Aviones: ¿Revolución o Involución?
El Ministerio de Transporte, a cargo de Guillermo Dietrich, tuvo aciertos y errores, aunque algunas compañías aéreas sufrieron más de lo previsto.
Con la asunción de Alberto Fernández como nuevo presidente de la Nación, la “Revolución de los Aviones” llegó a su fin, o mínimamente, quedó stand-by. A través de la gestión de Guillermo Dietrich, ahora ex ministro de Transporte que será suplantado por Mario Meoni, el gobierno de Mauricio Macri se propuso desarrollar al máximo el mercado aerocomercial con el objetivo de bajar los costos que debían afrontar las empresas, disminuir el precio de los pasajes aéreos para los turistas, y unir de forma directa las ciudades más importantes del país para evitar las escalas obligatorias en Buenos Aires.
Más allá de los contrastes que pueden resultar con opiniones a favor o en contra del gobierno macrista, los años de Guillermo Dietrich al frente de Transporte fueron muy activos. Llegaron las aerolíneas low-cost y se establecieron nuevas compañías enfocadas en una flexibilización orientada a conectar ciudades un tanto “aisladas”. Esto significó, afortunadamente, la posibilidad de que miles de argentinos cambiaran su forma de viajar y muchos de ellos puedan subirse a un avión por primera vez.
Como aspectos positivos, junto con la apertura del mercado aerocomercial, la Administración Macri decidió sostener a Aerolíneas Argentinas y Austral. Al comienzo pareció imponerse el objetivo de reducir el déficit a través de la eliminación de algunos gastos, la renegociación de contratos, y la ampliación de rutas y operaciones. En materia aeroportuaria, la gestión Macri - Dietrich mejoró notablemente los aeropuertos y habilitó la inactiva base militar de El Palomar como primer aeropuerto low-cost en la región.
Sin embargo, no todo fue “color de rosa”. Con el correr del tiempo, algunas aerolíneas comenzaron a sufrir ante los interminables vaivenes económicos que suele atravesar Argentina desde hace décadas…
Flyest canceló vuelos
Si bien estaba previsto que para el verano la conexión se suspendiera para ser retomada posteriormente en marzo, la Cámara de Comercio Exterior del Norte Santafesino (CCE) y la compañía aérea decidieron cancelar en noviembre el servicio que conectaba desde agosto dos frecuencias semanales desde la ciudad de Reconquista hacia el Aeropuerto Metropolitano de Santa Fe y el Aeroparque Jorge Newbery, ubicado en Capital Federal.
Desde la entidad empresaria, que promovió el regreso de los vuelos luego de la retirada de Avianca Argentina, aseguraron que la devaluación post elecciones primarias atentó contra la venta de los pasajes. “Vamos a evaluar el panorama económico del nuevo gobierno y eventualmente se reanudará el puente aéreo”, explicó Marcelo Alal, vicepresidente de la CCE.
Durante tres meses, el Bombardier CRJ 200 con capacidad para 50 pasajeros viajó por los cielos del norte santafesino dos veces por semana ida y vuelta. El vuelo salía los lunes y los jueves de Aeroparque a las 18 y, previa escala en Santa Fe, llegaba a las 20 a la terminal ubicada en Reconquista, donde opera la III Brigada Aérea.
El avión pasaba la noche en el norte y el viaje de vuelta comenzaba a las 6.30 de la mañana para arribar a la Capital Federal a las 8.55, contando la escala en el aeropuerto de Sauce Viejo.
Lo cierto es que si bien el servicio tuvo una muy buena aceptación en las primeras semanas, el encarecimiento de los tickets a partir de los costos en dólares que insume la operación aeronáutica hicieron que un promedio de 20 pasajeros llegaran vía aérea a Reconquista, situación que estaba por debajo de los cálculos necesarios para hacer rentable el corredor.
“Lo que buscamos hacer es proteger también la inversión de nuestros asociados, ya que como entidad promotora, la Cámara garantizaba una precompra de pasajes que nos estaba resultando complicado colocar en la región”, indicó Alal.
La situación de Andes
La compañía dejó sin efecto la noche del jueves 31 de octubre todos sus vuelos en el país después de que Chubut no cumpliera su promesa de darle un anticipo en combustible, a cuenta de su deuda, que rondaba los 280 millones de pesos.
