El Ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, anunció rebajas en las tasas aeroportuarias desde julio en el marco de Wings of Change, donde se analizaron los retos de la aviación comercial en la región.

En el marco de la última conferencia Wings of Change (WoC), la mayor cumbre de aviación de Latinoamérica y El Caribe, evento organizado por la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), y que tuvo lugar en Chile, el ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, compartió las medidas que se están tomando desde el gobierno en materia de infraestructura, seguridad, mejora en la calidad de los servicios y reducción de los costos de operación, que fueron los cuatro ejes de discusión del encuentro.

“Sabemos que esta es una industria global y entendemos las demandas”, comenzó la exposición del ministro argentino, y agregó: “Nosotros queremos que nos miren cada vez más, para que apuesten por la Argentina, para que inviertan, para que traigan más aviones, para que abran más rutas y podamos tener más oportunidades para los argentinos”. De esa forma, una de las principales figuras del gabinete macrista destacó: “Con ese objetivo es que estamos avanzando en este camino de seguir generando incentivos y ser más competitivos”.

Punto por punto

Sobre la reducción de costos en la operatividad, Dietrich informó que a partir de julio habrá una reducción del 3 por ciento para las tarifas internacionales que cobra Intercargo, empresa de ground handling, y del 2 por ciento en las de la Empresa Argentina de Navegación Aérea -EANA-. Es así que el anuncio se suma a las rebajas del 10 por ciento ya aplicadas durante 2016, también en internacional que es donde la Argentina se hallaba más alejada respecto a los países de la región.

En lo que a infraestructura se refiere, el ministro Dietrich resaltó que el país está teniendo la mayor inversión en su historia para modernizar 30 aeropuertos, con obras de ampliación de la capacidad, de mejoras en la calidad de los servicios y en mayor tecnología de navegación aérea para seguir mejorando la seguridad y la efectividad en las operaciones aéreas.

Por otra parte, resaltó las obras ejecutadas en pistas, plataformas, calles de rodaje, balizamiento y torres de control, fundamentales en lo que hace a la seguridad y la eficiencia de navegación. En los últimos dos años se construyeron las pistas de Chapelco, Trelew, Mendoza, Tucumán y Ezeiza, todas con nueva tecnología de balizamiento e iluminación.

Asimismo, se finalizó la construcción de las torres de control de Aeroparque e Iguazú, mientras continúa en ejecución la nueva torre de Ezeiza. Este año, además, se harán siete pistas a nuevo: la secundaria de Ezeiza (ya en construcción), Comodoro Rivadavia, San Juan, Córdoba; Salta (la principal y secundaria) e Iguazú.

Conectividad o muerte

Como era de esperar, de la participación no podía quedar relegada la tan mentada “Revolución de los aviones”. En sí, el funcionario habló sobre la importancia de Aerolíneas Argentinas como empresa estatal líder en cabotaje, que en los últimos años creció de forma exponencial y de manera sustentable.

No obstante, se le consultó sobre la posibilidad que sea privatizada, lo cual negó de manera categórica. “AR dejó de ser una herramienta política. A partir de un excelente gerenciamiento y una transformación en la forma de gestionar, hoy tiene más aviones, pasó de 75 a 89, tiene más rutas con conexiones fundamentalmente en el interior del país y a nivel federal, mejor puntualidad, menos cancelaciones, transporta más pasajeros, batiendo récords mes a mes; y todo esto lo hace habiendo reduciendo los subsidios con el objetivo para el año que viene de lograr el equilibrio.”

Por otro lado, repasó la llegada de nuevas operadoras en el sector, lo cual, contó, posibilita que cada vez los argentinos tengan más opciones a la hora de viajar, con mejores conexiones y mejores precios. De igual manera, remarcó: “El año pasado volaron en Argentina 15 millones de personas, lo que implica un crecimiento del 50 por ciento desde 2015. Esperamos para este año alcanzar los 19 millones. Y de la mano de ese crecimiento se está creando trabajo: vamos a tener 300 pilotos nuevos para fines de 2018 que se suman a los 130 nuevos del año pasado”.

La radiografía regional

Durante su discurso de apertura, Alexandre De Juniac, CEO y director general de IATA, repasó los principales desafíos que presenta la región al desarrollo de la aviación, industria que necesita fronteras que estén abiertas a las personas y al comercio. “Debemos ser una voz fuerte frente a aquellos con agendas proteccionistas”, espetó y agregó que le gustaría imaginar un futuro en el que las aerolíneas sean lo más libres posibles, para así satisfacer las demandas de conectividad. A su vez, indicó, se debe tener en cuenta que un conjunto común de reglas apuntala el éxito de la industria.

