Empresas gastronómicas de jujuy "asfixiadas" por impuestos
Un grupo de empresarios gastronómicos de Jujuy aseguró que el sector se siente "asfixiado" por las presiones tributarias nacionales, provinciales y municipales, y que pronto podrían suspender o despedir gente. Autoconvocados y preocupados se declararon "en emergencia" por la situación económica y aspiran a encuadrarse en beneficio de una ley para aminorar la presión "Queremos plantear la asfixia, la emergencia laboral en la que nos encontramos todos los gastronómicos de Jujuy, propietarios de restaurantes, de confiterías, de bares o afines. Además de que tenemos la inflación a nivel nacional, también tenemos presión provincial y municipal", explicó Claudia Sánchez, propietaria de un restaurante local.
El sector preocupado por la crisis, planteó que se sienten agobiados por las presiones tributarias. Se expresaron Claudia Sánchez, Pedro Duhart, Roberto Severich, Cecilia Paredes, Cintia Vacaflores, Ricardo Agüero, Gustavo Otero, Gustavo Vaca e Isabel Mitj.
Plantearon que la presión provincial es la que le ejercen desde la Dirección de Trabajo, y aseguraron que tienen un doble control del organismo nacional y provincial, y otras dependencias.
"A los comercios que estamos en el centro nos deben visitar en la semana por lo menos cuatro veces de diferentes lugares", afirmó Sánchez.
En materia de control municipal, afirmaron que no sólo son visitados por Control Comercial sino que los controlan, los multan y les piden canon. Precisaron que por cada mesa en la vereda deben pagar un canon de $588 más gastos administrativos.
"Nosotros tenemos que pagar para trabajar y dar trabajo, somos dadores de trabajo. Cada uno de nosotros por lo menos tiene cinco empleados", aseguró Sánchez.
Por otro lado plantearon que padecen también otras consecuencias del impacto de la crisis actual al igual que otros sectores económicos. "Hay muy poca venta y suben los impuestos", agregó Pedro Duhart, mientras otros dijeron que suma la suba del costo de la mercadería. En ese sentido enfatizaron que el sector agrega valor a la mercadería, y suma la mano de obra, y a la hora de reponer la mercadería se encarece. De hecho, sobre proveedores aseguraron al unísono que las cuentas corrientes están suspendidas, inclusive de bebidas y carne, que deben pagar en el día con lo cual apremia vender. Dijeron que "por convenio" además deben dar de comer a los empleados según el horario en que trabajan y es un gasto más que deben afrontar.
Por su parte, Federico Posadas, Ministro de Cultura y Turismo de Jujuy, señaló: "A los restaurantes turísticos les va bien. En promedio un restaurante jujeño factura 15 por ciento al turismo" y, aclaró que "la crisis tiene que ver con la economía, no con el turismo".
Por ello esperan poder acogerse a la Ley de promoción y empleo que beneficia respecto a impuestos provinciales. Insistieron en que sienten que persiguen al sector registrado. "No podemos seguir aguantando tanta presión porque vamos a tener que empezar a dejar a personal sin trabajo o suspenderlo temporalmente", advirtieron. Además plantearon que muchos "están cerrando los comercios" y es que asumen que "no solo es la baja de personal, sino que no llegamos al punto de equilibrio financiero, cobramos y pagamos y todo lo que se devenga entra a formar el pasivo de la empresa, y cuando tenés tanto pasivo, cerrás",
Altos alquileres, tarifazos y pocas ventas
Plantearon además que otro de los factores que genera la “asfixia” económica del sector gastronómico es el de los alquileres. Aseguraron que varios integrantes del grupo de empresarios pagan alquileres que rondan entre los 40 y 60 mil pesos, y hay otros que llegan a pagar hasta 100 mil pesos por mes.
Asumieron también que en virtud de las características del rubro, deben pagar altas facturas de servicios de luz y gas. Una de las integrantes afirmó que pagó 37 mil pesos de luz, y que es difícil de evitar porque no pueden dejar de prender la luz, el aire acondicionado y en invierno la calefacción. El gasto del gas también sumaría, y es que también es indispensable por tratarse del sector gastronómico.
Explicaron que se trata de un sector estacional, que si bien trabajó bien en julio durante las vacaciones de invierno a raíz del turismo, en agosto fue poco y en septiembre casi nulo, aduciendo que sólo llegó a la provincia público adolescente, que -afirmaron- no consumen en ese sector. “Si nos quieren decir que la Fiesta de los Estudiantes trajo turismo y trabajo estamos totalmente equivocados”, agregó Sánchez.
Planteó que no dan más pero se sienten “usados” cuando se habla de un destino turístico porque asumió que es el sector que atiende al turismo junto a hoteleros y taxistas.
“Necesitamos la ayuda del Gobierno, porque qué más quisiéramos recibir turistas de todo el país y a nivel internacional pero si no nos ayudan no podemos”, afirmó Cintia Vacaflores en referencia al posicionamiento turístico en el que busca avanzar la provincia.
Fuente: www.eltribuno.com