La ciudad alemana de Inglostadt, en el estado de Baviera, podría ser el primer escenario de pruebas de los taxis voladores, vehículos que serán eléctricos y autónomos. Sus autoridades la han ofrecido como ciudad piloto de la UAM, un proyecto emprendido por la Asociación Europea para la Innovación en Ciudades y Comunidades Inteligentes (EIP-SCC) que cuenta con el apoyo de la Comisión Europea.

Movilidad en la tercera dimensión

Empresas, ciudades y sociedad civil están llamadas a cooperar para desarrollar lo que la UAM llama ‘movilidad en la tercera dimensión’. La iniciativa está liderada por la multinacional Airbus y cuenta entre sus socios con la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) y la Organización Europea para la Seguridad de la Navegación Aérea (Eurocontrol). Otras ciudades como Hamburgo y Ginebra ya forman parte de la iniciativa y, el pasado 17 de julio, se unió también la localidad búlgara de Plovdiv.

La iniciativa prevé la realización de diferentes demostraciones con prototipos en 2019 para afianzar colaboraciones público-privadas entre empresas, ciudades y regiones y lograr, en el siguiente paso, la financiación necesaria para la implementación de la UAM, así como su hoja de ruta.