Turismo rural: ¿cómo impactan las altas temperaturas?
Mensajero dialogó con prestadores del segmento y funcionarios provinciales, quienes admitieron una baja en las reservas por el calor y las sequías.
El derretimiento de los glaciares a una velocidad nunca antes vista, las sequías y la lucha de la flora y la fauna para sobrevivir en escenarios de cambios repentinos y complejos que impactan gravemente en la biodiversidad, son solo algunos efectos del calentamiento global. Este impacto, es el que está sufriendo cada vez más el turismo rural.
La inestabilidad del clima que se da en muchos destinos está afectando la actividad turística, ya que el aumento de la temperatura puede dificultar la visita a varios destinos, sobre todo en verano. De hecho, los ríos también pueden verse comprometidos por el cambio climático, como la bajante que desde hace tres años se registra en el Río Paraná.
En este contexto, Mensajero dialogó con prestadores vinculados al turismo rural para interiorizarse en el tipo de oferta que tienen, con las readaptaciones que han tenido que realizar a lo largo de estos últimos años.
LA VISIÓN DEL SECTOR TURÍSTICO RURAL
Uno de los lugares más recomendados por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) para disfrutar del turismo rural es el Establecimiento La Angélica, ubicado en Concordia. Esta estancia, que fue propiedad de Justo José de Urquiza, fue adquirida por los descendientes de la familia hace 123 años. Con el correr del tiempo, la destinaron a actividades turísticas. Es un emprendimiento que ofrece alojamiento particular en edificaciones originales restauradas, en las que además existió la primera fábrica de lácteos de Entre Ríos, con el mismo nombre. También cuenta con otras opciones avistajes de aves, de insectos, de mamíferos y de flora. A su vez, se realizan safaris fotográficos, senderismo interpretativo, almuerzos y cenas con shows en vivo.
Martín Campopiano, titular del Establecimiento La Angélica, explicó a Mensajero: "Las altas temperaturas interfieren en los espacios naturales que tenemos. Venimos con un proceso de plantación de nativas que sinceramente nos ha complicado bastante por el sostenimiento y el cuidado que conllevan las nuevas plantaciones. Todo el calor nos dificultó y además implicó la utilización de varios recursos para cuidar la vegetación".
Otro de los prestadores que dialogó con este medio fue Pablo Vacca, dueño del Establecimiento San Rafael, ubicado en Chaco. Se trata de una familia dedicada a la producción agropecuaria con fuertes principios en la conservación del medioambiente para que el visitante pueda disfrutar de la flora y fauna. Los Vacca se dedican a la cría ganadera, ovina y equina con base pastoril, utilizando prácticas holísticas. Hace pocos años, más precisamente desde 2017, se iniciaron en la actividad apícola y en el turismo rural.
“En Chaco es habitual tener 35, 40 grados por día, es normal que tengamos que sentir esas temperaturas. No es lo mismo Buenos Aires, donde abundan el cemento, el asfalto y los edificios, a nuestra provincia, donde hay más césped y árboles en los que corre el viento. A nuestros visitantes les llama la atención eso, ver que hay altas temperaturas y sentir que es más llevadero que en otros lugares. Por suerte, acá la tierra absorbe el calor”, inició en su relato.
Sin embargo, al profundizar en los aspectos negativos, reconoció que más allá de las altas temperaturas, las sequías han impactado mucho en sus espacios al aire libre. “Tenemos un régimen anual de lluvias que varía entre los 1200 y los 1500 milímetros. Sin embargo, en los últimos tres años, el registro fue de 700 y 900 como máximo. A simple vista se nota en los colores de los paisajes. Por ejemplo, de la gama del verde pasamos al marrón. Al caminar por el césped parecería que se va pisando arroz, es muy difícil así", detalló.
EL ANÁLISIS DEL SECTOR PÚBLICO SOBRE EL TURISMO RURAL Y EL CAMBIO CLIMÁTICO
Alejandro Grandinetti, secretario de Turismo de Santa Fe, remarcó que la naturaleza sufre a raíz del intenso calor y las sequías: “Las altas temperaturas provocaron valores récords y retrajeron un poco la oferta turística de la provincia. Además, hay que tener en cuenta que el paisaje sufre una modificación, ya que las sequías generan cambios en aquellos espacios que tienen varios árboles y mucho verde. Lógicamente, estos cambios generan una pérdida en la biodiversidad".
En paralelo, Ariel Ybarra, presidente del Instituto de Turismo del Chaco, le explicó a Mensajero que la falta de lluvias afectan a los sectores productivos primarios, entre los cuales algunos ofrecen servicios ligados al turismo: “Más allá de las altas temperaturas, en Chaco estamos atravesando una instancia de sequía generalizada desde hace tres años. Estamos acostumbrados a las altas temperaturas, pero una instancia de sequía prolongada como la que estamos viviendo, realmente perjudica porque la falta de lluvia afecta a los animales y a las pasturas".
¿LAS ALTAS TEMPERATURAS Y LAS SEQUÍAS INFLUYEN EN LA CAÍDA DE LAS VENTAS?
