La consultora AMF sostiene que a partir de las medidas económicas dispuestas por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y el Banco Central de la República Argentina (BCRA), el país “ahorrará” en 2014 alrededor de 3.000 millones de dólares en concepto de viaje, y se potenciará el turismo interno.

Según el informe de la consultora, publicado por Tiempo Argentino, el año pasado el turismo provocó la salida de 10.000 millones de dólares, lo cual “implicaría un déficit de divisas por el sector de 8.000 a 8.500 millones”.
Sostienen que con las decisiones político-económicas adoptadas no se volverá al superávit del 2010 (cuando se registraron US$ 294 millones a favor del país), pero sí se podrá revertir parcialmente la situación.
De acuerdo a lo explicado por Andrés Méndez, director de AMF, con la Resolución 3550, que grava en un 35% la compra de dólares y eleva a ese porcentaje el recargo para el uso de tarjetas de crédito, “el factor precio comienza a encarecer la posibilidad de viajar al exterior, tendencia que llegó para quedarse al menos por un tiempo”.
A raíz de esto, sostiene que “se verificará una merma en los viajes al exterior y una caída de 30% en las erogaciones por turismo, que equivaldría a 3.000 millones de dólares".

Estiman que se ahorrarán US$ 3.000 millones.
El relevamiento ya muestra que de enero de 2013 a enero de este año, se produjo "un encarecimiento nominal del tipo de cambio superior al 80%”, dado que no solo se comenzó a aplicar el recargo del 35% para la compra de dólares destinados a viajes, sino que además subió la cotización oficial.
Y lo mismo ocurrió con el  “dólar tarjeta” –el oficial más el recargo- cuyo incremento nominal fue del 62%. Hay que recordar que en un principio el recargo que se aplicaba era del 15%, se elevó al 20% en marzo (Resolución 3450) y al 35% en diciembre.
Como consecuencia de estas dos situaciones, el llamado “subsidio al viajero” ha ido disminuyendo y viajar fuera de Argentina resulta más caro, lo cual repercute positivamente en el turismo interno.
De hecho, sólo en el mes de diciembre –cuando comenzó  a regir la Resolución 3550- el número de argentinos en Uruguay se contrajo un 11% y en el acumulado del año la caída podría rondar el 3,3%.  
Como contraste, para la temporada de verano el ministerio de Turismo de Argentina espera un crecimiento del 10%, hasta alcanzar los casi 30 millones de arribos a destinos dentro del país.

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