La Legislatura de Chubut aprobó el proyecto de ley enviado por el Ejecutivo provincial, que fijaba el pago en bonos de 199 millones de pesos sobre un total de 280 millones que le adeudaban a la aerolínea.
Para calcular el importe, se tomó de base el valor del combustible para aviones en el Aeroparque Jorge Newbery, que cotiza a $56,57 el litro. De esta forma, el dinero será abonado con Títulos de Cancelación de Deuda Pública Provincial (Ticadep).
Ese dinero es esencial para su continuidad: le permitiría no sólo retomar sus vuelos habituales, sino también abonar los cuatro meses de sueldos adeudados a sus 320 empleados, además de contar con recursos a futuro, en un contexto difícil para la industria aérea nacional.
“La situación se nos complicó mucho por el aumento en el precio de los combustibles y porque la provincia de Chubut nos adeuda alrededor de $280 millones en combustible, con lo cual nosotros garantizábamos la operación”, declaró Horacio Preneste, gerente general de Andes Líneas Aéreas.
“YPF no nos financia el combustible y para evitar problemas y que el mal sea peor, decidimos suspender las operaciones hasta el lunes, cuando retomaremos normalmente”, agregó.
Respecto a las frecuencias que Andes tenía a Bariloche, Córdoba y Mendoza, Preneste señaló que “son mercados saturados, con los que no podemos competir y por eso hemos decidido no volar más, al menos mientras se mantengan estas condiciones, a esos destinos”.
Más allá de las complicaciones, Andes está enfocado en volver a volar, y para ello mantiene las rutas de Iguazú, Jujuy, Salta, Puerto Madryn y Comodoro Rivadavia, después de cancelar las rutas a Bariloche, Mendoza, Córdoba y Tucumán, además de discontinuar los chárter internacionales y vuelos de egresados.
Norwegian dice adiós
Lo que se anunciaba desde hacía varios meses, pero nadie se atrevía a confirmar, finalmente tuvo un final nada feliz (por lo menos para quienes apostaben fuertemente a la calidad del servicio que brindaba y el respaldo de su casa matriz en Noruega): JetsMart anunció la compra de las rutas nacionales de Norwegian Argentina, absorbiendo a sus empleados y quedándose con sus slots en Aeroparque.
La medida no será efectiva hasta fines de marzo del 2020, hasta cuando seguirán operando como hasta ahora.
“Estamos muy entusiasmados con la oportunidad de combinar las operaciones de Norwegian Argentina con nuestras operaciones actuales de JetSMART. JetSMART tiene un compromiso a largo plazo con Argentina como mercado clave en nuestra visión de convertirnos en la aerolínea líder de ultra bajo costo en Sudamérica. Con esta transacción continuaremos ofreciendo viajes aéreos accesibles a nuestros clientes tanto desde Aeroparque como desde El Palomar. El modelo de negocio de JetSMART fue diseñado para tener bajos costos operativos, con una operación segura y eficiente, lo que nos permite hacer que el valor del boleto sea más accesible para el pasajero. No se trata sólo de tarifas bajas. Es un modelo donde el pasajero paga por lo que quiere usar y sólo eso”, dijo Estuardo Ortiz, CEO de JetSMART.
Los Boeing 737 de Norwegian Argentina, continuarán operando unos meses más, mientras son reemplazados por Airbus A320 de la orden de aviones de JetSMART.
Menos de un año para American Airlines
Lamentablemente la empresa norteamericana anunció que desde el mes de mayo del 2020 desprogramará los vuelos entre la ciudad de Córdoba y Miami debido a la baja rentabilidad, producto de la fuerte devalución del peso argentino.
“A ha servido orgullosamente a Argentina por casi 30 años y con este cambio American continuará ofreciendo 31 vuelos semanales entre Buenos Aires y nuestros hubs en Miami, Nueva York-JFK, Los Ángeles y Dallas/Fort Worth”, informaron en un comunicado.
“American Airlines evalúa constantemente su red en función a la oferta y demanda para cada ruta. Queremos asegurar que nuestra flota y tripulaciones estén sirviendo rutas que son rentables, posicionándonos mejor para el éxito a largo plazo frente la competencia global”, concluyeron.