Uno de los lugares más importantes de Italia es Roma, su capital. Y entre tanto lugar turístico por conocer y visitar, la famosa Fontana di Trevi es, sin duda, una de las más codiciadas. Conocida por ser uno de los monumentos más importantes del mundo, el auge del turismo hace que aumente en demasía y que miles de turistas se amontonen en las inmediaciones para sacarse una foto o tirar la tan famosa moneda. Sin embargo, en las últimas horas, una polémica medida por parte del gobierno italiano pone en jaque la visita de los turistas a la gran ciudad.

Con el objetivo de gestionar de forma diferente el intenso turismo que alberga Roma y conservar el monumento, desde Italia afirman que existe la posibilidad de imponer el cobro de un euro a los extranjeros que deseen acercarse a la Fontana di Trevi. Algo que, desde el Palacio Chigi, casa de gobierno italiano, no lo ven con malos ojos y que varios funcionarios del estado europeo aprobarían la medida. 

“Tenemos que rentabilizar nuestra riqueza, por eso está bien cobrar y crear un mecanismo de reservas, y no limitar número, para regular los flujos y ofrecer mejores y sostenibles servicios a los turistas”, confesó Daniela Santaché, ministra de Turismo de Italia con respecto al tema. Incluso, no fue la única sino que Roberto Gualtiere, alcalde de la ciudad y Alessandro Onorato, concejal de Turismo, también se sumaron al pedido.

El gobierno italiano tiene pensado cobrarle a los extranjeros en la Fontana di Trevi.

“La situación en la Fuente de Trevi se está volviendo técnicamente muy difícil de gestionar", expresó Gualtiere con cierto positivismo. Por su parte, Onorato, elevó el pedido a dos euros para preservar el tan emblemático monumento. "“Para los romanos estamos pensando en hacerlo gratuito, mientras que a los no residentes se les pediría un aporte simbólico, de uno o dos euros,” mencionó al diario italiano Il Messaggero.

Pese a que aun no hay nada confirmado, no sería la primera vez que Roma implemente el pago para la visitas de sus monumentos. Por ejemplo, la temporada pasada se introdujo una tarifa de 5 euros para acceder al Panteón solamente a los extranjeros. Para los residentes, continuó siendo gratuito. Y si a eso se le suma que Roma fue la ciudad turística líder en el último año, la chance de que comience a cobrar para la visita de sus monumentos sigue escalando. 

¿Qué otras ciudades adoptaron medidas similares?

En Italia, este tipo de medidas fue tomado en otros sitios. Por ejemplo, La Última Cena de Leonardo Da Vinci en Milán y la Galería Borghese en Roma, se deben hacer reservas previas mediante un sistema implementado por el gobierno. Incluso, otras ciudades europeas, tales como Barcelona, Venecia y Atenas, también adoptaron esta gestión con el paso del tiempo.

La Última Cena de Leonardo da Vinci también adoptó medidas económicas para los extranjeros.