El misterio continúa
Así lo explicó el primer ministro de Australia, Tony Abbott, cuyo país dirige las búsqueda en el océano Índico. "Es una operación extraordinariamente difícil. Estamos buscando en una vasta zona del océano y trabajando con información bastante limitada", dijo a la prensa en la base aérea de Pearce, en Perth, la capital del Estado de Australia Occidental.
"Las mejores mentes del mundo se aplican en este trabajo. Estamos utilizando todos los avances tecnológicos. Así que, si este misterio tiene solución, lo solucionaremos", añadió el gobernante según declaraciones divulgadas por las agencias informativas Efe y Europa Press.
Mientras hablaba el ministro, los equipos de rescate continuaban la búsqueda luego de que el domingo se vieron varios objetos naranjas en el océano Índico que, según los primeros análisis, no corresponderían al avión buscado.
Abbott recalcó que no se puso un límite de tiempo al rescate del avión desaparecido. "La intensidad de la búsqueda y la magnitud de las operaciones aumentan, no disminuyen", dijo.
Paralelamente, en Kuala Lumpur, la capital malaya, el ministro malasio de Defensa, Hishamudin Husein, anunciaba que se habían organizado para hoy una reunión de expertos con los familiares de los pasajeros chinos para que contesten a sus preguntas.
La búsqueda continúa
"Comprendemos que muchos familiares quieren ver pruebas antes de creer que el avión cayó en el sur del Índico", indicó el ministro.
El político malasio lamentó que en las actuales circunstancias sean incapaces de contestar las preguntas que más interesan a los familiares: dónde está el vuelo MH370 y las 239 que viajaban en él.
"La sesión informativa proporcionará a los familiares una oportunidad de escuchar directamente a algunos expertos que podrán explicar la búsqueda, datos y la metodología empleada", precisó Hishamudin.
Por su lado, los familiares de los pasajeros chinos prometieron que nunca perdonarán a quienes les ocultan la verdad.
"No vamos a perdonar a quienes causaron daño a nuestros seres queridos, a quienes nos ocultan la verdad y a quienes demoran la búsqueda y rescate", prometió un grupo de 40 familiares chinos en declaraciones al diario malayo The Star.
Este grupo cree que las autoridades malayas actuaron con lentitud cuando desapareció el avión y que buscan ocultar su responsabilidad.
Hishamudin confirmó que Pearce se convirtió en un centro de coordinación de las operaciones bajo el mando del exjefe de las Fuerzas Armadas australianas Angus Houston.
Australia, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Japón, Malasia y Nueva Zelanda cooperan en el reconocimiento de una extensa zona del Indico, a 1.850 kilómetros al oeste de Perth, en busca de una pista o un resto que confirme que se sigue el camino correcto.
Diez aviones y diez buques intervinieron en esta jornada de operaciones, la vigesimocuarta, durante la que se cubrió un área de 254.000 kilómetros cuadrados.
Las esperanzas disminuyen
Aunque el número de países que participan activamente en la búsqueda diaria descendió a siete, un total de 26 llegaron a colaborar durante las primeras semanas, hasta que los expertos concluyeron que el avión cayó en el sur del Índico.
El vuelo MH370 despegó de Kuala Lumpur con 239 personas a bordo rumbo a Pekín en la madrugada del 8 de marzo y desapareció de los radares civiles de Malasia unos 40 minutos después de despegar.
Embarcaron 153 chinos, 50 malasios (12 de la tripulación), siete indonesios, seis australianos, cinco indios, cuatro franceses, tres estadounidenses, dos neozelandeses, dos ucranianos, dos canadienses, un ruso, un holandés, un taiwanés y dos iraníes que utilizaron pasaportes robados a un italiano y un austríaco.
El examen de los datos de radar y satélite llevó a los expertos a concluir que el Boeing dio la vuelta, voló hasta el Estrecho de Malaca y acabó en el sur del Índico, en un lugar lejano de tierra firme y que no ofrece esperanzas de haya supervivientes.
Fuen