Marcos Cohen Arazi y Bautista Martina Baldi presentaron el Informe de Coyuntura del IERAL, elaborado por Fundación Mediterránea. En el documento se analizó la actividad del turismo receptivo en relación con años anteriores y se remarcó su alta tendencia. Además, se compararon las estadísticas con la práctica emisiva, la cual no logra reactivarse a niveles prepandémicos.

Bajo este contexto, en primera medida se destaca que el turismo receptivo alcanzó el tercer mejor registro desde la pandemia. En junio, superó por 3 % la actividad registrada en el mismo mes de 2019. A su vez, el informe revela que, en lo que va del 2023, ingresaron al país más de 3,5 millones de turistas extranjeros y se pronostica que para fin de año se llegue a los 7 millones.

También, se detectó una marca inédita: en abril, mayo y junio de este año, Argentina recibió más turistas extranjeros que la cantidad de argentinos que viajó al exterior.

Asimismo, entre los factores que condicionaron el incremento de porcentajes se encuentran la exitosa promoción turística de Argentina y el tipo de cambio alto, lo que beneficia a los extranjeros. Sin embargo, los investigadores explican que el principal motor del repunte fue la llegada de turistas de países limítrofes.

En este sentido, según el informe, el turismo receptivo por parte de países limítrofes se encuentra un 12 % por encima de los niveles prepandémicos, teniendo como pico máximo los registros de mayo, donde la visita fue un 24 % superior al mismo mes de 2019.

En cambio, el turismo receptivo no limítrofe continúa un 20 % por debajo de los números previos a la pandemia, teniendo como marca más alta a marzo, donde se mantuvo a un 5 % del mismo mes en 2019.

 Turismo emisivo.
Turismo emisivo.

EL TURISMO EMISIVO SE QUEDA ATRÁS

A diferencia del receptivo, el flujo de salida de viajeros continúa sin repuntar. Esta premisa queda reflejada en que, a partir del informe, en junio se registró el menor nivel de la actividad en 10 meses: llegó a apenas a un 69 % en comparación al mismo mes de 2019.

De esta manera, en el primer semestre de 2023, el turismo emisivo obtuvo 4,5 millones de viajeros, de los cuales más de la mitad correspondieron a enero y febrero. Sin embargo, esta cifra queda minimizada respecto a las estadísticas de la actividad receptiva en el mismo periodo.

En comparación, en lo que va del año, se registró un promedio de 1,3 viajeros argentinos al exterior por cada turista extranjero que llegó al país, y, además, se espera que esta cifra continúa disminuyendo hasta diciembre.

 Turismo receptivo.
Turismo receptivo.

EL TURISMO RECEPTIVO COMO MOTOR PRINCIPAL DE LA REACTIVACIÓN ECONÓMICA

A pesar de que el turismo fue uno de los sectores más golpeados por la pandemia y en 2021 registró su nivel histórico más bajo de ingresos, el informe asegura que, en 2023, la industria vuelve a recomponerse económicamente a partir del flujo de visitantes que recibe la Argentina. De hecho, los ingresos del primer trimestre del año fueron un 5 % mayores al mismo periodo en 2020.

Por lo tanto, los investigadores aproximan que los ingresos por turismo internacional del 2023 rondarían cerca de los 5000 millones de dólares, superando el promedio de los últimos 17 años y de los niveles de 2019.

Además, se estima que turismo extranjero en el país reciba ingresos entre 94 y 109 millones de dólares por semana, impulsando notablemente la actividad del sector.