Actualmente, Brasil, México y Colombia se encuentran entre las mayores preocupaciones para IATA por las desviaciones en los derechos de los pasajeros. También hubo una mención para Venezuela, que atraviesa una situación particular. Por otro lado, De Juniac valoró los esfuerzos frente al desafío que presenta el impacto ambiental. “El histórico acuerdo sobre un Esquema de Compensación y Reducción del Carbono para la Aviación Internacional (CORSIA) es uno de los cuatro pilares de una estrategia común de la industria y los gobiernos para garantizar que la aviación cumpla con esta responsabilidad”, afirmó. Y amplió: “Instamos a todos los países de América Latina a que adopten con entusiasmo esta medida pionera y apoyen la adopción de los estándares de la OACI, necesarios para que el plan pueda implementarse a tiempo el 1 de enero de 2019. Nuestro compromiso de reducir las emisiones a la mitad de los niveles de 2005 para el año 2050 es ambicioso”.

La gran deuda

Pero no fueron todas buenas para el CEO de IATA. “En lo relacionado al crecimiento de la infraestructura, estoy profundamente preocupado”, apuntó y tiró que “la demanda crece más rápido de lo que podemos construir aeropuertos o mejorar la gestión del tráfico aéreo. Nos dirigimos a una crisis global. Los desafíos de capacidad en lugares clave del hub como Buenos Aires, Bogotá, Lima, Ciudad de México, La Habana y Santiago están bien documentados”. Y alertó: “A menos que se aborden, las economías de la región sufrirán. Si los aviones no pueden aterrizar, los beneficios económicos volarán a otro lado”. En relación a esto mencionó al aeropuerto de Ciudad de México construido para recibir un caudal de 30 millones de viajeros al año y hoy está manejando 47 millones, y aunque la solución es el nuevo aeropuerto que ya se está construyendo, su futuro se ha politizado en las actuales elecciones presidenciales.

También hizo referencia al aeropuerto de Santiago de Chile en donde “se está construyendo la capacidad terminal muy necesaria, pero Los costos están aumentando. Y no hay suficiente transparencia para entender por qué. Apoyamos el objetivo de duplicar la capacidad del aeropuerto a 30 millones. Y, al hacerlo, esperamos que las eficiencias de escala reduzcan los costos, ¡no suban!”, solicitó de Juniac.

Luego planteó: “Nuestras necesidades no son complicadas: capacidad suficiente, costos accesibles y calidad del servicio o excelencia técnica alineados con las necesidades del usuario. Para cumplir con esos requisitos, los gobiernos deben trabajar con la industria para desarrollar una estrategia y una visión a largo plazo para capitalizar el poderoso y positivo impacto de la aviación en la economía”, añadió.

La evolución de los cielos

“Los viajeros de la región se están beneficiando por una caída del 64 por ciento en los precios de boletos globales en comparación con 1990. La cantidad de opciones para viajar aumentó exponencialmente, con nuevas rutas y nuevos productos y servicios”, reflexionó el dirigente en relación al presente de la industria y los consumidores.

“América Latina es el hogar de algunas líneas aéreas de gran éxito. Nuestro anfitrión, LATAM, logró su mayor ingreso operativo en 2017 y se está expandiendo rápidamente. Tanto ellos como Avianca son líderes en la creación de marcas transnacionales para satisfacer las cambiantes demandas de los consumidores”, puntualizó De Juniac y sumó: “COPA obtuvo conectividad increíble a través de Panamá. Aeroméxico está profundizando su asociación con Delta para servir mejor a su mercado internacional más importante. Y el sector de bajo costo, después de pioneros como GOL y Azul, se está expandiendo rápidamente con muchos nuevos participantes”.

Por último, concluyó: “Sólo en la última década, el número de pasajeros transportados por las aerolíneas de la región se duplicó. En los próximos 20 años, esperamos un crecimiento anual promedio del 4.2 por ciento, de modo que se espera que más de 750 millones de viajes lleguen a la región para el año 2036”.

La primera vez

Luego de su disertación, Dietrich se reunió con directivos de Asociación de Transporte Aéreo de América Latina y Caribe (ALTA), quienes eligieron por primera vez a la Argentina como sede del Safety Summit: el encuentro técnico de seguridad más importante de la región.

“La seguridad es clave para que la aviación sea motor de desarrollo social y económico. Para nuestro gobierno es política de estado”, apuntó el ministro de Transporte nacional. “En ese sentido, explicó, “es un orgullo que ALTA nos elija para hacer su foro de seguridad, aprovechando además la apertura de los datos de Aerolíneas Argentina que enriquecen la Big data, el trabajo integrado y permiten trabajar en la planificación de la seguridad que trasciende fronteras y compete a toda la región”.