El presidente del EMPROTUR, Héctor Barberis, afirmó que “vamos a tener un verano complicado”, ya que “los dueños de las agencias de viajes tienen dudas sobre lo que Bariloche puede brindar a los turistas, debido a la caída de cenizas que tanto afectó a la ciudad”. “Por esto tenemos que trabajar mucho para promocionar el lugar y demostrar que, a pesar de todo, Bariloche es una ciudad normal, maravillosa, con mucho para ofrecer”, dijo el empresario, quien se reunió ayer con el intendente electo, Omar Goye, y con el futuro ministro de Turismo de Río Negro, Angel Rovira Bosch, para delinear los pasos a seguir. Además, indicó que si todo sale como es esperado, el aeropuerto estárá funcionando con las mejoras realizadas a partir de fin de año, lo que "nos pondrá muy contentos a todos".
“Antes de la erupción del volcán Puyehue, habíamos hecho un buen trabajo para que nos vaya bien en la temporada de invierno, pero un hecho de la naturaleza cambió el eje de la dinámica de la ciudad”, expresó Barberis, quien enfatizó respecto las modificaciones en la vida cotidiana de los habitantes de la ciudad como un factor negativo. "Afortunadamente, sabemos hasta el momento que la ceniza no provoca daños en la salud".
“Esto generó que muchos turistas tengan dudas sobre venir a la ciudad, por las cenizas y por el problema de conectividad que existe debido al cierre del aeropuerto”, sostuvo. Aunque precisó que trabajarán para traer un turismo que puede movilizarse en la periferia, en donde no cayó tanta ceniza.
Ante esta situación, el empresario aseguró que desde el organismo que comanda, la estrategia que desplegarán será para apuntalar el turismo familiar, que “es el que viene en auto”, dijo, y explicó que se orientarán a trabajar “sobre los destinos que estén como máximo a 1200 kilómetros de distancia". Además, indicó que si todo sale como es esperado, el aeropuerto estárá funcionando con las mejoras realizadas a partir de fin de año, lo que "nos pondrá muy contentos a todos".
“Comunicar y promocionar, ese es nuestro rol, y eso haremos para demostrar que Bariloche es una ciudad que tiene mucho para dar”, indicó.
“La temporada de invierno que pasó fue la peor de la historia de Bariloche”, aseguró Barberis, y agregó que en 2011 arribaron a la ciudad cerca de 120.000 pasajeros menos que en 2010 (llegaron 220 mil, un 65% nacionales y un 35% internacionales), lo que generó un pérdida de 800 millones de pesos.
“El verano que viene no va a ser fácil, por eso estamos trabajando desde distintos sectores para sacar adelante la ciudad”, expresó en diálogo con “Del otro lado” (Radio O).
Barberis se reunió ayer con el intendente electo, Omar Goye, y con el futuro ministro de Turismo de Río Negro, Angel Rovira Bosch, para delinear cuáles serán los pasos a seguir. “Hicimos un diagnóstico de la situación para tener bien claro sobre dónde tenemos que trabajar para lograr que el turista venga”, explicó el referente del EMPROTUR.
Al ser consultado, consideró que el futuro ministro de Turismo de la provincia “es un profesional impecable, con una trayectoria muy buena y con un importante conocimiento de la ciudad”.
“Va a tener que tratar de que Bariloche mejore la actividad económica y también será importante que consiga posicionar la provincia. Hay mucho por hacer y vamos a acompañar”, indicó.
El empresario dijo que la articulación del Emprotur con la secretaría de Turismo municipal es un tema que no trató con el intendente electo, Omar Goye, pero indicó que apoyarán en lo que sea necesario.
De todas maneras, destacó que el área de Turismo “tiene un trabajo que a veces pasa desapercibido, que es la fiscalización de los servicios, lo cual es importante, ya que controla que se brinden con la calidad adecuada”.