Dentro del Plan Motosierra de Javier Milei, el cual consiste en achicar abruptamente los gastos por parte del Estado, uno de los principales blancos es Aerolíneas Argentinas. El nuevo presidente buscará la privatización de la línea de bandera nacional.

Tal como había asegurado en su plataforma electoral y reafirmó durante la campaña, el plan de Javier Milei consta en entregar las acciones de AR a sus empleados, ya que considera que es una de las empresas estatales que más déficit ocasiona.

Además, esta iniciativa surge bajo el objetivo de La Libertad Avanza de impulsar a un libre mercado aún más competitivo. De esta manera, en caso de que Aerolíneas Argentinas sea privatizada, las low cost cumplirán un rol más protagonista.

A su vez, tras ser electo presidente, Javier Milei confirmó que su plan sigue firme y, también, remarcó: “El personal de Aerolíneas es muy calificado; el problema es la contaminación política”.

Máximo Kirchner presentó un proyecto en defensa de Aerolíneas Argentinas

MÁXIMO KIRCHNER, EL CONDUCTOR DE LA ESTATIZACIÓN

Previo a la campaña electoral, cuando Javier Milei ya había manifestado su intención de privatizar empresas estatales, Máximo Kirchner, diputado de Unión por la Patria, presentó un proyecto de ley para evitar que la oposición (a partir del 10 de diciembre oficialismo) avance sobre Aerolíneas Argentinas.

En este sentido, Kirchner auguró el objetivo de reformar la ley 26466/2008, la cual declara a AR de utilidad pública, y solicitó que “se prohíban las transferencias de acciones pertenecientes a la línea aérea de bandera sin la autorización de los dos tercios de las Cámaras de Diputados y Senadores”.

Si bien en agosto la oposición de Juntos por el Cambio rechazó la iniciativa y se retiró de la Comisión de Legislación General, el proyecto continúa en evaluación en la Cámara de Diputados.