En un encuentro de Jóvenes Líderes a mediados del año pasado, el gerente general de LAN, Ignacio Cueto, dijo que estimaba que las aerolíneas regionales se reducirían a la mitad en Latinoamérica, con operaciones de absorciones y fusiones que se darían con el tiempo. No se equivocó. Sólo un par de meses después, el mayor grupo colombiano en la industria, Avianca, anunciaba su fusión con la salvadoreña TACA.
En la operación el controlador de Avianca, Germán Efromovich quedó con 67% de la compañía holding, mientras que Kinsland Holding Limited, controlador de grupo TACA, con el 33% restante. Las motivaciones de la aerolínea fueron muy parecidas a la que empujaron a LAN y TAM a proponer su fusión: competir por la supremacía en el mercado Latinoamericano.
Pero lo anterior no dudaría mucho. Avianca-TACA se configuró rápidamente como el mayor grupo de latinoamérica y al momento de su fusión, en octubre del año pasado, superaba en destinos a LAN y TAM por separado. Tras la operación de la empresa chilena y brasileña, el holding de Efromovich perderá algo de protagonismo. De acuerdo a las estimaciones de LAN, Avianca-TACA, por ganancias, cantidad de vuelos y pasajeros en 2009, se ubicará en el tercer lugar dentro de los grandes grupos latinoamericanos, tras GOL y superando a COPA.
Esta última compañía anunció su fusión con Continental Airlines en mayo pasado, con la promesa de generar sinergias para ambos competidores por US$ 900 millones a partir del año 2013.

El puntapié inicial en Brasil
Una jugada clave en el nuevo mapa de propiedad en Latinoamérica fue la compra de Varig por parte de GOL, la línea aérea de bajo costo. La operación se cerró en 2007 y la brasileña le ganó el paso a LAN, que también trató de hacerse de este activo. La compra inquietó al mercado, pues GOL pasaba por un excelente momento. La firma estaba valorizada en diciembre de 2007 en US$ 5.000 millones, lejos de los US$ 7.200 que alcanzó en octubre de 2006, superando a LAN que en esa misma fecha alcanzaba los US$ 4.500 millones.
Sólo TAM se ubicada por sobre la línea aérea de bajo costo, con una valorización de US$ 5.200 millones a la misma fecha.
Meses después y haciéndose cargo de la operación de largo alcance y centrada en el público business de Varig, GOL comenzó a registrar pérdidas. La caída fue vertiginosa, llevando a que el valor de la compañía se redujera a sólo US$ 1.300 millones hacia junio de 2009.
En la vereda contraria, LAN no descendió de los US$ 4.000 millones y TAM se mantuvo en US$ 3.500 millones. Pese los baches, GOL se ha ido recuperando y será el principal competidor de Latam, especialmente por la posición de mercado que tiene al