Nuevas exigencias
A través de la Resolución 23/2014, publicada el 6 de febrero en el Boletín Oficial, con la firma del ministro de Turismo, Enrique Meyer, se puso en marcha el nuevo reglamento de Turismo Estudiantil que obliga a las agencias especializadas a “contar con el Certificado Nacional de Autorización para Agencias de Turismo Estudiantil”.
A su vez, la flamante normativa les exige contratar seguros, a contar con un aval bancario y a suscribir un contrato de fideicomiso privado.
Bajo la lupa
La norma instituye que “las agencias (organizadoras o comercializadoras) no pueden comercializar viajes de estudios y/o viajes de egresados que tengan una fecha de iniciación posterior al 31 de enero del segundo año calendario posterior al de la solicitud o mantenimiento del Certificado Nacional de Autorización para Agencias de Turismo Estudiantil”.
Las agencias deberán presentar una declaración jurada anual, entre el primer día hábil de enero y el último de setiembre, que incluya el listado de autoridades, personal, coordinadores, promotores, cantidad de servicios programados, prestadores y una “memoria de actividades del año anterior”.
Por otra parte las empresas deberán informar la cantidad de plazas contratadas para cada viaje, “con comprobante que acredite que abonaron como mínimo el 30 por ciento, si se trata de un viaje por la Argentina, y del 100 por ciento cuando se trate del exterior”; así como también una síntesis de los paquetes ofrecidos e indicar las páginas de Internet que utilizan para promocionarse.
Desde ahora tendrán que presentar también una nota con la conformidad del establecimiento educativo, un certificado de pre-compra con calificación o póliza de seguro de caución, una carta de intención consignando su disposición a efectuar un aval bancario y otra expedida por una Sociedad de Garantía Recíproca (SGR).
En busca del OK
La autoridad de aplicación “podrá denegar o cancelar la autorización para operar hasta tres veces, por lo cual las agencias tendrán que pagar 600, 1.000 y 2.000 pesos, respectivamente, y no podrán operar durante tres, seis y 12 meses, según el caso”.
Deberán pagar un arancel anual de 1.500 pesos para la renovación del Certificado de Autorización, en el caso de las comercializadoras y de 3000 en el de las organizadoras, y presentar los contratos “con antelación mayor a los 60 días del inicio del viaje”.
Se creará un Fondo de Turismo Estudiantil, mediante el cual los organizadores deberán suscribir un contrato de fideicomiso privado con el objeto de “garantizar las obligaciones frente a eventuales incumplimientos, para lo cual deberán abonar el 6% del total de cada contrato individual a Nación Fideicomisos S.A., que actuará como fiduciario.
Las agencias deberán contratar un seguro de responsabilidad civil, que deberá ser presentado anualmente, por 300 mil pesos para servicios dentro de la Argentina y por 500 mil pesos en el exterior y deberán contar con seguros de accidentes personales
Los coordinadores
La Resolución indica que deberán tener más de 21 años, secundario completo y sin antecedentes criminales, y sus funciones comprenderán hasta 60 turistas para los casos de viajes de estudio, en donde también deberán concurrir, como mínimo