Es sabido que al argentino le gusta mucho pasar unos días en el Caribe. El clima, las playas de arenas finas y el mar transparente son enormes atractivos para el turista.
Uno de los principales destinos caribeños es Aruba. Esta pequeña isla, cercana a Venezuela y Colombia, de 30 kilómetros por once de ancho, es un lugar fantástico para los miles de turistas que arriban año tras año. “Con 105 mil habitantes, casi el 100 por ciento vive del turismo. Toda la población habla cuatro idiomas: holandés; papiamento, lengua local; inglés y español. La moneda es el florín arubiano y no hace falta cambiar dinero, ya que todo está en dos monedas: los florines y los dólares”, comenzó diciendo Marcos Sydor, representante de la Oficina de Aruba en Buenos Aires, en su charla destinada a los agentes de viajes.
Sydor describió todos los detalles puntualmente y agregó: “Entre sus muchas ventajas vale la pena recordar que la isla se encuentra a sólo 10 horas desde Córdoba o Buenos Aires. No se le pide visa a los argentinos, ni comprobantes de salud o vacunas de ningún tipo”.
Las temperaturas más altas pueden alcanzar los 33 y 34 grados pero “gracias a su brisa constante, se hace más agradable. No hay épocas de lluvias ni huracanes” insiste Marcos Sydor al mencionar las bondades del destino.
Pero Aruba no es sólo playa: se pueden hacer compras, hay vida nocturna, restaurantes de calidad, 11 casinos y mucho más.
www.copa