Según el ministro, el déficit público actual hace «fiscalmente imposible» aplicar medidas como un IVA reducido, una medida que el PP prometió durante la pasada campaña electoral.
Soria, que clausuró el Foro de Turismo del PP, en el cual se presentó el libro blanco del Turismo de Andalucía 2012-2016, dijo que el Gobierno está trabajando para crear una hoja de ruta para los próximos cuatro años con los objetivos, herramientas y medidas necesarias para hacer del turismo uno de los sectores motores de la recuperación económica de España.
Por otro lado y haciendo alusión a planes como el Qualifica para la renovación de los destinos maduros, el ministro aseguró que apuesta por los convenios entre las administraciones para realizar mejoras en los entornos turísticos.
En el ámbito de la oferta, Soria argumentó que se tiene que fidelizar a los nuevos turistas y que desde las administraciones públicas se pueden flexibilizar los marcos reguladores para que las empresas que tengan financiación puedan llevar a cabo sus proyectos. También se refirió al turismo de sol y playa como el que tiene más peso, por lo que hay que mejorar la oferta de destino para luchar contra la existencia de países emergentes que ofrecen precios inferiores.
La sede de la Consejería. Antes de la intervención del ministro, el presidente del Partido Popular de Andalucía, Javier Arenas, sembró algo de dudas sobre su eterna promesa de traer la sede de la Consejería de Turismo a Málaga. El líder del PP dijo que quien sea consejero de Turismo de la Junta de Andalucía tendrá en Málaga «su despacho», asegurando que «no se trata de que Málaga vaya hasta la Junta, sino de que la Junta venga a Málaga».
Con sus declaraciones creó gran controversia, ya que en ningún momento mencionó que será la propia Consejería de Turismo la que se ubique en la capital, después de que lo venga prometiendo desde 2008. Así, Arenas siempre ha insistido en cumplir este compromiso en el momento en el que llegue a ser presidente de la Junta de Andalucía y así lo ha reiterado en innumerables ocasiones. No obstante, desde el partido aseguraron tras la intervención que el presidente del PP-A mantiene su intención de traer esta consejería a Málaga, pese a las palabras mencionadas en su discurso.
Durante el foro, Arenas consideró que en 30 años se han hecho «algunas cosas buenas en Andalucía», como la apuesta por la industria del turismo, de la que, sin embargo, señaló que necesita «una puesta al día, ya que evidencia síntomas de cansancio». «Se ha abusado de los datos de afluencia y se ha tratado a la industria como si fuera un fenómeno de masas. Pero la actividad turística tiene que huir de la mediocridad y de la autocomplacencia y no olvidarse de la calidad», opinó durante su intervención, a la que le siguió la del presidente del PP de Baleares, José Ramón Bauzá, en un acto que contó con la asistencia de numerosos miembros del partido y empresarios del sector.
Arenas y Bauzá apostaron por la proyección conjunta de la marca turística que es España, para que ésta sea punto de referencia y, de este modo, se mejore la imagen internacional que se traslada. «Tanto Andalucía como Baleares y Canarias representan marcas competitivas en la demanda turística internacional», indicó Arenas, aunque insistió en la necesidad de proyectar la marca España, algo en lo que coincidió con