La  Administración Federal de Ingresos Públicos tiene en la mira la actividad turística desde hace algunos meses con sendos informes sectoriales sobre el impuesto a las ganancias que agencias de viajes y empresas hoteleras tuvieron complicaciones en tributar. Ahora, la razón la tiene el sector turístico luego de un dictamen emitido por la entidad fiscalizadora. En el mismo, se asegura que las bases presuntivas sólo son aplicables cuando se dan ciertos tipos de factores en los comercios adheridos a las entidades nucleadas en Fehgra. Por un lado, que haya personal contratado en el establecimiento; que el comercio no haya presentado su declaración jurada o que esta aparezca como engañosa y, por otro lado, que la AFIP no tenga posibilidades de fiscalizar a la empresa.
“Si esta resolución se aplica como corresponde, la apoyamos plenamente porque ayudará a los empresarios honestos que cumplen con sus obligaciones, ya que permitirá combatir a la competencia desleal, que trabaja ilegalmente y no cumple con sus responsabilidades impositivas”, señaló Rafael Miranda, miembro del Consejo Directivo de Fehgra y miembro de la Comisión de Fiscalidad y Tributación de la entidad. Desde el organismo aseguraron que el escrito responde a un pedido de aclaración de FEHGRA al organismo oficial y asegura que “la interpretación que realiza la entidad guarda literalmente equivalencia con lo previsto en el artículo 3° de la Resolución General (AFIP) N°2927”.

Inicio de la polémica

El cortocircuito generado por la tributación del impuesto a las ganancias en 2009 entre la AFIP y las agencias de viajes y las empresas de hotelería comenzó con el 22º informe sectorial del organismo.  
El informe detalla que el 97,4 por ciento de las agencias de viajes son micro, pequeñas y medianas empresas que realizan el 48,3 por ciento del total de ventas del sector. En tanto, el 2,6 por ciento son grandes entidades que aglutinan el resto de las ventas (51,7 por ciento) e ingresan el 39 por ciento del impuesto determinado, mientras que las microempresas efectúan ventas por el 1,6 por ciento del total. Entre todos los contribuyentes de los servicios tributaron sólo $58 millones de pesos del impuesto en cuestión en el período fiscal 2009. En tanto, las empresas hoteleras facturaron en el último año fiscal 2009 unos $3883 millones, que representa el 0,3 por ciento de la economía, pero tributaron por el Impuesto a las Ganancias $118 millones. Estos datos brindados por el órgano fiscalizador empezaron un dilema que se está solucionando con el dictamen emitido