El Museo Provincial Molino Forclaz, de la localidad entrerriana de San José, realiza visitas guiadas teatralizadas que permiten conocer este espacio y acercarse a la Historia de la provincia desde una manera interactiva, original y artística. Varios actores interpretarán tareas, mantendrán diálogos y realizarán actividades propias de la época en que el molino estaba en funcionamiento. De esta forma, quienes participen de la actividad podrán revivir escenas de la vida doméstica entre 1850 y 1900. La actividad forma parte de las políticas de democratización de los bienes culturales llevadas adelante por el Ministerio de Cultura y Comunicación de Entre Ríos.

Su Historia
La familia de Jean Baptiste Forclaz casado con Joanna Morend, es una familia de inmigrantes Suizos que se instalan en la Colonia San José en 1859. Deciden trabajar la molienda de granos, para lo cual construyen un Molino a malacate, tirado por mulas, que se encuentra en un galpón contiguo a la casa. Con el tiempo, viendo que la necesidad de molienda en la Colonia va en aumento, deciden construir un molino más productivo. Encabeza dicha empresa su hijo Juan Forclaz, quien construye en el año 1888 un molino a viento, único en la zona, construido a copia de los molinos que existían en su país natal, de gran semejanza al estilo de los molinos holandeses, que se propagaron por toda Europa para la molienda.
Juan ayudado por sus hermanos y vecinos, terminó su obra en 1890. El gran problema que hubo con el molino a viento es que nunca llego a producir la cantidad de harina que ellos esperaban. Después de análisis realizados por ingenieros del porqué no funcionó el molino, llegamos a la conclusión que Juan copia todo, incluidos los velámenes, y en esta región los vientos necesitan otro tipo de aspas. En esa época no se conocían las aspas inclinadas.
Juan Forclaz muere muy joven a la edad de 44 años, víctima de una enfermedad que se llama manía y marasmo, hoy conocida como depresión o estrés. Dejó una familia numerosa, su mujer Margarita Pralong con gran esfuerzo tuvo que criar a sus nueve hijos, y la más pequeña nace 2 meses después de la muerte de Juan. Hoy día, una gran descendencia de esta familia vive en la zona como así también en distintos lugares de la Argentina.
El molino trasciende en el tiempo como un ícono con su historia y nos transporta a esa época de grandes emprendimientos logrados con mucho esfuerzo, y nos hace reflexionar sobre el valor que nuestros abuelos le daban a la palabra empeñada y al trabajo.
El molino a viento ha llegado a nuestros días como hace más de 120 años gracias a que un día, vecinos de la Colonia decidieron custodiar éste lugar histórico tan caro, a nuestros sentimientos.

Reconocimientos
El Molino Forclaz, fue declarado Monumento Histórico Nacional en 1985, por decreto Nº 3066 del Ministerio de Educación del Gobierno Nacional
En el año 2003 ha recibido la declaración, por decreto Nº 6676/03 como Patrimonio Histórico y Arquitectónico de la Provincia de Entre Ríos.
A partir del 02 de Julio de 2011, ha recibido el status de Museo Provincial Molino Forclaz, organismo dependiente de la Subsecretaria de Cultura de la Provincia de Entre Ríos.

La Asociación
La Asociación Amigos Molino Forclaz, nombrada como tal según resolución de Personerïa Jurídica Nro 086/87 es una entidad sin fines de lucro. La misma está constituida por vecinos de la región. Tiene como función primordial, ser la encargada de colaborar con el gobierno en las tareas de mantenimiento, preservación y conservación del lugar.

Situación Actual
Las instalaciones de Molino Forclaz, son consideradas de interés Turístico-Cultural por lo que se reciben gran cantidad de visitantes nacionales e internacionales. Se cuenta con visitas guiadas en horarios establecidos de acuerdo a la temporada y a estadísticas sobre la afluencia de público. Se realizan actividades culturales regionales y con muy buena repercusión por ser algo novedoso las Visitas Guiadas Teatralizadas. Allí se cuenta la historia con el guía vestido de época, y conjuntamente se ve a la familia de inmigrantes vestidos a la usanza, realizando las tareas diarias y compartiendo anécdotas de la Colonia. Todos los que presencian éstas guiadas, son testigos de algo mágico y emocionante que se produce; logramos unir pasado y presente, proyectando el futuro ya que los niños que presencian esta experiencia no se olvidarán fácilmente de la historia de