Grupo Mexicana aceptó que pilotos y sobrecargos tengan participación accionaria en la empresa, misma que se concretaría en función de las aportaciones que los sindicatos realicen a la empresa en sus contratos colectivos de trabajo. A su vez, en entrevista radiofónica, Manuel Borja Chico, director general de la empresa, señaló que se requiere de una inyección de capital de entre 100 y 150 millones de dólares para que Mexicana pueda seguir volando.
En tanto, Adolfo Crespo, director de Servicio al Cliente y Comunicación Corporativa puntualizó que esos 150 millones de dólares permitirían solventar las deudas de Grupo Mexicana que supera los 14 mil millones de pesos. Respecto al ingreso de nuevos inversionistas, Crespo confirmó que numerosos grupos han mostrado interés, aunque aclaró que su participación sería del 25 por ciento de las acciones de todo el grupo que incluye además de Mexicana, Mexicana Click, y Mexicana Link. Viabilidad.
En este sentido y en el marco de las pláticas entre directivos e integrantes de las asociaciones sindicales de Pilotos Aviadores (ASPA) y de Sobrecargos de Aviación (ASSA), otro acuerdo fue invitar a un grupo inversionista "complementario" para participar en el capital social de Grupo Mexicana e inyectar recursos necesarios para dar continuidad y viabilidad a la compañía.
La empresa destacó que con la participación accionaria de los trabajadores en Mexicana (formalmente Nuevo Grupo Aeronáutico) —controladora de Mexicana de Aviación (CMA), Click, Link, además de MexicanaLoyalty y Mexicana MRO— "se demuestra la disposición de los actuales accionistas para diluir su participación en la medida que sea necesaria". Eso permitirá salvar a la compañía y preservar los más de 8,000 empleos que generan las empresas del Grupo y seguir sirviendo a los más de 11 millones de pasajeros que transportan anualmente.
Al respecto, la empresa resaltó que el acuerdo alcanzado es un paso relevante en beneficio de todos, por lo que reiteró su apoyo, solidaridad y reconocimiento a sus trabajadores, quienes "son el centro y el eje de la solución de largo plazo para la empresa", aunque reiteró que dados los problemas de flujo y la fragilidad financiera "el tiempo es un factor determinante para el futuro y la continuidad de la compañía".
Consultado por separado, Antonio Vargas Echegoyen, vocero de ASPA, puntualizó que el diferimiento en el cobro de salarios es una medida de apoyo por parte de los trabajadores, "es una especie de crédito para ayudar a que la aerolínea salga del bache en el que se encuentra". En este sentido, reconoció también que la empresa requeriría otro tipo de créditos para la compra de turbosina, pago de servicios aeroportuarios, así como de servicios a la navegación en el espacio aéreo.
Para hacer frente a esos compromisos, señaló que será necesario que Mexicana reanude sus operaciones y la venta de boletos para poder tener nuevamente flujo de efectivo, además de que "no está impedida por la IATA (Asociación Internacional del Transporte Aéreo)" y eso le permitiría ir recuperando su situación económica, consideró.
Logra el SNTTTASS un acuerdo Por considerar que se ha llegado a un acuerdo con Mexicana, el secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de Transportes, Transformación, Aviación, Servicios y Similares (SNTTTASS), Miguel Ángel Yúdico, confirmó que ya no acudirán a las mesas de negociación con la aerolínea. Debió aceptar un ajuste de 160 empleados de una nómina de 2,500 trabajadores.
Así, conformó que ya no asistirá a las reuniones que se llevan a cabo en la Secretaría del Trabajo, con directivos de la empresa y trabajadores de la misma, porque los empleados de tierra ya llegaron a un acuerdo con Mexicana "el problema ahora solamente son los dirigentes de pilotos y los dirigentes de sobrecargos". Sin embargo, advirtió que una eventual quiebra Mexicana de Aviación "arrastraría" a Click, y Link, porque hay muchas funciones como la venta de boletos y el mantenimiento de aeronaves que un trabajador realiza para las tres empresas.