Durante la charla, Vacca admitió que, a raíz del calor, han notado una baja en la cantidad de reservas que tenían pactadas: “Algunas eran de Córdoba, otras de Buenos Aires. De todos modos, también considero que pueden haber influido las razones económicas. La gente se está cuidando bastante del tema de los precios. Si bien no es un turismo demasiado caro, algunos viajeros tratan de ahorrar lo más que pueden".
Respecto a las sequías, indicó que una de las grandes consecuencias se ve en la fauna: “Los campos vecinos de muchos ganaderos se vieron afectados porque dependen del agua del Río Tragadero. Incluso, los esteros que nosotros visitábamos, que se proveen del agua de lluvia, tenían un metro y medio de profundidad, pero quedaron al margen. Desde hace tres años no podemos pasar ni con un canobote ni en kayak, así que los turistas no pueden ver ni a los carpinchos ni a los yacarés. Incluso, las cabalgatas y el senderismo tuvieron que cambiar los horarios, se empiezan a hacer a la mañana bien temprano o al atardecer".
A su vez, Campopiano admitió que hubo una merma en las ventas, principalmente porque la gente que iba a disfrutar los días de campo notó que el uso de la piscina era exclusivo para los huéspedes: “Si tuviéramos una pileta para visitantes, seguramente hubiésemos tenido un poco más de demanda y más trabajo. La decisión de tener una sola piscina reconozco que es una política nuestra precisamente porque no buscamos ser masivos. Preferimos que los huéspedes tengan los espacios más cuidados y puedan disfrutar al máximo. De todos modos, seguramente para las próximas temporadas trabajemos sobre un tanque australiano para reconvertirlo en una piscina para visitantes. Sin dudas, es lo que más nos pidió el público a lo largo de esta temporada”.
Por su parte, Leslie Cook, dueño de Casa de Esteros, en Corrientes, le reveló a Mensajero que no han tenido bajas en la ocupación ni perdieron ventas, pero reconoció que a raíz de las sequías, la fauna se concentra en los espacios que aún tienen agua y facilita su avistaje.
Consultado por este tema, Ybarra comentó que no han observado una baja en la comercialización, pero sí explicó que “el paisaje y los escenarios naturales no son los ideales por la falta de agua en algunas represas o lagunas".
Por último, Grandinetti detalló que, en las últimas temporadas, los volúmenes de ventas se fueron modificando: "La mayoría de los prestadores no se dedican cien por ciento al turismo. También tienen otro tipo de actividades agrícolas y ganaderas, están muy vinculados a las actividades primarias rurales. Sin embargo, hay algunos que se dedican por completo al turismo y muestran su preocupación por la problemática ambiental. Es uno de los temas que habitualmente aparece en la agenda. Ante este panorama, hay ciertas actividades que no se pueden hacer. Algunos se han incorporado recientemente, pero otros directamente han tenido que cerrar y dejar todo".
LAS RUTAS, UN PROBLEMA SIN SOLUCIÓN Y SU IMPACTO EN EL TURISMO RURAL
Durante las charlas, todos los entrevistados le comentaron a este medio que uno de los principales obstáculos que encuentran dentro del turismo rural es la falta de pavimentación en los accesos, una problemática que, sumada al cambio climático, repercute en la actividad turística. “El mayor inconveniente que presentamos es el poco o mal mantenimiento de las rutas y de los caminos rurales”, sostuvo Alexis Coria, de la Estancia El Ombú en San Antonio de Areco.
En torno a este tema, Cook pidió expresamente que se mejore la logística vial y que se pongan a punto los accesos: “Se está trabajando en la pavimentación de 40 kilómetros, desde Puesto Ciro a la entrada de la reserva. Esta es una obra que fue abandonada en 2015 y finalmente se retomó. Lo mismo sucede en los accesos del norte. Incluso, la ruta 41 está siendo enripiada”
A su turno, Vacca explicó que el segmento rural está inmerso en el estilo campestre, por lo tanto, es fundamental la accesibilidad: “Se nos han caído varias reservas porque desde la RN 11, para ingresar al establecimiento, tenemos siete kilómetros, de los cuales tres tienen ripio, pero los otros cuatro son de tierra. Los días de lluvia es intransitable, de hecho, si las personas no están acostumbradas al barro, tranquilamente pueden terminar en la cuneta”. “Tuvimos todo tipo de reuniones, pero desde 2017 no hemos visto ningún avance. El único apoyo que sentimos viene de parte del Instituto de Turismo de Chaco, pero pueden hacer hasta cierto punto. Nos invitan a participar de las ferias, nos incluyen en los temas de folletería y capacitaciones, pero hay cuestiones que son ajenas a ellos", finalizó respecto a este tema.
Finalmente, el secretario de Turismo de Santa Fe, al momento de ser consultado sobre esta problemática, reconoció que uno de los principales obstáculos que encuentra dentro del turismo rural es la accesibilidad, la regularidad de los servicios y la disminución de la oferta por la informalidad. “Actualmente estamos llevando adelante un programa muy ambicioso por parte del gobernador Omar Perotti. La idea es vincular, a través del programa Caminos de la ruralidad, diferentes emprendimientos y lograr que se mejore la accesibilidad. Nosotros consideramos al turismo como una industria que también tiene que ser apoyada con obras de infraestructura. Estamos tratando de facilitar este tipo de inversiones de parte del Estado provincial", concluyó.
