Se inauguró en Madrid un hotel, destinado a la venta de arte. Fue realizado por la cadena hotelera Pavilions Hotels & Resorts. Se trata de un concepto denominado boutique art hotel. The Pavilions Madrid propone a sus huéspedes la experiencia de alojarse en una galería de arte. Una selección de obras de artistas reconocidos invade tanto los espacios comunes como las habitaciones y suites de este nuevo cuatro estrellas enclavado en el barrio de Chamberí.

El hotel pasa a ser una nueva sucursal de la Galería Álvaro Alcázar, que lleva desde 2006 dedicándose a la representación de artistas contemporáneos desde su espacio de la calle Castelló. De esta forma, The Pavilions Madrid se convierte en un espacio expositivo inusual en el que los huéspedes podrán disfrutar de piezas de arte contemporáneo, algunas creadas ex profeso para el hotel, que además podrán adquirirlas si así lo desean. Para esta fase inaugural se han seleccionado obras de los españoles Rafael Canogar, Guillem Nadal, así como de Simon Edmondson.

El edificio se ha sometido a una intensa rehabilitación en la que ha intervenido el estudio de arquitectura Marincola, que ha cubierto con papel Dedar las paredes, en tonos tierra, azules y rojos. El resultado son 25 habitaciones funcionales y tres suites, con terrazas incluidas. Las paredes sirven como telón de fondo para grafías en blanco y negro de las telas que cubren los cabeceros y los asientos laterales, que retratan impresiones de la antigua arquitectura madrileña.