La cadena hotelera presentó los detalles de su programa que incluye iniciativas para reducir el impacto ambiental de sus operaciones. 

El programa Pasión por la Sustentabilidad, desarrollado por Karisma Hotels & Resorts, consiste en una serie de iniciativas que tienen como objetivo reducir el impacto ambiental de las operaciones hoteleras, fomentar la conciencia ambiental entre los empleados y huéspedes, y apoyar a las comunidades locales. Karisma cuenta con hoteles en México, República Dominicana y Belice, con marcas reconocidas como Nickelodeon y Margaritaville.

Dentro de este programa, se implementan tecnologías ecológicas en todos los hoteles de Karisma, como sistemas de energía solar, iluminación LED y productos de limpieza biodegradables. Además de comprometerse a reducir el consumo de energía, agua y residuos, los hoteles Karisma trabajan en aumentar la conciencia ambiental a través de programas educativos y acciones de sensibilización. Esto incluye proporcionar información sobre prácticas sostenibles en las habitaciones de los hoteles y organizar actividades ambientales para los huéspedes, como ecoturismo y voluntariado en proyectos de conservación.

LAS CLAVES DEL PROGRAMA DE SUSTENTABILIDAD DE KARISMA

  • Energía limpia y eficiente

  • Mitigación y adaptación al cambio climático

  • Huella hídrica (los hoteles cuentan con sistemas de ósmosis inversa y la mayoría posee su propia planta de tratamiento de aguas residuales)

  • Economía circular y cadena de valor responsable

  • Operaciones seguras y control de riesgos

  • Alianzas con micro y pequeñas empresas

  • Proyectos de conservación y educación ambiental

karisma nickelodeon
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Nickelodeon Hotels & Resorts Punta Cana Margaritaville Island Reserve Riviera Cancún Azul Beach Resort Riviera Cancún

"Todos los hoteles de la cadena disponen de sistemas de purificación de agua y la mayoría cuenta con su propia planta de tratamiento de aguas residuales", detallaron. Asimismo, explicaron que Karisma Hotels & Resorts considera el consumo de agua como una prioridad, monitoreando el rendimiento y, cuando es necesario, invierte en medidas operativas para aumentar la eficiencia y reducir la demanda de agua.