Con algo más de 2.000 turistas a bordo, amarró nuevamente este jueves en Puerto Madryn el imponente crucero “Infinity”, propiedad de la naviera Celebrity Cruises, el que por sus dimensiones se ha transformado en el único de los buques de pasajeros que toma amarras en el muelle multipropósito Almirante Storni y no en el puerto de cruceros ubicado frente al centro de la ciudad.

Un importante número de esos dos mil pasajeros tomaron excursiones para disfrutar de las bellezas naturales de las reservas faunísticas de Península Valdés, el Valle Inferior del Río Chubut y la pingüinera de Punta Tombo. Los restantes se trasladaron hacia el centro de la ciudad, para realizar algunas compras y conocer el sector comercial, lo que renovó la dinámica económica tradicional de jornadas en que llegan estos grandes buques.
El Infinity es considerado un buque categoría cinco estrellas, y que con sus 294 metros de longitud y 32 de ancho, puede transportar algo más de 2.000 pasajeros y casi mil tripulantes.
En esta oportunidad, además de las excursiones y el aporte económico al sector comercial y de operadores de la ciudad, desde la Administración Portuaria confirmaron que la agencia marítima contrató el servicio de más de media docena de camiones cisternas con combustible naval para reaprovisionar los depósitos del buque.
Por otro lado, más de media docena de ómnibus fueron destinados durante toda la estadía del crucero, al transporte de turistas desde el sitio 3 del muelle Storni hasta el centro de la ciudad. A su vez, fue confirmado también un importante movimiento de taxis y remises hacia las diferentes reservas de fauna y puntos de atracción próximos a la ciudad, más allá del alquiler de vehículos con chofer y mini buses que dispusieron las diferentes operadoras para contener la demanda de transportes hacia los atractivos.
De acuerdo a lo informado por el director operativo de la Administración Portuaria de Madryn, David Debunder, el Infinity “regresa la próxima semana desde Buenos Aires, para dirigirse nuevamente hacia el puerto de Ushuaia y de allí a terminales marítimas del Pacífico chileno”.
En cuanto a la agenda de arribos, “en cuatro días ingresa el crucero Minerva”, en una temporada que ha retomado su “ritmo habitual”, añadió Debunder.