercado corporativo. Es una compaña que nació con cuatro aviones y dos rutas, y hoy en día tiene más de cien rutas y 47 aviones operando, en tan solo cuatro años. Le está yendo súper bien. La tripulación, por ejemplo, está entrenada en Disney para atender al pasajero vacacional, que es un público muy distintivo. Eso es innovador. El modelo de negocio es muy exitoso, y está hecho para competir con transportadores vacacionales, que en Canadá hay muchos.
 
¿Qué otra novedades hay?
Todas las bases internacionales apoyamos las rutas a destinos que no son habituales naturalmente para el mercado. Por ejemplo, volar de Argentina a Europa vía Canadá, pero es una opción bastante elegida últimamente, más cuando hay tarifas competitivas. El último año hemos tenido sorprendentemente un número interesante de argentinos viajando a Europa con nosotros.
Estamos brindando Internet a bordo en los vuelos domésticos y a Estados Unidos, pero próximamente se brindará también en los B777 y B787.
En relación a Argentina recordemos que durante siete meses del año volamos con el B787, y desde noviembre a marzo, con el B777, que es un avión más grande, pasamos de tener 300 a 400 asientos. El año pasado nos fue muy bien. 
Y en cuanto a los interiores de los aviones todos los B777 fueron renovados a la versión del 787 logrando una homogeneidad en toda la flota.