El presidente de la Asociación Empresarial Hotelera de Madrid, Antonio Gil, ha manifestado su preocupación y la de todos los hoteleros madrileños por la campaña que están llevando a cabo las plataformas internacionales de reservas como Airbnb, Windu y Alterkeys dedicadas al alquiler turístico de viviendas y de habitaciones en domicilios privados ante las expectativas de una próxima regulación del sector.

Airbnb, la empresa norteamericana líder en este segmento, con presupuestos e ingresos multimillonarios, ha organizado una campaña de comunicación basada en supuestos estudios, elaborados por ellos mismos, que justifican la existencia de este tipo de negocio en el interés de los que ellos llaman anfitriones.
"El informe de Airbnb", explica el presidente de la AEHM, "es claramente tendencioso porque la realidad es que se trata de beneficiarse ellos mismos y a aquellas empresas que se han creado con la idea de tener un hotel, agrupando apartamentos o habitaciones en diferentes edificios ya sea por compra o subarriendo, pero sin tener que cumplir las exigencias que tienen los establecimientos reglados".
Y agregó: "Hablan de economía colaborativa cuando se trata pura y simplemente de un negocio sin cumplir normas, con total opacidad fiscal, con innumerables molestias a los vecinos del inmueble y con una inseguridad y desprotección total para los clientes como lo demuestran numerosas críticas de usuarios y las limitaciones en su web a las 'reviews' negativas".

Fuen