Alternativa al Camino del Inca
Para todos aquellos que quieran realizar una ruta alternativa al Camino Inca a Machu Picchu, la Ruta Salkantay se convierte en una propuesta más que recomendable, integrada por caminos que pasan junto a la montaña Salkantay, algunos de ellos conectados con el Camino Inca Clásico y que llegan hasta el poblado de Machu Picchu Aguas Calientes, a los pies de la famosa ciudadela inca.
La montaña Salkantay, de 6.271 metros, da nombre a esta ruta. Salkantay quiere decir "Montaña Salvaje" en quechua y, sin dudas, la ruta hace honor a este nombre al ser más larga que el Camino Inca Clásico y alcanzar mayores altitudes, todo un reto para los amantes del trekking.
Además, este nevado tiene la categoría de “Apu”, que en lengua Quechua viene a significar “señor”. Se define así a las grandes montañas que significan algo sagrado por encima de los valles.
El punto de partida del Camino Salkantay se encuentra cerca del pueblo de Mollepata, ubicado a una altura de 2.900 metros. La ruta suele durar cinco días. Un plan de ruta podría ser el siguiente:
Día 1: Atravesando las comunidades andinas de Cruzpata, Challacancha y Soraypampa, el itinerario de este primer día permite disfrutar de las magníficas vistas de "Apu Salkantay" y del valle verde del Río Apurimac. Soraypampa suele ser el punto en el que se ubica el campamento al finalizar la jornada.
Día 2: La jornada comienza con un ascenso de tres horas para llegar al paso de Apacheta, a 4.590 metros. Desde el paso, los excursionistas pueden ver las montañas Salkantay, Humantay y Huayanay. A continuación, tras unas cinco horas de descenso, los excursionistas llegan a Rayan-Niyoc o Chaullay para acampar en la noche.
Día 3: La ruta se dirige hacia Uscamayuc, donde los excursionistas llegarán al nicho del bosque de las nubes llamado la “Ceja de la Selva”. Esta selva alta destaca por la riqueza de especies, como la orquídea, o animales como el oso de anteojos (Tremarctos Ornatus) que pueden ser avistados por los excursionistas. El día acaba en el campamento La Playa (2.350 metros).
Día 4: Comienza con una caminata hacia el pueblo de Lucmabamba para dirigirse posteriormente al sitio arqueológico inca de Llactapata, a una altitud de 2.740 metros. En Llactapata, los excursionistas consiguen ver por primera vez la ciudadela inca sacrada de Machu Picchu.
Según estudios recientes, Llactapata podría haber sido un centro sagrado parecido a Machu Picchu, con una combinación distintiva de características geográficas y astronómicas.
La mejor prueba de su significado es la presencia de un templo solar que es similar en su tamaño y sus dimensiones al templo solar en Qoricancha (Cusco). Llactapata fue descubierta y estudiada por Hiram Bingham en 1912 y referida por él como "las ruinas de un castillo inca”. Sin embargo, su descubrimiento fue eclipsado por el de Machu Picchu. El último tramo del viaje, desde Llactapata, tiene como destino el pueblo de Aguas Calientes o incluso, si se toma el tren, Machu Picchu, donde los viajeros pasarían la noche.
Día 5: La última jornada transcurre en Machu Picchu, con el principal atractivo de la ciudadela inca y la posibilidad de visitar la montaña Huayna Picchu.
Para recorrer tanto el Camino Inca como la Ruta Salkantay es necesario hacer la reserva con los touroperadores autorizados y que cumplen con ciertos requisitos básicos como poseer guías profesionales, equipo de campamento en buenas condiciones, equipos de radiocomunicaciones y primeros auxilios (incluyendo oxígeno).
fuente: caribbean